El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, dijo que las personas que rechazan una oferta de su compañía para regresar a sus trabajos, después de ser despedidos debido a la pandemia, ya no se consideran elegibles para recibir beneficios de desempleo del gobierno federal.
«Si le ofreces trabajo a una persona… y esa persona no toma el trabajo… entonces a esa persona no se le permitirá obtener el subsidio de desempleo», dijo Mnuchin el martes durante una audiencia en el Comité Bancario del Senado.
El secretario agregó que las compañías que reciben beneficios bajo el Programa de Protección de Pagos, una medida que se incluyó en la Ley CARES, que luego permiten a sus empleados el retorno a sus labores, después de que fueron despedidos o suspendidos, tienen que notificar a las oficinas estatales de desempleo sobre sus ofertas de recontratación.
Si el empleado rechaza la oferta de trabajo, se considera que no es elegible para recibir beneficios de desempleo, que se ampliaron en virtud de la Ley CARES. La legislación fue aprobada cuando decenas de millones de estadounidenses perdieron sus empleos o fueron suspendidos después de que las empresas cerraron para frenar la propagación del virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
«Si usted ofrece empleo de nuevo a un trabajador y no acepta ese trabajo, se le solicitará que notifique a la agencia local de seguro de desempleo, porque esa persona ya no será elegible para el [subsidio de] desempleo», dijo Mnuchin.
El anuncio se produjo después de que el senador David Perdue (R-Ga.) cuestionó si el seguro de desempleo ampliado, que vio un aumento de USD 600 por semana, desincentivaría a las personas a encontrar trabajo o volver a trabajar.
El Departamento de Trabajo emitió en abril una guía pública sobre la relación entre las prestaciones por desempleo y el Programa de Protección de Pagos. El programa permite que los bancos distribuyan préstamos respaldados por el gobierno a empresas que emplean a menos de 500 empleados, y el 75 por ciento de un préstamo será perdonado si se utiliza para pagar los salarios de los empleados y los gastos generales como el alquiler.
«Salvo en circunstancias inusuales, una solicitud para que un empleado suspendido vuelva a su trabajo probablemente constituya una oferta de empleo adecuado que el empleado debe aceptar», según el sitio web del Departamento de Trabajo.
Mientras tanto, Mnuchin escribió al Senado que espera ver altas cifras de desempleo y otros datos económicos negativos durante el segundo trimestre. Sin embargo, cree que la situación mejorará cuando la economía comience a reabrir nuevamente.
«Trabajando en estrecha colaboración con los gobernadores, estamos comenzando a abrir la economía de una manera que minimice los riesgos para los trabajadores y los clientes», dijo Mnuchin en un comunicado escrito al Comité Bancario del Senado, informó Reuters. «Esperamos que las condiciones económicas mejoren en el tercer y cuarto trimestre».
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