El turismo de Nueva York acaba de alcanzar otro objetivo más allá de recuperarse de las pérdidas sufridas tras la pandemia.
Durante una parada en la Feria Estatal de Nueva York el 28 de agosto, la Gobernadora Kathy Hochul anunció que 306 millones de personas visitaron el estado el año pasado, la cifra más alta registrada en la historia del estado.
Los turistas gastaron la cifra récord de 88,000 millones de dólares en alojamiento, comida, transporte, etc., lo que produjo un impacto económico total de 137,000 millones de dólares, según Hochul.
«El estado de Nueva York es sinónimo de turismo», dijo Hochul en una declaración tras el anuncio de la feria. «A medida que nos acercamos a la temporada de follaje otoñal y de viajes, estamos recibiendo más visitantes… su presencia está apoyando a empresas y comunidades en cada rincón del estado».
El aumento post-pandemia en la economía turística del estado —el gasto directo de los visitantes el año pasado, fue un 20 por ciento mayor que en 2019— está impulsado por los visitantes nacionales, según los informes anuales de turismo publicados por Empire State Development, la agencia de desarrollo económico del estado.
Los visitantes nacionales gastaron 88 mil millones de dólares en Nueva York el año pasado, frente a los 78 mil millones de dólares en 2022 y los 53 mil millones de dólares en 2019, mientras que el gasto de los visitantes internacionales sigue por debajo de los niveles anteriores a la pandemia.
Los viajeros extranjeros, incluidos los visitantes de Canadá, gastaron más de 19,000 millones de dólares en 2019. El año pasado, gastaron más de 15,000 millones de dólares.
En los informes anuales, los visitantes se definen como aquellos que pernoctan o viajan más de 50 millas a destinos en Nueva York. Tourism Economics, una filial de la firma de asesoría global Oxford Economics, fue contratada por el estado para preparar los informes.
Más de un tercio de los 88,000 millones de dólares de gasto turístico directo en el estado el año pasado se destinó a alojamiento y una cuarta parte a alimentación, seguido del comercio minorista, el transporte y la recreación, que generaron 49,000 millones de dólares en impacto económico indirecto y casi 11,000 millones de dólares en ingresos fiscales estatales y locales.
El alojamiento incluye hoteles, alquileres a corto plazo y segundas residencias.
La ciudad de Nueva York representa la mayor parte de la economía turística del estado. Históricamente, tres de cada cinco dólares que dejan los turistas se gastan en la ciudad, según los informes.
Fuera de la ciudad de Nueva York y Long Island, el centro de Nueva York registró el mayor gasto de los visitantes entre las ocho regiones turísticas del norte del estado el año pasado, seguido del valle del Hudson, Finger Lakes y Niágara.
Antes de la pandemia, Hudson Valley registró el mayor gasto por parte de los visitantes entre las regiones del norte del estado los —visitantes gastaron casi 2000 millones de dólares más en la región que en el centro de Nueva York en 2019— pero el aumento del gasto en la región después de la pandemia, es mucho menos sólido que el de esta última.
Según los informes, las regiones de Adirondacks y Catskills son las que más dependen del sector turístico en lo que respecta a los mercados laborales.
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