A principios de julio, la Asociación Nacional de Educación (NEA, por sus siglas en inglés) presentó una resolución para sustituir la palabra «madre» en los contratos por las palabras «padre de familia» con el fin de promover la inclusión. Harta de la creciente promoción de sus «ideologías radicales y de extrema izquierda» en el sistema educativo de Estados Unidos, una madre tiene la misión de desenmascarar, y enfrentar, a la organización que ahora llama el «Cártel del K-12».
La resolución, denominada NBI 63, fue una de las muchas propuestas en la Asamblea de Representantes de la NEA de 2022, celebrada en Chicago del 3 al 6 de julio. «Usando este lenguaje de contrato, los miembros no necesitan preocuparse por cómo una Junta de Educación/solicitante define ‘licencia de maternidad’, ‘madre’ y / o ‘padre’; el lenguaje es un reflejo inclusivo de cómo los miembros LGBTQIA + construyen familias», dijo la resolución.
El liderazgo demócrata y los candidatos al Senado respaldados por la NEA no se pronunciaron sobre si apoyaban o no la medida. Mientras que la propuesta de presupuesto para 2022 de la Administración Biden también sustituyó la palabra «madres» por «personas que dan a luz», la Casa Blanca guardó igualmente silencio sobre la medida de la NEA.
Durante una entrevista el 9 de julio, la madre y cofundadora de Moms for Liberty, Tiffany Justice, criticó la propuesta, diciendo que la NEA no era más que un «cártel del K-12», que impulsaba una agenda política radical.
Ya sea debido a la rápida reacción del público, o a la ausencia de apoyo entre los candidatos y líderes demócratas, la NBI 63 finalmente ni siquiera se sometió a votación. Sin embargo, Justice no se echa atrás.
«Hay muchas otras cosas que la NEA propuso, y realmente sugiero a la gente que empiece a prestar atención porque se sorprenderá de los temas de la agenda radical que el sindicato está impulsando en todo el país», dijo Justice a The Epoch Times.
Agenda progresista
Por ejemplo, los delegados de la Asamblea de Representantes también aprobaron una nueva declaración política que pide el fin de la «criminalización y la vigilancia de los estudiantes», pero no llegó a proponer la eliminación de los agentes de recursos escolares armados, los guardianes y los alguaciles de los campus escolares.
Los delegados también aprobaron una medida propuesta por Arlene Inouye, secretaria de United Teachers Los Angeles, que dice que la «NEA se posicionará públicamente en defensa del aborto y de los derechos reproductivos y animará a sus miembros a participar en actividades que incluyan concentraciones y manifestaciones, campañas políticas y de presión, eventos educativos y otras acciones para apoyar el derecho al aborto, la anticoncepción y la decisión de una persona sobre su salud». Al presentar su idea, Inouye dijo que otros delegados le pidieron que eliminara la palabra «aborto» de la propuesta. Ella se negó.
Los delegados atacaron lo que llaman la oleada de legislación anti-LGBTQ que se está proponiendo y aprobando en los estados de todo el país, como la ley de Derechos de los Padres en la Educación de Florida (pdf), que fue etiquetada inexactamente por la izquierda como la ley «No digas gay». En el texto de toda la ley —que prohíbe la instrucción sobre la orientación sexual o la identidad de género a los alumnos de preescolar a tercer grado— no se menciona nunca la palabra «gay».
Una medida que se propuso pero no se aprobó en la Asamblea de Representantes fue una moción para apoyar una política nacional de uso de mascarillas obligatorio y vacunas contra el COVID-19 en las escuelas. La medida fue derrotada contundentemente por el 84% de los delegados.
«La luz del sol es el mejor desinfectante, así que corramos la cortina de la educación», sugirió Justice. «Ciertamente están ayudando a hacer eso y Moms for Liberty está trabajando para mostrar a Estados Unidos quién es realmente la NEA. Cuando ves lo que realmente les preocupa, tiene sentido por qué más de dos tercios de los alumnos de cuarto grado no pueden leer de forma competente».
Un sistema educativo que fracasa
Las estadísticas del gobierno muestran que el sistema educativo de Estados Unidos está fracasando. De hecho, cuanto más tiempo permanece un niño en el sistema escolar público, menos competente se vuelve en múltiples materias.
Los datos del gobierno para 2019 muestran que el estudiante promedio de cuarto grado tiene un nivel de competencia del 41% en matemáticas. Para el octavo grado, ese nivel de competencia cae al 34%. Para el duodécimo grado, la competencia en matemáticas es solo del 24%, casi la mitad de lo que era en cuarto grado. En lectura, los alumnos de cuarto grado tienen un nivel medio de competencia del 35%. En octavo grado, el nivel de competencia cae al 34%, y en el duodécimo grado, el estudiante promedio de Estados Unidos muestra solo una ligera mejora de competencia del 37%. En escritura, los niveles de competencia son del 28% en cuarto grado, y los alumnos de octavo y duodécimo grado comparten una puntuación del 27%.
Los estudiantes estadounidenses obtienen peores resultados en ciencias. Los alumnos de cuarto grado solo tienen una tasa de competencia del 36% y los de octavo grado bajan al 35%. Los alumnos de duodécimo grado solo tienen una tasa de competencia del 22%. Los peores resultados se obtienen en historia, ya que los alumnos de cuarto grado comienzan con solo un 20% de competencia y bajan al 15% en octavo grado. En el duodécimo grado, los estudiantes estadounidenses tienen un nivel de competencia del 12% en historia.
Las cifras de USA Facts muestran resultados similares.
«Como me criaron, mis padres me dijeron que debía creer a la gente cuando me mostrara quiénes son, y la NEA ciertamente ha mostrado al pueblo estadounidense quiénes son y les creemos», explicó Justice. «Se preocupan más por las ideologías y agendas radicales y de extrema izquierda que por la enseñanza y el aprendizaje que debería darse en las aulas».
Política y grupos de presión
La NEA también parece preocuparse más por impulsar su agenda política que por representar a sus propios miembros.
Los datos recopilados por Americans for Fair Treatment muestran que la NEA gasta más en «actividades políticas y grupos de presión» que en «beneficios para los empleados» o «actividades de representación». Según el informe de abril de 2022, el 17.6 por ciento del gasto de la NEA se destinó a «actividades políticas y grupos de presión». Según Open Secrets, la NEA gastó 2,720,000 dólares en grupos de presión en 2021. En lo que va de 2022, la NEA ha gastado 730,000 dólares en grupos de presión.
Mientras tanto, la NEA gastó solo el 15.1 por ciento en beneficios para los empleados y un mero 8.6 por ciento en actividades de representación.
Aunque organizaciones como la NEA no pueden contribuir directamente a los candidatos y a los comités de los partidos, lo sortean donando a través de sus afiliados, compuestos principalmente por asociaciones de maestros estatales y de condado, como la Asociación de Maestros de California y Duval Teachers United.
«En su asamblea de representantes se reunieron 6000 delegados y se propusieron asuntos de extrema izquierda», señaló Justice. «En su página web, dicen que representan a tres millones de miembros, pero también dicen que representan y defienden a 50 millones de escolares. Conozco a muchos padres que dicen a la NEA: ‘no necesitamos que defiendan a nuestros hijos’. Hace un año, casi al día, Randi Weingarten dijo que la TCR no se enseñaba en las aulas de Estados Unidos. Pero si vas a la página web de la NEA verás cómo hablan del racismo sistémico y de mirar todo a través de una lente de justicia racial».
«Racismo sistémico»
«Seamos claros», dijo Weingarten, la jefa del sindicato, durante una conferencia de la Federación Americana de Maestros (ATF, por sus siglas en inglés) en julio de 2021. «Es un método de examinación que se enseña en las facultades de Derecho y en la universidad y que ayuda a analizar si el racismo sistémico existe —y, en particular, si tiene un efecto sobre la ley y las políticas públicas. Pero los guerreros de la cultura están etiquetando cualquier discusión sobre la raza, el racismo o la discriminación como TCR para tratar de hacerla tóxica. Están intimidando a los maestros y tratando de impedir que enseñemos a los alumnos una historia precisa».
Sin embargo, incluso una revisión rudimentaria de la página web de la NEA demuestra la determinación de la NEA de impulsar postulados de la teoría crítica de la raza (TCR) como la justicia social, el racismo sistémico y el trato preferente a la gente de color.
Utilizando el NBI 63 en la búsqueda, se muestra una gran cantidad de temas, incluyendo la NEA y la Justicia Racial en la Educación, explicando cómo «La justicia racial es el trato justo sistemático de las personas de todas las razas, lo que resulta en oportunidades y resultados equitativos para todos».
Resumen de datos: Diversidad y representación en la administración de la educación PK-12, explica «la importancia de una plantilla de educadores que refleje la diversidad de Estados Unidos».
Otros artículos: ¿Hasta qué punto los candidatos a profesores de minorías étnicas se ven afectados por las evaluaciones de alto nivel?, Educadores que se parecen a mí y Contratación de educadores de color se centran por completo en la misión de la NEA de contratar a los maestros en función de su color de piel y no de sus cualificaciones académicas.
La Conferencia de la NEA sobre Justicia Racial y Social, celebrada del 29 de junio al 1 de julio, proporcionó «un espacio único para que educadores, estudiantes, padres y familias, organizadores, miembros de la comunidad y líderes se unieran para el avance de la Justicia en la Educación».
La agenda de la NEA de su Reunión de la Asamblea de Representantes y el Programa de Eventos para el 14 de junio al 6 de julio incluyó una Conferencia sobre Justicia Racial y Social programada para el 30 de junio y el 1 de julio.
Mientras buscaba propuestas para su Cumbre de Liderazgo Nacional de la NEA de 2022, la NEA instruyó a los contribuyentes para que se aseguraran de que sus ideas «promovieran las prioridades estratégicas de la NEA», incluyendo la «Justicia Racial en la Educación».
«Exponiendo a los liberales por lo que realmente son»
«Es como Libs of TikTok», dijo Justice. «No tenemos que hacer nada, excepto mostrarles cómo son realmente y cómo no se centran en los niños y la educación, el aprendizaje y la enseñanza».
A través de cuentas en Twitter, Instagram y YouTube, Libs of TikTok consiguió más de medio millón de seguidores y decenas de millones de visualizaciones en menos de un año sin hacer nada más que exponer a los liberales por lo que realmente son al volver a publicar lo que comparten en las redes sociales.
Según Justice, el «cártel del K-12» debe «centrarse en enseñar a los niños en lugar de impulsar la ideología de extrema izquierda en las aulas». También cree que los que impulsan la agenda radical son la minoría en la NEA y es hora de que la mayoría «se levante y luche».
«Los extremistas de extrema izquierda se han apoderado de la NEA y Moms for Liberty no cree que los tres millones de miembros que tiene la NEA en todo el país crean realmente en ninguna de estas ideologías woke e ideas radicales de extrema izquierda», afirmó Justice. «Creo que están desesperados y se están mostrando realmente. Pedimos a los maestros que se levanten y luchen, que no paguen sus cuotas y que no sean miembros».
Sindicatos
Durante su intervención en la reunión anual de la NEA 2022, la vicepresidenta Kamala Harris dijo, entre muchos aplausos, que «este es un momento histórico, creo, para el movimiento sindical. Hoy en día, los sindicatos tienen su mayor índice de aprobación desde 1965. Aproximadamente la mitad de los trabajadores no sindicados dicen que se unirían a un sindicato si tuvieran la oportunidad. Son casi 60 millones de personas. Piénselo».
Aunque el entusiasmo entre los miembros de los sindicatos está en su punto más alto desde 1965, es solo porque los que quieren que los sindicatos tengan el control siguen siendo miembros. En 2018, una sentencia de la Corte Suprema dijo que los trabajadores ya no tienen que formar parte o pagar cuotas a un sindicato o una asociación para mantener sus puestos de trabajo. Desde esa sentencia, los que se vieron obligados a afiliarse y pagar cuotas sindicales han huido y la afiliación ha caído a un mínimo histórico.
La NEA también ha estado perdiendo membresía. En 2019, la NEA perdió casi 33,000 miembros más. En 2020, perdieron otros 2553 miembros. En octubre de 2021, la Agencia de Inteligencia Educativa informó que «los números de principios de 2021 muestran una disminución de un máximo histórico de 3.234.639 miembros cuando Barack Obama era presidente, a 2.937.366 miembros, incluidos los jubilados, un mínimo no visto desde 2006». Teacher Freedom.org ofrece incluso instrucciones a los profesores sobre cómo cancelar su afiliación a la NEA. En los últimos cinco años, algunas filiales estatales han perdido una quinta parte o más de sus miembros. Los sindicatos de trabajadores públicos perdieron casi 5000 miembros en el primer año.
Miles de profesores ya han renunciado, y una encuesta de febrero publicada por la propia NEA muestra que la mitad de los que se quedan también amenazan con irse. Mientras que algunos culpan al estrés de la pandemia, a los bajos salarios o al agotamiento de los educadores por el éxodo masivo, Justice cree que la huida de los «buenos maestros» está siendo causada por la intimidación y el miedo al que están sometidos por parte de los izquierdistas radicales que intentan obligarles a abrazar sus destructivas ideologías liberales y a cumplir con el uso de mascarillas forzado y las vacunas contra el COVID.
The Epoch Times se puso en contacto con la NEA para pedirle comentarios.
Forzar la salida de los maestros
Un maestro de escuela primaria de Kansas fue multado con 1000 dólares por renunciar por las políticas de uso de mascarilla forzado del distrito y la enseñanza de la Teoría Crítica de la Raza.
La mitad de los maestros del First Presbyterian Preschool de Tequesta (Florida) renunciaron en agosto de 2021 tras la decisión de mantener su política de uso de mascarillas obligatorio para maestros y personal, independientemente de su estado de vacunación.
Un maestro de inglés de una importante escuela preparatoria de Nueva Jersey renunció en junio de 2021 diciendo que la TCR se estaba utilizando para crear una «cultura hostil de conformidad y miedo» al tratar de forzar a los estudiantes blancos a creer que son «opresores».
La emotiva y pública renuncia de un maestro del condado de Loudoun, Virginia, durante una reunión del consejo escolar en agosto de 3021 se hizo viral. ¿Su razón? Se sentía como «un engranaje» de una «máquina» que estaba decidida a impulsar políticas de izquierdas como la TCR, la transexualidad y el uso forzado de mascarillas.
Frustrada por el creciente rechazo de los padres y otros educadores a la enseñanza de la TCR, una educadora llamada Vivett Dukes dijo que los maestros blancos, «racistas, sexistas, homófobos, misóginos y xenófobos» que se negaban a enseñar la TCR deberían dejar la profesión. «… ya no hay sitio para ustedes en la proverbial posada», escribió para Citizen Education. «Salgan por la izquierda del escenario. El espectáculo ha terminado. Su papel protagonista ha sido cancelado sin renovación».
Dar voz a los maestros
«Los buenos maestros que se dedicaron a la enseñanza para poder llegar a los niños sienten que sus trabajos están siendo secuestrados y que están siendo utilizados como operativos políticos y no creo que lo aprecien», dijo Justice. «La mayoría de estos maestros aman a los niños y se dedicaron a la enseñanza por las razones correctas, porque realmente quieren que los niños estén bien. He trabajado como miembro del consejo escolar. He trabajado junto a esos maestros. Sé que existen. Pero la NEA ha sido capturada por extremistas de extrema izquierda y ahora son los soldados de a pie de la administración de extrema izquierda de Biden y los padres estadounidenses los ven como lo que son. Ya no podemos confiar en ellos. Ahora nos han mostrado quiénes son realmente y les creemos y no les confiamos a nuestros hijos».
Justice también prometió que Moms for Liberty va a hacer todo lo posible «para ayudar a dar voz a los maestros y ayudarles a sentirse protegidos para que puedan oponerse a esta ideología radical que no creemos que la mayoría de los maestros estadounidenses quieran».
Según Justice, «los padres no deberían preocuparse de que la enseñanza que se imparte en la escuela sea completamente contradictoria con lo que los padres enseñan a sus hijos en casa».
Al preguntarle cómo se enfrentará al «cártel del K-12», Justice dijo que el plan es sencillo. «Mostrarles lo que son. Son unos mentirosos y los padres ven que mienten, y estamos cansados de que nuestros hijos sean rehenes de los sindicatos».
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