El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se dirigirá al Congreso el 24 de julio para defender que Estados Unidos siga apoyando a Israel en su actual guerra contra Hamás en Gaza.
Será el cuarto discurso de Netanyahu ante una sesión conjunta del Congreso, todo un récord para un dirigente extranjero.
Netanyahu se dirigirá a los legisladores en medio de la presión del presidente Joe Biden para lograr un marco de paz que incluya un alto el fuego y la liberación de los rehenes que Hamás tomó el 7 de octubre de 2023. El ataque se saldó con el asesinato de más de 1200 israelíes y la toma de 250 rehenes.
Ocho de los rehenes son estadounidenses.
El Secretario de Estado Antony Blinken dijo el 19 de julio que un acuerdo está «dentro de la línea de las 10 yardas», aunque «las últimas 10 yardas son las más difíciles».
Israel ha dicho que su misión de destruir a Hamás no ha cambiado.
Su campaña militar ha sido objeto de escrutinio por parte de Estados Unidos y la comunidad internacional por lo que dicen que Israel no ha evitado suficientemente las víctimas civiles, una acusación que el Estado judío rechazó.
En Gaza existe una crisis humanitaria a pesar de que Estados Unidos, Israel y sus aliados entregan ayuda. Ha habido informes de que Hamás ha confiscado dicha ayuda.
Durante su operación en la Franja de Gaza, Israel también se ha enfrentado a los ataques de Hezbolá, al norte del país, y ha tomado represalias contra ellos.
En abril, Israel también fue objeto de ataques con misiles por parte de Irán, que apoya a Hamás y Hezbolá. La mayoría de los proyectiles fueron interceptados por Israel y países aliados. Israel lanzó entonces una represalia militar limitada contra Irán.
El gobierno de Biden ha sido objeto de críticas por su política hacia Irán, que incluye el levantamiento y la no aplicación de sanciones, y la emisión de exenciones de sanciones.
Esto también ha incluido que el Departamento de Estado retirara la designación de los Houthis respaldados por Irán como organización terrorista poco después de que el presidente Biden asumiera el cargo. Los Houthis fueron designados de nuevo como grupo terrorista en enero. El 19 de julio, los Houthis atacaron Tel Aviv con un vehículo aéreo no tripulado que mató a una persona e hirió a diez.
El discurso de Netanyahu se producirá en medio de un aumento del antisemitismo en Estados Unidos. El presidente Biden ha condenado el antisemitismo.
El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson (R-La)), y el líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer (D-NY), junto con el líder de la minoría en la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries (D-NY), y el líder de la minoría en el Senado, Mitch McConnell (R-Ky), firmaron una carta el 31 de mayo invitando a Netanyahu.
Schumer se sumó a la iniciativa de permitir que Netanyahu se dirigiera al Congreso a pesar de haber reprendido al primer ministro en un discurso pronunciado a principios de año en el Senado, en el que pidió nuevas elecciones en Israel.
Algunos legisladores demócratas ya han declarado que boicotearán el discurso en protesta por las políticas de Israel en Gaza. El discurso tendrá lugar más de un año después de que el presidente israelí Isaac Herzog se dirigiera a una sesión conjunta del Congreso para celebrar el 75 aniversario de Israel. Algunos legisladores demócratas se saltaron ese acto.
Netanyahu y el presidente Biden se han enfrentado durante la guerra, aunque se espera que ambos se reúnan en Washington.
El mes pasado, Netanyahu difundió un vídeo en las redes sociales en el que culpaba a la administración Biden de no suministrar armas a Israel.
La administración negó que fuera así, pero dijo que Washington había retenido un envío de bombas de 2000 libras, alegando que Israel podría utilizarlas en la ciudad meridional gazatí de Rafah, donde se cree que se encuentra el último batallón de Hamás.
La administración se opuso a una invasión a gran escala de Rafah —que Israel acabó lanzando— ya que estaba densamente poblada por civiles y a Washington le preocupaba la posibilidad de una drástica pérdida de vidas civiles.
No obstante, predijo la directora senior del Jewish Policy Center, Shoshana Bryen, Netanyahu «se centrará en la voluntad del Congreso de financiar y aprobar el dinero y las armas».
La última vez que el Sr. Netanyahu se dirigió a una sesión conjunta del Congreso en 2015, advirtió sobre un acuerdo nuclear con Irán.
El acuerdo se hizo entre Irán y Estados Unidos, la Unión Europea y otros países, e incluía el alivio de sanciones a cambio de que Teherán redujera su programa de armas.
El presidente Barack Obama y su gobierno, incluido el vicepresidente Joe Biden, se negaron a reunirse con Netanyahu durante su visita de 2015. Casi 60 demócratas boicotearon el discurso en el Congreso.
Sin embargo, lo que está en juego en el próximo discurso de Netanyahu es diferente al de 2015, según los analistas.
«La relación entre Estados Unidos e Israel se encuentra actualmente en una especie de punto bajo. El primer ministro necesita transmitir un mensaje claro y hablar directamente al pueblo estadounidense».
«Tiene que volver a ganarse la causa de Israel en la mente de los estadounidenses», declaró a The Epoch Times el comentarista conservador Josh Hammer.
Jonathan Sarna, profesor de historia judía en la Universidad Brandeis, dijo a The Epoch Times que el discurso de 2015 fue partidista, por lo que «uno espera que esta vez apele a ambos partidos y se esfuerce más por forjar un consenso en nombre del asediado Israel».
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