WINDHAM, N.Y.— Un piloto y un perro que había sido rescatado y transportaba a un refugio de animales murieron cuando la avioneta en que viajaban se estrelló en los bosques nevados de las montañas Catskill. Más tarde se descubrió que otros dos perros rescatados sobrevivieron, informaron las autoridades.
Seuk Kim, de 49 años, volaba de Maryland a Albany, Nueva York, cuando la avioneta se estrelló el domingo por la noche en una zona remota de Windham, a unos 56 kilómetros al suroeste de Albany, según las autoridades.
Una investigación preliminar indica que el piloto murió a causa del impacto, dijo el sheriff del condado de Greene, Peter Kusminsky. El vuelo transportaba tres perros y estaba asociado a un grupo sin ánimo de lucro, que transporta animales rescatados con ayuda de pilotos voluntarios, dijo el sheriff.
Dos perros sobrevivieron al accidente: Un cachorro mezcla de labrador que sufrió rotura de huesos, y otro perro que solo tuvo heridas leves.
«Este estaba bastante asustado y se hundió en la nieve», dijo Kusminsky sobre el cachorro con los huesos rotos.
El perro, llamado Whiskey, fue trasladado a un hospital veterinario de Middleton, Connecticut, según la organización sin ánimo de lucro a la que Kim entregaba los perros, el Refugio de Animales del Condado de Schoharie. El otro perro, encontrado a salvo, es un yorkie terrier de 18 meses, llamado Pluto.
Abundantes homenajes a favor de Kim, que era de Springfield, Virginia, se vertieron en un memorial en línea el lunes, con compañeros rescatadores de perros, agradeciéndole por realizar los vuelos y coordinar a pilotos de todo el país.
«A lo largo de los años, Seuk ayudó a salvar la vida de cientos de animales que de otro modo habrían sido sometidos a eutanasia debido a la superpoblación en los refugios de animales», dijo en una declaración Maggie Pryor, directora del Refugio de Animales del Condado de Schoharie.
Cathay West, que dirige Kuddles & Kisses K9 Rescue en Baltimore, Maryland, dijo que vio a Kim por última vez en octubre en un aeropuerto cercano cuando le entregó un perro que solo unos días antes había estado en una lista para ser eutanasiado de Tennessee, por estar superpoblado.
«Me traía una mamá perra y cinco cachorros», relató West. «Estaba muy involucrado en intentar correr la voz para que se ofrecieran voluntarios, para que sepan otros pilotos, que el salvar a estos perros a que no mueran en los refugios era algo bueno».
Una declaración de la familia de Kim dijo que era originario de Corea del Sur y «llegó a este país con poco más que un sueño, y a través del trabajo duro y la perseverancia, construyó una vida de significado y generosidad».
«Era una persona amable y desinteresada que siempre se desvivía por ayudar a los demás, sin importar las circunstancias», dice la declaración. «Su legado perdurará en las innumerables vidas que tocó, tanto humanas como animales», añadió.
La Administración Federal de Aviación y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte están investigando el accidente.
La visibilidad era escasa el domingo y Kim pidió permiso para cambiar de altitud debido a las turbulencias antes del accidente, dijo Kusminsky.
El avión se estrelló en un bosque a un par de kilómetros de la carretera más cercana. Los equipos de rescate localizaron los restos antes de medianoche en un bosque cubierto por unos 30 centímetros de nieve, según el sheriff.
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