Los países de la Unión Europea y sus países asociados recibieron más de medio millón de solicitudes de asilo en el primer semestre de 2023, lo que supone un aumento interanual de casi el 30 por ciento, según los nuevos datos publicados el 4 de septiembre por la Agencia de Asilo de la Unión Europea (EUAA).
Los datos de la agencia muestran que las solicitudes de asilo en el bloque de 27 países y los países asociados Suiza y Noruega ascendieron a 519,000 entre enero y finales de junio de este año, lo que supone un aumento de aproximadamente el 28% en comparación con el primer semestre de 2022.
Las últimas cifras siguen a un significativo aumento del 53% interanual en 2022. La agencia de asilo dijo que prevé que las solicitudes puedan superar el millón a finales de 2023.
Estas cifras no incluyen a los aproximadamente 4 millones de ucranianos que están huyendo de la invasión rusa y que actualmente están acogidos en virtud de disposiciones de protección temporal.
«Como resultado del aumento, muchos países de la UE + están bajo presión con el procesamiento de solicitudes y la protección de los necesitados», dijo la agencia.
«En consecuencia, el número de casos en espera de decisiones también aumentó en un 34% desde 2022», agregó. «Juntas, estas tendencias paralelas plantean desafíos significativos a las autoridades de los sistemas de asilo y recepción de la UE +, tanto que en junio de 2023, la EUAA estaba ofreciendo asistencia operativa a 13 Estados miembros».
Según la agencia de asilo, los sirios siguieron presentando el mayor número de solicitudes de asilo en la UE+ entre enero y junio de este año, continuando una tendencia que se viene observando desde hace varios años.
En el primer semestre de 2023, los ciudadanos sirios presentaron un total de 67,000 solicitudes de asilo, lo que supone un aumento de casi el 50% en comparación con el mismo periodo de 2022. Esa cifra también marca la mayor cantidad de solicitudes en esta época del año desde 2016.
Más rusos reciben protección
Alemania sigue recibiendo el mayor número de solicitudes sirias, tramitando aproximadamente el 62% de todas las solicitudes en el primer semestre de 2023, según la agencia de asilo.
Junto con los sirios, los afganos, venezolanos, turcos y colombianos presentaron el mayor número de solicitudes de asilo en la UE+ en el primer semestre de 2023, representando conjuntamente el 44% de todas las solicitudes, según la agencia.
«Venezolanos y colombianos presentaron cada vez más solicitudes, representando juntos el 13% de todas las solicitudes en la UE+ (36,000 y 34,000)», dijo la agencia.
«Esto representó un fuerte aumento del 41% para los venezolanos y un aumento aún más pronunciado del 73% para los colombianos, en comparación con el primer semestre de 2022», dice el informe. «Es importante destacar que esta tendencia no está relacionada con la migración irregular porque estas ciudadanías pueden entrar legalmente en el espacio Schengen de la UE sin visados, incluso viajando en vuelos desde sus países de origen. Estas tendencias también son únicas por su singularidad: la inmensa mayoría de las solicitudes, junto con las decisiones correspondientes y los casos pendientes, están muy concentrados en un solo Estado miembro: España».
Por otra parte, el número de rusos e iraníes a los que se ha concedido protección en Europa ha aumentado en los últimos años en comparación con años anteriores, según la agencia de asilo europea.
Los datos muestran que en 2021 se concedía protección internacional a los rusos en porcentajes de alrededor del 20%, pero que ahora es del 35%, dijo la EUAA. En cambio, a los iraníes se les están concediendo esas protecciones a un ritmo de alrededor del 47%, en comparación con el 31% en 2020.
En el primer semestre de este año también se registró un notable aumento de las solicitudes de asilo procedentes de Costa de Marfil, en un contexto de crecientes tensiones políticas —unas 9300, según la agencia— y de Guinea, país de África Occidental, cuyos nacionales presentaron unas 8700 solicitudes de asilo en la UE+.
Los últimos datos se producen en un momento en el que el continuo aumento de solicitantes de asilo y otros migrantes en Europa ha supuesto una importante presión para múltiples naciones.
Dimisión del Primer Ministro holandés por su política de asilo
En otros lugares, como Bélgica, el gobierno anunció la semana pasada que dejaría de proporcionar alojamiento a los hombres solteros solicitantes de asilo, declarando en su lugar que su sobrecargada capacidad de alojamiento debería dar prioridad a las familias, las mujeres y los niños.
Esta decisión fue ampliamente condenada por las organizaciones de derechos humanos.
Un mes antes, en julio, el primer ministro holandés, Mark Rutte, dimitió como líder del partido gobernante del país en medio de desacuerdos sobre la política migratoria.
«No es ningún secreto que los partidos de la coalición piensan de forma muy diferente sobre la política de asilo y hoy, por desgracia, tenemos que llegar a la conclusión de que las diferencias son insalvables», dijo Rutte en una rueda de prensa tras su dimisión. «La caída de un gobierno nunca es buena. Pero a veces es imposible en un país de coalición como Holanda llegar a un acuerdo».
Aunque ya no está en la UE, el Reino Unido también ha visto un aumento significativo de las solicitudes de asilo, con un gasto del ministerio del Interior en asilo que ha aumentado en 1850 millones de libras (USD 2320 millones), pasando de 2120 millones de libras (USD 2660 millones) en 2021/22 a 3970 millones de libras (USD 4980 millones) en 2022/23, algo que el primer ministro Rishi Sunak ha calificado de «inaceptable».
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