El Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) ya no exigirá a los aspirantes a un puesto docente que presenten una declaración sobre su compromiso con la causa de la diversidad, la equidad y la inclusión (DEI). Se trata del primer centro de élite que da marcha atrás en una práctica que se está convirtiendo en habitual.
«La solicitud de una declaración sobre la diversidad ya no formará parte de las candidaturas a ningún puesto docente en el MIT», dijo un portavoz de la institución a The Epoch Times en un comunicado enviado por correo electrónico.
El cambio se llevó a cabo bajo la dirección de la presidenta del MIT, Sally Kornbluth, y con el respaldo del rector de la institución, el canciller, el subdirector de equidad e inclusión y los seis decanos académicos, señaló el portavoz.
La Sra. Kornbluth, que asumió la presidencia del MIT hace solo un año, anunció su compromiso de fomentar un entorno integrador en su centro, pero subrayó que esa integración no puede lograrse mediante la coacción a expensas de la libertad de expresión.
«Mis objetivos son aprovechar al máximo el talento humano, atraer a los mejores al MIT y asegurarme de que prosperan una vez aquí», anunció en un comunicado. «Podemos construir un entorno inclusivo de muchas maneras, pero las declaraciones obligatorias atentan contra la libertad de expresión, y no sirven».
En los últimos años, las declaraciones obligatorias de DEI se han vuelto cada vez más comunes en las solicitudes de empleo académico, especialmente en las de instituciones prestigiosas. En un estudio realizado en 2021 sobre 999 ofertas de empleo para profesores universitarios, el American Enterprise Institute descubrió que el 19% exigía declaraciones sobre diversidad, y que las escuelas de «élite» tenían un 21% más de probabilidades de exigir declaraciones de DEI que las «no de élite».
El MIT, una de las mejores universidades del mundo, recibe solicitudes de empleo de los mejores talentos de todo el planeta. Sin embargo, ni siquiera los solicitantes en campos científicos de vanguardia estaban exentos de la exigencia de mostrar sus compromisos ideológicos.
Por ejemplo, en una oferta de empleo de diciembre de 2023 para el departamento de aeronáutica y astronáutica del MIT, se pedía a los candidatos que presentaran «una declaración relativa a sus puntos de vista sobre la diversidad, la inclusión y la pertenencia, incluidas las contribuciones pasadas y actuales, así como su visión y planes para el futuro en estas áreas».
Polémica por la DEI en el pasado del MIT
La decisión del MIT de poner fin al uso de las promesas de DEI en el empleo supone un paso atrás en su anterior alineación con el activismo DEI, una postura que ha suscitado las críticas de la institución centrada en la ciencia y la ingeniería.
En 2021, el departamento de ciencias de la Tierra, atmosféricas y planetarias del MIT invitó a Dorian Abbot, geofísico de la Universidad de Chicago, a dar una conferencia sobre el clima en los exoplanetas, o planetas que orbitan alrededor de estrellas distintas del sol de nuestro sistema solar. Sin embargo, la institución canceló bruscamente la charla después de que un grupo de estudiantes de posgrado se mostrara escéptico con el movimiento DEI en el mundo académico.
Abbot se convirtió en el blanco de los activistas del MIT y de su propio centro de estudios tras expresar sus dudas sobre la obsesión de la DEI por la raza. Argumentó en un artículo de opinión que las otrora competitivas universidades alemanas nunca se recuperaron del todo de los años nazis, durante los cuales sus políticas de empleo se centraban en la raza en lugar de en el mérito.
«Deberíamos ver esto como una advertencia de las consecuencias de considerar la pertenencia a un grupo más importante que el mérito, y corregir nuestro rumbo antes de que sea demasiado tarde», escribió.
La cancelación fue criticada por académicos de dentro y fuera de la comunidad del MIT. La Alianza por la Libertad de Expresión del MIT, un grupo de exalumnos dedicado a promover la libertad académica, anunció que el MIT nunca reconoció que se equivocó al cancelar la conferencia sobre el exoplaneta del Sr. Abbot porque a algunos activistas no les gustaron sus opiniones sobre el DEI.
«Nadie en la administración o la facultad del MIT reconoció públicamente que la cancelación del Dr. Abbot fue un error. El MIT no se disculpó, ni con el Dr. Abbot ni con la comunidad del MIT», anunció la Alianza en su página web, advirtiendo que cancelaciones como ésta podrían repetirse porque «nadie rende cuentas por manchar la reputación del MIT».
«El MIT nunca repudió la política de facto que estableció con la cancelación de Abbot: que un grupo minoritario de estudiantes graduados puede definir lo que es aceptable para el MIT e imponer sus valores al Instituto», argumentó. «No hay ninguna razón para creer que el MIT aprendió la lección de que no debe suprimir el discurso que a algunas personas no les gusta».
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