Más de una decena de organizaciones civiles están convocando el 28 de enero a un paro Nacional en Cuba, para detener «el terrorismo de estado» y pedir un «cambio de sistema», además de pedir por la libertad de los prisioneros cubanos del 11 de julio y 15 de noviembre.
Al menos 15 ONG organizadoras con sede en distintos países del mundo convocan a «a todo cubano que desee la libertad» una «Huelga General de Brazos Caídos» dentro de Cuba, de manera «descentralizada para que cada grupo la haga suya», indican que cada día se actualizará «con los grupos que se sumen», a través de un comunicado distribuido el 11 de enero.
El comunicado dice que la Huelga dará inicio «el 28 de enero del 2022 como el mejor homenaje a Martí; y para protestar contra el clasismo provocado por las tiendas MLC [Moneda Libremente Convertible]».
Además para «exigir la libertad de los presos del 11J, el 15N, y de cada uno de los presos políticos en las cárceles de la dictadura. Para decir basta al terrorismo de estado; y en pos de un cambio de sistema».
El texto indica que «la huelga se prolongará hasta que se hayan cumplido todos los objetivos», señalando que «el pueblo cubano merece y exige vivir con dignidad. Ninguna persona debe ser acosada, perseguida y encarcelada por su manera de pensar».
Y agrega que «ningún trabajador debe ser obligado a pagar en una moneda diferente a la que percibe por su trabajo; ni a vivir en la miseria y la desesperanza. Ninguna ideología debe ser impuesta por encima de los Derechos y de la Libertad que nos legaron nuestros héroes».
La convocatoria llega en el marco de los 6 meses transcurridos de las protestas históricas del pasado 11 de julio, donde el régimen dio inicio a varios juicios en Cuba en contra de los manifestantes que marcharon de manera pacífica en distintas provincias de la isla, incluidos 14 menores de edad donde la fiscalía pide para alguno de los acusados hasta 30 años de cárcel por presuntos delitos de sedición.
Varias ONG han denunciado la falta de garantías, fabricación de pruebas y penas muy elevadas para los acusados en estos procesos. Las autoridades judiciales cubanas aseguran que se cumplen estrictamente los instrumentos internacionales.
Además, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) anunció este martes que denunció ante la ONU la situación de 39 menores de 21 años encarcelados en Cuba por protestar pacíficamente, donde están «a la espera de ratificación de condenas de hasta 23 años de privación de libertad».
De los cuales, 11 han sido imputados por un presunto delito de sedición, previsto y sancionado en el artículo 100 del Código Penal, cuyo marco sancionador prevé condenas de entre 10 y 20 años, o incluso pena de muerte.
Se registran filas de hasta 8 horas para que los cubanos puedan conseguir comida que ya se ha vuelto incluso una rutina diaria para la gente en la isla, que bajo el cansancio, el calor y sin agua o un baño al cual acudir corren el riesgo de salir de esas filas con las bolsas vacías.
El régimen continua acosando a periodistas independientes y las agencias de periodismo acreditados se ven amenazados con tener que cubrir lo que sucede en la isla desde afuera de ella.
Este 12 de enero la presidenta de EFE, Gabriela Cañas, hablo de la situación de la agencia en La Habana y dijo «Nosotros les hemos pedido mil veces, y en esto el Ministerio de exteriores nos está ayudando, que nos dejen trabajar allí, que nos den la acreditación, llevamos casi 50 años con una delegación de EFE en la Habana».
«Casi el 50 por ciento de las noticias que se publican en América Latina sobre Cuba son de EFE, entonces creemos que esa repercusión no les gusta, lo cierto es, que seguimos con dos personas, que nuestro delegado en La Habana, no puede estar en La Habana», agregó. «No están echando de Cuba».
Con información de EFE.
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