ROME, Georgia. La representante Marjorie Taylor Greene (R) ganó las primarias republicanas de la Cámara de Representantes de EE.UU. en el 14° distrito del Congreso de Georgia el 24 de mayo.
Con el 67 por ciento de los precintos informando a las 9:39 p.m., Greene recibió más del 69 por ciento de los votos y Decision Desk HQ la proyectó como la ganadora.
Greene se enfrentará al demócrata Marcus Flowers en las elecciones generales. Flowers, que recaudó más de USD 8 millones, ganó las primarias demócratas con más del 74 por ciento de los votos.
«Esto es un referéndum sobre el establishment de Washington y los medios de comunicación. Me han atacado y me han difamado una y otra vez. Han intentado sistemáticamente engañar a la gente de mi distrito y de todo el país sobre quién soy», le dijo Greene a una multitud de partidarios poco después de ganar.
“Ganar por un margen tan grande muestra que la gente aquí no cree las mentiras y los mensajes negativos, y muestra que la gente ve que estoy defendiendo los valores que son importantes para ellos y para todos nosotros como estadounidenses”.
Greene, un pararrayos político, era relativamente desconocida en su distrito del norte de Georgia hasta que dejó el mundo de los negocios por una candidatura exitosa a la Cámara de Representantes.
Al principio de su mandato de primer año, Greene se encontró con lo que en ese momento se consideró un revés cuando los demócratas de la Cámara de Representantes, y 11 republicanos, votaron para sacarla de las asignaciones del comité debido a sus «creencias escandalosas» y sus controvertidas publicaciones en las redes sociales.
Greene, una defensora abierta del expresidente Donald Trump y de su plataforma «Estados Unidos primero», presentó dos veces artículos de juicio político contra el presidente Joe Biden.
Ella emergió como una crítica abierta a los mandatos de vacunas contra el COVID-19 y fue multada fuertemente por no usar una mascarilla en el pleno de la Cámara.
Este año, Greene votó en contra de casi todos los proyectos de ley relacionados con Ucrania en el Congreso desde que Rusia lanzó su invasión.
Greene también ha recibido críticas tanto de demócratas como de republicanos porque pidió que se pasara lista sobre una serie de proyectos de ley. Muchos proyectos de ley generalmente se aprueban mediante voto de voz o consentimiento unánime, lo que, según Greene, no siempre refleja un recuento exacto, ni les da a los votantes una idea real de quién votó por qué.
“El pueblo estadounidense merece saber cuál es la posición de su miembro del Congreso con una votación nominal”, dijo Greene. “Mientras miles de extranjeros ilegales están invadiendo la frontera abierta de Biden, los niños estadounidenses están perdiendo su educación con las escuelas cerradas. Miles de pequeñas empresas se han visto obligadas a cerrar. A la gente realmente no le importa que los políticos se quejen de votar y hacer su trabajo durante 10 horas”.
En nombre de cinco votantes en el Distrito 14, un grupo nacional de reforma de financiamiento de campañas y elecciones llamado Free Speech for People intentó prohibir que Greene se presentara a la reelección en abril.
El grupo alegó que Greene tuvo un papel importante en la recámara del Capitolio de EE.UU. el 6 de enero de 2021. Argumentaron que sus acciones violaron una parte de la Enmienda 14 con respecto a la insurrección, lo que la hace inelegible para buscar otro mandato.
A principios de mayo, el juez de derecho administrativo de Georgia, Charles Beaudrot, decidió que Greene era elegible para permanecer en la boleta electoral y dictaminó que los votantes no proporcionaron pruebas suficientes para respaldar sus reclamos.
El secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, aceptó los hallazgos de Beaudrot y anunció que Greene podría buscar la reelección.
Greene dijo que alentó una manifestación para apoyar a Trump, pero explicó que no estaba al tanto de los planes para asaltar el Capitolio. Agregó que temía por su propia seguridad durante el incidente y escribió publicaciones en las redes sociales instando a las personas a mantener la calma y estar seguras.
Strahan emerge como principal retador
Jennifer Strahan, propietaria de una empresa de asesoría de atención médica, fue considerada la competidora más seria de Greene, pero la cuenta de campaña de Greene logró obtener USD 9 millones, mientras que la de Strahan obtuvo alrededor de USD 400,000.
Strahan, candidata por primera vez, se describe como esposa, madre, propietaria de un negocio y cristiana. Obtuvo un doctorado en liderazgo en atención médica y fundó una firma de asesoría que ayuda a las empresas de atención médica a reducir significativamente los gastos innecesarios.
Strahan ha recibido el apoyo del PAC de la Coalición Judía Republicana, de PACs que representan a UPS, International Paper y otras empresas, y de algunos miembros del Congreso.
“Sin duda, debemos tener una visión integral y debemos hacer retroceder la agenda progresista que estamos viendo en Washington”, dijo Strahan a The Epoch Times. “Sin embargo, cuando no tienes relaciones con colegas, no puedes hacer eso.
“Eso daña a nuestro distrito, a nuestras comunidades y a nuestros ciudadanos cuando no tenemos una voz efectiva que nos represente”, agregó Strahan. “No tienes que sacrificar la efectividad por valores conservadores”.
Los partidarios de Greene no están de acuerdo. En un mitin para el candidato a gobernador respaldado por Trump, David Perdue, la semana pasada, el fundador y organizador del mitin de Bikers for Trump, Chris Cox, invitó a Greene al escenario después de decir: “Al igual que Donald Trump, ella dice las cosas como son. No tienes que leer su mente”.
A lo largo de su candidatura a la reelección, Greene se ha encontrado con abundantes reacciones negativas por parte de los detractores que creen que su estilo es demasiado descarado.
“Los principales medios de comunicación, la extrema izquierda y los republicanos del establishment están emocionados porque piensan que ‘tal vez podamos deshacernos de ella’”, dijo Greene sobre las primarias del 24 de mayo y las elecciones generales de noviembre.
“Digo las cosas que a la gente le importan y dicen en casa”, agregó Greene. “Critico mucho a los demócratas, pero también critico a mi propio partido porque culpo tanto a los republicanos como a los demócratas de la situación en que nos encontramos, y lo mismo hace la mayoría de la gente”.
Sobre el papel, desbancar a Greene en las elecciones generales parece imposible, admiten varios demócratas. Sin embargo, Flowers, un veterano del ejército estadounidense que lleva un sombrero de vaquero, recaudó más de USD 8 millones. Tras ganar las primarias demócratas, se está preparando para dar la campanada en un distrito habitualmente dominado por los republicanos.
El 14º Distrito del Congreso de Georgia es abundantemente conservador. Según Georgiavotes.com, es un 70 por ciento republicano.
Abarcando desde una parte del noroeste de Georgia que se extiende desde el área metropolitana de Atlanta hasta la línea estatal en Chattanooga, Tennessee, el distrito aún favorece en gran medida a los republicanos, incluso después de que los límites se modificaron ligeramente en 2021.
La redistribución de distritos le dio al distrito 14 parte del condado de Cobb, que el presidente Joe Biden ganó por 14 puntos en 2020. En general, el distrito votó por Trump por 48 puntos porcentuales. Greene ganó por 31 puntos, más de 13,000 votos, en 2020.
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