Una mujer vietnamita visitó un hospital de Corea del Sur con su esposo el 7 de agosto para una prueba de embarazo y un ginecólogo le practicó un aborto sin que se diera cuenta.
En el hospital le confirmaron que tenía seis semanas de embarazo y le dijeron que necesitaba una solución intravenosa para una mejor nutrición.
Mientras esperaba, en vez de la solución intravenosa recibió una anestesia. La mujer luego fue derivada a un pabellón donde no pudo darse cuenta que sería operada por un ginecólogo, dijo la estación de policía del distrito de Gangseo el lunes 23 de septiembre, según Korea Times.
El médico dio muerte a su bebé.
El informe indica que cuando estaba esperando la nutrición vía intravenosa, la enfermera llegó a su lado con el historial de otra paciente que necesitaba cirugía por un aborto involuntario en el que el feto había muerto pero aún no había sido abortado.
Cuando la madre despertó no imaginaba lo ocurrido hasta que notó algo de sangrado y otro médico le explicó que era por el aborto, reportó Independent.
La estación de policía de Gangseo anunció el lunes que estaban investigando el incidente en que ni la enfermera ni el médico confirmaron la identidad e historial de la paciente antes de actuar. Ambos fueron detenidos y quedaron bajo sospecha de negligencia profesional que resultó con lesiones, informó CNN.
«El médico y la enfermera han reconocido su culpa», dijo a CNN la policía.
El aborto es legal en Corea del Sur, sin embargo esta autorizado ante denuncias de violación o incesto. Además el aborto se practica siempre que la presencia del feto pueda ser mortal para la madre, según Independent.
Las mujeres que terminan un embarazo dando muerte al bebé voluntariamente, pueden enfrentar multas de hasta dos millones de won surcoreanos (1660 dólares) o un año en prisión, mientras que los profesionales médicos pueden enfrentar penas de prisión de hasta dos años.
Al principio, la policía que revisó este caso verificó si el personal del hospital podía ser acusado de «aborto sin consentimiento», que puede ser castigado con hasta tres años de prisión. Pero el cargo no era aplicable porque la madre no aprobó ni desaprobó el procedimiento. Entonces la policía ahora está investigando por negligencia profesional, informó Korea Times.
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