La retirada del ejército estadounidense de Afganistán probablemente conducirá a una guerra civil y al resurgimiento de grupos terroristas como al-Qaeda, dijo el presidente del Estado Mayor Conjunto, Mark Milley, en una entrevista.
«Mi estimación militar es (…) que es probable que se desarrollen las condiciones de una guerra civil», dijo Milley a Fox News durante una entrevista en la base aérea de Ramstein en Alemania. «No sé si los talibanes van a [poder] consolidar el poder y establecer la gobernanza».
Después de que los talibanes tomaran el control del país el mes pasado en torno a la retirada de Estados Unidos y el caos resultante, grupos terroristas como al-Qaeda o ISIS podrían establecer un punto de apoyo, dijo el general.
«Creo que hay al menos una muy buena probabilidad de que se produzca una guerra civil más amplia y eso, a su vez, conducirá a condiciones que podrían, de hecho, conducir a una reconstitución de al-Qaeda o al crecimiento de ISIS u otra miríada de grupos terroristas”, dijo Milley a la cadena.
A fines de agosto, Milley; el secretario de Defensa, Lloyd Austin; y el presidente, Joe Biden, fueron criticados por no haber previsto que los talibanes—un grupo terrorista en sí mismo designado por varias agencias federales—se apoderaran del país en solo 11 días. Más tarde defendieron la retirada, diciendo que la evacuación apresurada y caótica de miles de estadounidenses y decenas de miles de afganos estaba prevista en sus planes de contingencia.
Cuando los talibanes tomaron áreas en Afganistán, el grupo también abrió cárceles, mientras que los funcionarios del Pentágono confirmaron más tarde que miles de terroristas de ISIS-K podrían haber sido liberados de esas instalaciones, incluida una en la base aérea de Bagram. Durante la fase final de la evacuación en el aeropuerto de Kabul, ISIS se atribuyó la responsabilidad de un ataque suicida con bomba que dejó un saldo de 13 miembros del servicio de EE. UU. muertos.
“Se podría ver un resurgimiento del terrorismo procedente de esa región en general dentro de 12, 24, 36 meses. Y vamos a monitorear eso”, agregó Milley en la entrevista, publicada el sábado.
Como resultado, dijo, Estados Unidos tendrá que «restablecer algunas redes de inteligencia humana» y tendrá que «llevar a cabo operaciones de ataque si existe una amenaza para Estados Unidos».
Los talibanes, por su parte, se han involucrado en intensos combates con un grupo de resistencia en el valle de Panjshir, ubicado a unas 160 millas al noreste de Kabul. El sábado por la noche, el grupo terrorista publicó un video online afirmando haber ingresado al valle, según el Wall Street Journal, el cual informó que un combatiente de la resistencia confirmó el ingreso de los talibanes.
Emergency, una organización no gubernamental con sede en Italia, dijo al periódico que los talibanes se dirigieron a la aldea de Anabah en Panjshir.
El cuartel general de la policía y el centro del distrito de Rukhah, adyacente a la capital provincial, Bazarak, fue derrotado y las fuerzas de la oposición habían sufrido numerosas bajas, teniendo un gran número de prisioneros y vehículos, armas y municiones capturados, dijo también el portavoz talibán Bilal Karimi en Twitter.
Pero los combatientes de la resistencia, incluido un portavoz, negaron las afirmaciones de los talibanes.
Fahim Dashti, portavoz del Frente de Resistencia Nacional de Afganistán (NRFA, por sus siglas en inglés), un grupo de fuerzas anti-talibanes, dijo a Reuters que la «máquina de propaganda» talibán estaba tratando de difundir mensajes de distracción.
“Las fuerzas de resistencia están listas para continuar su defensa contra cualquier forma de agresión”, dijo.
Con información de Reuters.
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