La médica de Indiana que practicó un aborto a una niña de Ohio de 10 años informó adecuadamente sobre el procedimiento a las autoridades, pero indicó que la edad del padre era de 17 años a pesar de que supuestamente el hombre tenía 27, según documentos publicados el 14 de julio.
La Dra. Caitlin Bernard, profesora asistente de obstetricia clínica y ginecología en la Universidad de Indiana, realizó el aborto en el hospital de la universidad el 30 de junio, según los documentos obtenidos y publicados por Fox 59.
Bernard anotó correctamente que la edad de la madre embarazada era 10 años, pero puso que la edad del padre era 17 años, según muestran los formularios.
El hombre detenido en Colón, por la violación de la niña, en realidad tiene 27 años y se encuentra ilegalmente en el país, según autoridades locales y federales.
El abogado de Bernard no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. Toda la información de contacto de Bernard se ha eliminado de su perfil universitario y la universidad no ha respondido a las consultas.
El fiscal general de Indiana, Todd Rokita, republicano, había dicho esta semana que estaba investigando si Bernard cumplía con la ley estatal que rige los informes de los proveedores de atención médica.
Cualquier aborto realizado en una niña menor de 16 años en Indiana debe ser informado por el abortista al Departamento de Salud de Indiana y a los servicios infantiles dentro de los tres días posteriores al aborto.
Bernard cumplió con los requisitos, según los documentos. Ella presentó el informe de embarazo interrumpido el 2 de julio.
Los departamentos de salud y servicios infantiles de Indiana no respondieron a las solicitudes de comentarios y no han llenado las solicitudes de registros públicos presentadas por The Epoch Times.
“Como dijimos, estamos recopilando evidencia de múltiples fuentes y agencias relacionadas con estas acusaciones. Nuestra revisión legal permanece abierta”, dijo Rokita a The Epoch Times en un correo electrónico.
“Se han seguido todas las políticas pertinentes”
Kathleen DeLaney, abogada que representa a Bernard, les dijo a los medios de comunicación que la doctora “tomó todas las medidas apropiadas de acuerdo con la ley y su formación médica y ética como médica”.
“Ella siguió todas las políticas, procedimientos y regulaciones relevantes en este caso, tal como lo hace todos los días para brindar la mejor atención posible a sus pacientes”, dijo Delaney, añadiendo que Bernard no violó ninguna ley y no ha sido disciplinada por su empleador.
Rokita también había dicho que Bernard tiene un historial de falta de denuncia. Indiana Right to Life, un grupo provida, presentó en 2018 denuncias por supuesta omisión de informes contra Bernard y otros médicos que realizan abortos. No está claro si se tomó alguna medida. La oficina del fiscal general declinó decir si investigó las quejas.
Bernard habló por primera vez sobre realizar el aborto a la niña de 10 años al Indianapolis Star, que lo incluyó en una historia del 1 de julio sobre pacientes de otros estados que necesitaban ir a Indiana para hacerse un aborto.
La ley de Ohio prohíbe los abortos después de las seis semanas de embarazo, pero contiene una excepción a los abortos que busquen “prevenir un riesgo grave de deterioro sustancial e irreversible de una función corporal importante de la mujer embarazada”. El fiscal general de Ohio, Dave Yost, republicano, ha dicho que el caso encajaría dentro de la excepción.
La madre de la niña denunció la violación a los servicios infantiles en el condado de Franklin, que alertaron al Departamento de Policía de Columbus, dijo un detective de la policía durante la lectura de cargos de Gerson Fuentes, el hombre acusado de violar a la niña.
Fuentes es un inmigrante ilegal, le dijo a The Epoch Times un funcionario de Inmigración y Control de Aduanas. Según los informes, es de Guatemala.
Hay dudas sobre la identidad del hombre, dijo el detective de la policía, sin indicios de que Fuentes esté legalmente en el país.
La policía dice que la niña identificó a Fuentes como el hombre que la embarazó y que Fuentes confesó.
Fuentes enfrenta cadena perpetua si es declarado culpable.
Una mujer, que dijo ser la madre de la niña, le dijo a Telemundo que la niña “está bien” y defendió al hombre que confeso el crimen diciendo que “todo lo que están diciendo contra [Fuentes] es mentira”.
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