Cuando el alcalde de Dallas, Eric Johnson, anunció su cambio de demócrata a republicano en un artículo de opinión en el Wall Street Journal, escribió que no tenía «ninguna intención de cambiar el enfoque de mi trabajo», pero que las ciudades estadounidenses necesitaban el conservadurismo fiscal y el cumplimiento de la ley que propugnan los republicanos.
Y no es el único. Este año ya ha habido cinco legisladores estatales que han cambiado su afiliación de demócrata a republicana. El año pasado, la senadora Kyrsten Sinema (I-Ariz.) pasó de demócrata a independiente. El senador Joe Manchin (D-W.Va.) ha dicho que está considerando seriamente abandonar el Partido Demócrata, y al parecer aspira a presentarse como candidato de un tercer partido al Despacho Oval en 2024. En 2022, se informó de que 1 millón de votantes se habían pasado al Partido Republicano, frente a 630,000 que se hicieron demócratas.
Aunque cambiar de partido no es algo único, hacerlo mientras se ocupa un cargo electo partidista es mucho más raro. Según Ballotpedia, 173 legisladores lo han hecho mientras ocupaban su cargo desde 1994, la mayoría a favor del Partido Republicano.
El cargo del Sr. Johnson no es partidista, como él mismo señaló en su artículo de opinión.
«Nunca fui un favorito del caucus demócrata, y el sentimiento era mutuo. Cuando me eligieron alcalde —un cargo no partidista— en 2019, me sentí aliviado de estar libre del hiperpartidismo y dispuesto a centrarme en resolver los problemas», escribió.
Problemas locales
Las razones de los legisladores estatales para cambiar no son declaraciones «grandilocuentes» sobre la nación, según la representante del estado de Georgia Mesha Mainor, que habla en su propio nombre. En la mayoría de los casos, los motivos del cambio de afiliación partidista eran locales, e incluso personales.
Exprofesional de la salud, la Sra. Mainor pasó 20 años trabajando con personas de todos los orígenes intentando encontrarles soluciones, y dijo que se incorporó a la asamblea estatal esperando hacer lo mismo. Pero pronto se dio cuenta de que su partido no estaba abierto a trabajar en todos los frentes, y varias veces insistió en que votara en contra de proyectos de ley republicanos, no porque fueran malas políticas, sino porque los demócratas querían enviar un mensaje.
«Creo que Estados Unidos está diciendo que estamos hartos del hiperpartidismo», declaró Mainor a The Epoch Times, compartiendo que muchos de sus electores le enviaron mensajes de texto y la llamaron después de que anunciara en julio que cambiaba de partido para mostrarle su apoyo. Le dijeron que no les importaba a qué partido perteneciera, siempre que siguiera representándolos.
«Creo que Estados Unidos está diciendo que estamos hartos del hiperpartidismo», declaró Mainor a The Epoch Times, compartiendo que muchos de sus electores le enviaron mensajes de texto y la llamaron después de que anunciara en julio que cambiaba de partido para mostrarle su apoyo. Le dijeron que no les importaba a qué partido perteneciera, siempre que siguiera representándoles.
«Defiendo los problemas que me plantean», dijo la Sra. Mainor, que fue elegida dos veces con la plataforma de solucionar cualquier problema que le plantearan los electores.
Por ejemplo, cuando alguien que está siendo investigado muere, el estado retiene el certificado de defunción, y las familias han pedido ayuda a la Sra. Mainor para obtener los certificados de defunción y poder acceder al dinero del seguro para los hijos del fallecido. Otro gran problema es la elección de escuela, porque en el distrito de la Sra. Mainor sólo un 3% de las escuelas alcanzan el nivel de competencia en matemáticas y lectura.
La Sra. Mainor no cambió de partido porque cambiaran sus temas; lo hizo para seguir defendiendo los temas por los que se postuló.
«Yo diría que el Partido Republicano tiene una carpa más grande», dijo, y añadió que en su nuevo partido no se espera de ella que vote de forma partidista y que tiene margen para el desacuerdo.
«Toxicidad»
El desacuerdo que experimentó en el Partido Demócrata llegó a veces a ser hostil: cuando votó en contra de un proyecto de ley de un colega, otros legisladores demócratas la atacaron en las redes sociales, uno de ellos mostrando un cheque de 1000 dólares en el que se pedía a otra persona que se postulara como candidata al escaño de la Sra. Mainor.
Este tipo de tácticas de intimidación fue una de las razones por las que la representante de Carolina del Norte Tricia Cotham se pasó al Partido Republicano.
Su paso fue muy criticado, ya que dio a los republicanos una supermayoría —y el poder de anular vetos— en la Cámara.
La Sra. Cotham, cuya madre es una destacada demócrata del estado, es también una legisladora veterana. Ocupó el cargo de 2007 a 2016 y lo abandonó cuando su hijo mayor estaba a punto de empezar el jardín de infancia. Mientras se recuperaba de un caso grave de COVID-19, se enteró de que el escaño de su distrito estaba vacante, y se presentó tras mucho pensarlo y rezar.
En una entrevista concedida a los medios de comunicación locales tras su anuncio, la Sra. Cotham relató la «toxicidad» y «maldad» del comportamiento de sus compañeros hacia ella, y cómo la condenaban al ostracismo en las reuniones del caucus. Criticó la insistencia de los demócratas en «seguir de cerca» a los presidentes republicanos de los comités para investigar a la oposición, en lugar de dedicar tiempo a crear buenas políticas, y dijo que el partido había cambiado mucho desde que ella ocupaba el cargo.
La exeducadora y presidenta del comité de educación dijo que empezó realmente a «rezar sobre el tema» antes de tomar su decisión. «No he cambiado de la noche a la mañana, a pesar de los terribles anuncios, las palabras viciosas y viles utilizadas contra mí», dijo.
La Sra. Cotham dijo en múltiples ocasiones que no había cambiado como persona, pero que sus votos en cuestiones relacionadas con el aborto y la política «trans» cambiaron tras su cambio de partido.
Con frecuencia ha evitado a los medios de comunicación en relación con estos temas y no respondió a las múltiples peticiones de The Epoch Times.
En 2015, la Sra. Cotham declaró en contra de un proyecto de ley que obligaría a las mujeres a esperar 72 horas antes de abortar. Contó la historia de su primer embarazo, un embarazo ectópico que requirió un aborto provocado que le salvó la vida.
En mayo, apoyó la prohibición del aborto a las 12 semanas, que, en su opinión, establecía un «equilibrio razonable» y un «término medio» entre los extremos, refutando las acusaciones de hipocresía.
En abril, la Sra. Cotham también votó a favor de un proyecto de ley que prohibiría a los varones biológicos los deportes femeninos, por lo que recibió otra oleada de críticas de la izquierda.
En una entrevista poco después de anunciar el cambio de partido, dijo al canal local que siempre apoyaría los derechos «LGB», omitiendo la «T» de «trans».
En 2016, votó a favor de un proyecto de ley sobre los baños que permitiría a los estudiantes que se identificaran como «trans» utilizar el baño que prefirieran en lugar del que correspondiera a su sexo. Fue el año después de que Bruce Jenner «saliera del closet» como Caitlyn Jenner, consiguiendo una amplia concienciación y comprensión de lo que significaba la «transición». La palabra «transgénero» acababa de sustituir a «transexual», y el tema aún no se había centrado en los niños.
Los críticos de la Sra. Cotham han exigido que sea destituida de su cargo, y la Sra. Cotham ya ha devuelto el dinero a los donantes que apoyaron su campaña a petición suya.
«Nada ha cambiado»
En Luisiana, dos legisladores estatales cambiaron de partido.
Francis Thompson había sido demócrata durante 50 años antes de cambiar de partido en marzo, lo que dio a los republicanos una supermayoría.
El Sr. Thompson, «demócrata conservador» durante mucho tiempo, era conocido en su distrito por su capacidad para atraer grandes proyectos de gasto a la zona.
El perfil que un medio local hizo de él lo describía como un legislador que siempre cultivó una estrecha relación con el gobernador. Describía una rueda de prensa del gobernador demócrata John Bel Edwards, en la que celebraba la derrota del intento republicano de anular su veto a su proyecto de ley que impediría a los atletas masculinos competir en deportes femeninos.
El Sr. Thompson había votado en contra del gobernador, pero estuvo presente en la conferencia, aplaudiendo junto a sus colegas, al menos uno de los cuales lo retó por asistir, según The Advocate.
«Estoy aquí para honrar a mi gobernador demócrata», dijo el entonces legislador demócrata, que había sido elegido por sus electores 11 veces seguidas, lo que lo convertía en el legislador demócrata que más tiempo llevaba en el cargo en el estado antes de cambiar de partido.
Además del proyecto de ley de deportes, su voto no fue partidista cuando votó a favor de derogar los requisitos de permiso para llevar armas ocultas, y de nuevo para anular el veto del gobernador a un proyecto de ley de redistribución de distritos del Congreso.
Cuando anunció su cambio de partido, el Sr. Thompson dijo que «nada ha cambiado» y que seguirá votando según sus principios.
Dijo que el Partido Demócrata había adoptado cada vez más posturas que no se «alineaban con los valores y principios que forman parte de mi vida cristiana».
«Hay valores y principios a los que me aferro firmemente y que guían mis decisiones. Mi historial de voto conservador durante los años que he servido en la Legislatura habla por sí solo», dijo en su conferencia de prensa.
¿Siguiendo los votos?
Semanas después, el legislador del estado de Luisiana Jeremy LaCombe también cambió de partido, de demócrata a republicano, sin anunciar ningún motivo. El sitio web de su campaña de reelección lo promociona ahora como una «voz independiente» dispuesta a trabajar con ambas partes para conseguir que se hagan las cosas.
El medio local The Advocate señala que, en los últimos años, Luisiana se ha teñido de rojo; el Sr. LaCombe perdió estrepitosamente frente a un republicano cuando aspiraba a un escaño en el Senado estatal en 2022.
Ni el Sr. LaCombe ni el Sr. Thompson respondieron a las múltiples peticiones de comentarios de The Epoch Times.
El legislador de Virginia Occidental Elliott Pritt cambió de partido en abril, tras ganar su primer periodo en 2022 como demócrata.
Su distrito se encuentra en las cuencas carboníferas del sur del estado, que se ha vuelto predominantemente rojo en los últimos años.
Dijo a Politico: «Aunque volviera a postularme y ganara, me enfrentaría a otro periodo en el que nunca conseguiría que se aprobara otra ley, nunca conseguiría que se hiciera nada».
«Durante el tiempo que voy a estar allí no voy a sentarme y ser un fracaso sin conseguir nada».
La Cámara de Representantes cuenta con 89 republicanos y 11 demócratas, mientras que el Senado tiene 31 republicanos y 3 demócratas, lo que hace imposible no trabajar con el otro partido.
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