Una empresa alemana, propiedad de una multimillonaria rusa que envió 3.5 millones de dólares a Hunter Biden, recibió un contrato para construir parte del Museo de la Segunda Guerra Mundial en Nueva Orleans, Estados Unidos, según una nota informativa del sitio web del museo.
Elena Baturina, viuda del exalcalde de Moscú, Yury Luzhkov, compró a principios de 2015 la fábrica alemana de membranas estructurales Hightex. En abril de 2017, ella anunció que Hightex construiría parte del dosel de la paz para el Museo de la Segunda Guerra Mundial, según la prensa rusa.
Tres años antes, el 14 de febrero de 2014, Baturina envió USD 3.5 millones a Rosemont Seneca Thornton LLC, una empresa cofundada por Hunter Biden, hijo del exvicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, según un informe publicado por los republicanos del Senado el 23 de septiembre. La transferencia iba acompañada de una nota que decía «Acuerdo de Consultoría DD12.02.2014».
El proyecto Canopy of Peace del museo de la Segunda Guerra Mundial ha estado plagado de retrasos debido en gran parte a problemas derivados a contratistas diferentes, según el The New Orleans Advocate. En agosto de este año, la mitad del material de Hightex aún no había sido enviado al proyecto, que en ese momento tenía una demora de ocho meses. El museo no respondió a una solicitud de comentarios.
Joe Biden organizó un evento para recaudar fondos para el museo durante las primeras etapas de su campaña presidencial, en agosto de 2019.
Si bien no hay pruebas de que exista una relación entre la transferencia de Baturina y el contrato otorgado al museo, pueden surgir dudas sobre ambas transacciones porque los republicanos del Senado descubrieron los pagos de Baturina después que estos fueran marcados debido a su «denuncia de actividad delictiva». Baturina no respondió a una solicitud de comentarios enviada al correo electrónico de un grupo de expertos que ella fundó.
Un año después de enviar USD 3.5 millones a la empresa de Biden, entre el 6 de mayo y el 8 de diciembre de 2015, Baturina transfirió más de USD 241,000 a la misma empresa. El dinero fue entonces remitido a BAK USA LLC, un fabricante de tabletas con sede en Búfalo, que eventualmente fue a la quiebra alegando que tenía una deuda de USD 39 millones.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, había elogiado a BAK USA cuando recibió un contrato de Microsoft a principios de 2016. Antes de que BAK USA quebrara, el estado de Nueva York le dio a la firma una reducción de impuestos permitiéndole operar libre de impuestos por 10 años. La empresa fue reincorporada desde entonces y parece estar en la misma línea de negocio.
Tres meses después de la última transferencia a BAK USA, a través de la empresa de Hunter Biden, Baturina anunció que había comprado USD 10 millones en bienes raíces cerca del Barclays Center en Brooklyn, Nueva York, según un comunicado de prensa. Ella tenía la intención de convertir la zona para acomodar unidades residenciales, un proceso que requiere un largo proceso de aprobación.
Los senadores Chuck Grassley (R-Iowa) y Ron Johnson (R-Wis.) lideraron el trabajo detrás del informe publicado en el Senado el 23 de septiembre. Las transacciones de Baturina son una pequeña parte de un informe más amplio que también documenta los vínculos entre Hunter Biden y ciudadanos extranjeros de Ucrania y China.
Hunter Biden aceptó un puesto bien remunerado en el consejo de administración de un gigante del gas ucraniano, mientras que su padre era el encargado de la administración de Obama en Ucrania. El informe reveló que los altos funcionarios levantaron banderas de alerta sobre el papel de Hunter Biden, hecho que el gobierno ignoró en repetidas ocasiones.
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