Un sistema de tormentas que trae la tan necesaria lluvia a los estados occidentales afectados por la sequía, también traerá esta semana fuertes tormentas al centro de EE. UU.
El domingo, los chubascos y las tormentas eléctricas se desplazaron por zonas de California y porciones del suroeste desértico. Aunque se pronostica menos de 1 pulgada de lluvia en partes del centro y sur de California y del suroeste, cualquier lluvia es bienvenida, ya que estas zonas siguen sufriendo una sequía creciente. Alrededor del 83 por ciento del oeste de Estados Unidos está experimentando condiciones de sequía.
Pero es lo que pasará después del fin de semana lo que tiene en vilo a la población del centro de EE. UU.
La semana pasada se registraron más de 150 informes de tormentas severas en todo el país, y algunas de esas mismas zonas podrían recibir más a mediados de esta semana.
«A partir del martes, las probabilidades de tormentas eléctricas aumentarán, especialmente a través de los panhandles del este, donde algunas tormentas pueden ser severas», dijo la oficina del Servicio Meteorológico Nacional en Amarillo, Texas, en un tuit este fin de semana. «Es posible que haya actividad tormentosa adicional el miércoles debido a un frente frío».
La mayor probabilidad de tiempo severo comienza el martes desde Wichita (Kansas) hasta San Angelo (Texas). Las principales amenazas serán vientos dañinos, granizo y tornados.
El Centro de Predicción de Tormentas (SPC) también advierte que el miércoles podría haber probabilidad de graves temporales, pero eso depende en gran medida de la evolución de dichos sistemas. Además, si se desarrolla un sistema más progresivo, eso podría sugerir un aumento de la presencia de fuertes tormentas en el sureste y el Atlántico medio a finales de la semana.
Habrá que vigilar todo esto en los próximos días a medida que evolucione la tormenta.
Las inundaciones repentinas también serán motivo de preocupación en zonas de Texas, Oklahoma, Arkansas y Misuri, donde algunas localidades podrían recibir más de 10 o 15 centímetros de lluvia entre el martes y el viernes.
Y si bien las zonas del Valle del Río Rojo, desde el noreste de Dakota del Norte hasta el noroeste de Minesota, agradecerían la lluvia para mejorar las condiciones de sequía moderada o severa en esa región, demasiada lluvia en un corto periodo de tiempo podría ser peligrosa.
Ha sido un mes «lento» para los tornados
Estadísticamente hablando, mayo es el mes de mayor número de tornados en todo el país, pero abril también está cerca de los primeros puestos de la lista. Sin embargo, este año abril está muy por debajo de lo normal. Según el SPC, hemos tenido 34 tornados confirmados en lo que va de mes, muy por debajo de la media de tres años de 224.
Esto es algo bueno. Nos gusta que esa cifra sea lo más baja posible, sobre todo porque los tres primeros meses del año fueron ligeramente superiores a lo normal. De enero a marzo, EE. UU. registró 218 tornados, pero la media es solo de 162. Esto se debe en gran medida a que en marzo se produjeron 191 tornados, muy por encima de la media mensual de 82.
La zona que se enfrenta el martes a una mayor amenaza de fuertes tormentas ha permanecido este año relativamente tranquila en términos de condiciones climáticas adversas.
«La mayoría de los días significativos de tiempo severo en lo que va de año se han centrado en la parte baja del valle del Misisipi y en el sur profundo», dijo Taylor Ward, meteorólogo de CNN. «Esta podría ser la amenaza más importante del año hasta ahora en Oklahoma y Kansas. Aunque esto puede ser un poco tarde en la primavera, ciertamente no es inusual, ya que a finales de abril y mayo es el pico para el clima severo en las Llanuras del Sur».
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