Una niña nació con tres cabezas en un centro de salud en Uttar Pradesh, India, dejando a todo el equipo asombrado.
Después del inusual nacimiento que ocurrió el pasado jueves, madre e hija fueron trasladadas al Hospital de Distrito de Etah, donde tendrán instalaciones médicas más avanzadas para atender el caso y ofrecer una cura quirúrgica, reportó el medio The Sun el 24 de julio.
La niña nació con una cabeza de la cual le brotaron dos grandes protuberancias en la parte posterior del cráneo.
El informe dice que cuando la madre fue admitida, sufría extremos dolores de parto debido al estado del bebé. La formación de cabezas extras es una malformación congénita asociada a la nutrición antes del embarazo y que es conocida como encefalocele.
Los médicos dijeron que la madre no había experimentado ninguna complicación durante su embarazo. De hecho tanto ella como sus familiares también quedaron muy sorprendidos.
«Esta es una condición médica muy rara», explicó Rajesh Thakur, Superintendente Médico Jefe del Hospital de Distrito de Etah, según The Sun.
«El cuerpo del niño no se ha desarrollado completamente. Realizaremos una resonancia magnética y luego una cirugía para separar las cabezas», añadió.
Los profesionales anunciaron que con la resonancia esperan determinar la condición médica que causó la anormalidad.
Los encefaloceles fetales son defectos de nacimiento del cráneo que se caracterizan por la falta parcial de fusión ósea en las primeras semanas del embarazo, cuando el feto se está formando. Esto deja una brecha a través de la cual sobresale una parte del cerebro y con el tiempo puede seguir filtrándose hacia afuera, según Rare diseases.
«En algunos casos, el líquido cefalorraquídeo o las membranas que cubren el cerebro, las meninges, también pueden sobresalir a través de esta brecha», dice el informe.
Según el Servicio Nacional Sanitario NHS de Estados Unidos, la encefalocele ocurre a 1 a 2 bebés cada 10.000 nacimientos en el mundo y aunque no se comprende exáctamente las razones de la malformación, está asociado a embarazadas que tienen bajos niveles de ácido fólico.
El ácido fólico, folacina o ácido pteroilmonoglutámico, conocido también como vitamina B9,2, es una vitamina del complejo de vitaminas B, necesaria para la maduración de proteínas estructurales y hemoglobina. Se encuentra en las vísceras de animales, verduras de hoja verde, legumbres, levadura de cerveza y en frutos secos y granos enteros, como las almendras.
El encefalocele también ocurre en niños al mes de nacer y más edad, donde también el defecto congénito del cráneo hace que una porción del sistema nervioso central se hernie a través de una fisura. Los hay en todos los lados del cráneo, occipitales, parietales y nasales, según un estudio indio publicado en la Librería Nacional de Medicina de los Institutos de Salud de EE.UU.
Los encefaloceles grandes requieren tratamiento quirúrgico urgente para evitar daños cerebrales. En todos los operados, analizados en el estudio indio, durante la cirugía encontraron tejido cerebral que se extrajo de forma segura.
El 4 de marzo, según el reporte de The Sun, un equipo de expertos neurocirujanos del Instituto de Ciencias Médicas de Sher-e-Kashmir (SKIMS) operó con éxito a un bebé con dos cabezas.
Pronóstico de los niños operados
Según el informe pediátrico de los Hospitales de Niños del Servicio Nacional de Salud (NHS) británico, el pronóstico «varía según la ubicación del encefalocele y la cantidad de meninges / tejido cerebral fuera del cráneo. También dependerá de cualquier otro problema presente y si el encefalocele es parte de un síndrome».
Una proporción de niños sufre «pocos efectos a largo plazo en las funciones corporales, como la respiración, la visión y la audición».
Algunos niños pueden quedar con algunas discapacidades de aprendizaje y necesitarán un apoyo en la educación y la vida cotidiana.
«La mayoría de los niños sin discapacidades de aprendizaje crecen para llevar una vida normal, trabajando y formando una familia», destaca el documento del NHS.
A las mujeres que tuvieron bebés con encefalocele, en futuros embarazos se les recomienda dosis más altas de ácido fólico de lo normal.
«Le recomendamos que tome 4 mg de ácido fólico cada día durante al menos tres meses antes de la concepción y durante los primeros tres meses de embarazo. Esta dosis es más alta que la recomendación estándar para las mujeres que no han tenido previamente un niño con un defecto del tubo neural», dice el equipo pediátrico del NHS.
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«»Estaba horrorizada… no sabía que algo así podría pasarle a alguien»».
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