La Cámara de Representantes votará a favor de elevar el techo de deuda del país hasta 2024, según el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy (R-Calif.), lo que aliviará el temor a un posible impago de las obligaciones financieras de Estados Unidos.
El portavoz hizo el anuncio en un discurso en la Bolsa de Nueva York el 17 de abril, durante el cual también esbozó las líneas generales de un plan republicano para reducir el gasto federal, por el que también se votará en la Cámara en las próximas semanas.
El anuncio parecía destinado a aumentar la presión sobre el presidente Joe Biden para que entable negociaciones sobre el aumento del techo de la deuda, que se encuentran en punto muerto desde que Biden anunció su propuesta de presupuesto para 2024 el 9 de marzo.
Los republicanos se han negado a aprobar un aumento del techo de la deuda federal hasta que el presidente acepte negociar sobre futuros recortes del gasto. Biden se ha negado a entablar conversaciones hasta que el Partido Republicano dé a conocer los detalles de su plan para limitar el gasto, algo que no ha hecho hasta hoy.
Demandas conocidas
Aparte de la declaración de que la Cámara votaría por un proyecto de ley para «elevar el techo de la deuda hasta el próximo año», el discurso contenía poca información nueva. Las demandas republicanas sobre las limitaciones del gasto han sido planteadas por varios miembros del Partido Republicano desde hace algún tiempo.
McCarthy no definió con más detalle el mecanismo o la fecha final del «aumento» del techo de deuda. Sin embargo, la prórroga prolongaría las negociaciones y retrasaría la votación final sobre el techo de la deuda hasta el año de las elecciones presidenciales.
Otras disposiciones del plan republicano incluyen devolver el gasto federal discrecional a los niveles de 2022, limitar el crecimiento del gasto al 1% durante los próximos 10 años, recuperar el dinero no gastado concedido a los estados para la ayuda por el COVID-19 y restaurar los requisitos de trabajo que «garantizan que los adultos sanos sin dependientes ganen un sueldo y aprendan nuevas habilidades».
McCarthy presentó el plan como un esfuerzo de sentido común para limitar el gasto federal, ahorrar dinero de los contribuyentes y hacer crecer la economía estadounidense.
Respuesta de la Casa Blanca
La Casa Blanca respondió rápidamente a las declaraciones de McCarthy repitiendo sus propios puntos de discusión sobre el techo de la deuda.
«El presidente McCarthy está rompiendo con la norma bipartidista que siguió bajo Trump al involucrarse en una peligrosa toma de rehenes económicos que amenaza los empleos y los ahorros para la jubilación de los estadounidenses que trabajan duro. En 2019, el propio Donald Trump dijo: ‘No puedo imaginar a nadie siquiera pensando en usar el techo de la deuda como una cuña de negociación.’ Esta mañana, el presidente de la Cámara de Representantes, McCarthy, hizo precisamente eso», dijo Andrew Bates, subsecretario de prensa de la Casa Blanca, en un comunicado.
«Un discurso no es un plan, pero mostró las prioridades de los republicanos de la Cámara de Representantes. En lugar de pedir a los más ricos que paguen lo que les corresponde, proponen recortar los servicios para los veteranos. En lugar de recortar el gasto a las grandes farmacéuticas, proponen enviar puestos de trabajo de fabricación al extranjero, a países como China».
En su discurso, McCarthy insistió en que el país reforzaría la economía sin debilitar las ayudas sociales.
«No crean a nadie que diga que nuestros planes perjudican a la red de seguridad social estadounidense. Somos una nación muy generosa. Y cuando la gente pase por momentos difíciles, los ayudaremos. Eso no cambiará».
Preocupaciones exteriores e interiores
Al defender la reducción del gasto, McCarthy expresó su preocupación tanto por la salud de la economía estadounidense como por su posición como líder mundial.
«Este presidente ha abrazado la fantasía de que la deuda no importa, que el dinero siempre se puede crear de la nada, y que la solución a los precios más altos causados por el gasto imprudente es simplemente impuestos más altos», dijo McCarthy.
«Biden, junto con los demócratas del Congreso, ha añadido 6 billones de dólares a nuestra deuda nacional, lo que ha creado inflación y nos ha hecho más dependientes de China. Ha socavado Medicare y la Seguridad Social. Hoy, es el pueblo estadounidense el que paga el precio», dijo McCarthy.
McCarthy citó información de la Oficina Presupuestaria del Congreso que indica que los intereses de la deuda nacional ascenderán a 10.5 billones de dólares en la próxima década, lo que, según dijo, es más que la cantidad total pagada en intereses en los últimos 85 años.
En una sesión de preguntas y respuestas posterior al discurso, el presidente de la Cámara amplió sus opiniones sobre la competitividad de Estados Unidos.
«El presidente de Francia, Macron, el único líder extranjero al que el presidente Biden ha hecho una cena de Estado, fue a ver al presidente Xi, volvió y le dijo a Europa que deberíamos depender menos de Estados Unidos. Ese es nuestro aliado», dijo McCarthy.
«No debemos ignorar ese movimiento de alejamiento del dólar», dijo McCarthy, señalando que algunos países están desarrollando lazos económicos más fuertes con China. «Pero una cosa les diré: la única forma de que el dólar no se convierta en la moneda mundial no es lo que hagan China u otros países. Es gastar demasiado. Y gastar demasiado dinero, endeudándonos en 31 billones de dólares, es una amenaza mayor que Brasil usando el yuan».
Romper el estancamiento
Gran parte del discurso de McCarthy trató de presentar al presidente como un imprudente con la economía estadounidense al negarse a negociar, una acusación que ambos hombres han intercambiado en el pasado.
Tras una reunión inicial entre ambos el 1 de febrero, Biden ha acusado sistemáticamente al Partido Republicano de mantener la economía como rehén al negarse a elevar el límite de la deuda.
El límite de endeudamiento no autoriza nuevos gastos, sino que permite al gobierno tomar prestado el dinero necesario para pagar los compromisos de gasto ya autorizados por el Congreso. Si no se aumenta el límite, se pone en peligro «la plena fe y el crédito de Estados Unidos», ya que se corre el riesgo de que el país incumpla sus obligaciones, ha dicho el presidente.
McCarthy ha hecho acusaciones similares contra el presidente. «Sus juegos políticos partidistas están provocando la misma crisis que pretende evitar», dijo en el discurso del 17 de abril.
«Cuanto más espere el presidente Biden a ser sensato, a encontrar un acuerdo, más probable será que esta administración caiga en el primer impago de la historia de nuestra nación».
McCarthy dijo que el Congreso votaría por el plan esbozado en su discurso en algún momento de las próximas semanas, pero no ofreció un calendario preciso.
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