A pocas horas de que los miembros de la Cámara de Representantes de Estados Unidos voten por su próximo presidente, un creciente número de legisladores republicanos dieron su respaldo al actual líder del Partido Republicano de la legislatura, Kevin McCarthy, en medio del desafío de algunos otros miembros de su propio partido.
Docenas de representantes republicanos asociados con el grupo Republican Main Street Caucus publicaron una carta diciendo que solo votarán por McCarthy para presidente, según el presidente del caucus Dusty Johnson (R-S.C.) y la vicepresidenta Stephanie Bice (R-Okla.). Alrededor de 70 republicanos son miembros del Main Street Caucus.
«Los miembros del Main Street Caucus mantendrán la línea. Kevin McCarthy es el mejor preparado para dirigir el 118º Congreso y estamos dispuestos a votar por él durante el tiempo que sea necesario», dice la carta.
También escribieron que «dos cambios propuestos en las reglas son problemáticos», añadiendo que «muchos en el Caucus expresaron fuertes reservas con respecto a la reducción del umbral en la moción de vacante y en el cambio de criterios del Comité Directivo, para facilitar lo que algunos han llamado ‘todos los puntos de vista en todos los comités’. Cualquier concesión [de Main Street] en esas áreas tendría que ser respondida con concesiones reales, tangibles y probadas por aquellos que bloquean la elección de Kevin McCarthy como presidente de la Cámara».
En tercer lugar, el caucus escribió que «no recompensaremos el caos» y prometió que el Main Street Caucus retiraría los cambios propuestos en el reglamento de la Cámara si McCarthy no es elegido rápidamente como presidente el martes 3 de enero.
Cinco republicanos han afirmado que no votarán por McCarthy bajo ninguna circunstancia, lo que pone en peligro su candidatura a la presidencia, ya que solo puede permitirse un puñado de deserciones. El Partido Republicano tiene 222 escaños frente a los 212 de los demócratas, y McCarthy necesita 218 votos para convertirse en portavoz, y ningún demócrata ha indicado que votaría por él.
Los cinco disidentes son los representantes Matt Gaetz (R-Fla.), Ralph Norman (R-S.C.), Bob Good (R-Va.), Matt Rosendale (R-Mont.), y Andy Biggs (R-Ariz.), que a su vez lanzó su propia candidatura a presidente para desafiar a McCarthy.
«Como grupo de más de 70 miembros comprometidos con la búsqueda de soluciones conservadoras prácticas, creemos que estas prioridades garantizarán que la Conferencia Republicana empiece a funcionar desde el primer día del nuevo Congreso», escribieron los legisladores. «Los estadounidenses eligieron una Mayoría Republicana para proporcionar un control y equilibrio en la administración y para encontrar soluciones a los problemas que enfrenta nuestra nación, no podemos hacer eso si no elegimos un presidente de la Cámara el 3 de enero».
Recientemente, unos 15 legisladores del GOP y miembros entrantes de la Cámara que fueron elegidos en distritos que ganó el presidente Joe Biden escribieron una carta la semana pasada declarando que votarán a McCarthy «independientemente de cuántos votos hagan falta». La carta afirma que «una lucha prolongada en el hemiciclo por la presidencia de la Cámara no solo impedirá» que la Cámara se ocupe de cualquier asunto, sino que «también enviará el mensaje equivocado al pueblo estadounidense en el preciso momento en que nos confió el gobierno».
«En las últimas semanas, el presidente designado McCarthy ha adoptado varios cambios en la conferencia y en las normas de la Cámara para garantizar que la Cámara pueda funcionar de una manera más abierta», dice la carta. «Aunque entendemos que estos cambios pretenden dar más poder a cada miembro individual y crear un mejor proceso legislativo, nos sigue preocupando que algunos de estos cambios puedan ceder involuntariamente más poder a nuestros colegas demócratas. No obstante, estamos dispuestos a apoyar estos cambios si, y solo si, al hacerlo nuestra conferencia se une en torno al presidente designado, McCarthy, como nuestro candidato a la presidencia».
La votación para elegir presidente debe producirse antes de que pueda tener lugar cualquier otro asunto en la cámara baja del Congreso. Esto significa que si McCarthy o cualquier otro no obtiene los votos suficientes, deberá producirse un periodo de votación extra antes de que se elija a un portavoz.
Mientras tanto, McCarthy se ha asegurado el apoyo del expresidente Donald Trump —quizás la figura más popular del Partido Republicano— quien advirtió a los republicanos de la Cámara de Representantes que deben votar por él o los demócratas podrían llevarse una victoria.
«Miren, yo pienso esto: Kevin ha trabajado muy duro», dijo Trump a Breitbart el mes pasado. «Ha sido agotador. Si usted piensa, él ha estado en todas partes. Creo que se merece la oportunidad. Con suerte, va a ser muy fuerte y va a ser muy bueno y va a hacer lo que todo el mundo quiere».
Trump añadió que «es un juego muy peligroso el que se está jugando. Es un juego muy peligroso. Podrían pasar algunas cosas malas».
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