El 26 de noviembre, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, manifestó su apoyo inicial a un acuerdo de alto el fuego en Líbano con mediación estadounidense que podría poner fin a casi 14 meses de enfrentamientos con Hezbolá.
Los primeros detalles de la propuesta describen un alto el fuego inicial de dos meses, en el que Hezbolá retiraría a sus combatientes al norte del río Litani, en Líbano, mientras que las fuerzas israelíes se replegarían hacia el sur, a su lado de la frontera. No estaba claro cuándo entraría en vigor el alto el fuego, y los términos exactos del acuerdo aún no se han hecho públicos.
En un discurso televisado, Netanyahu dijo que presentaría la propuesta de alto el fuego a los ministros de su gabinete para que la votaran más tarde el martes.
Netanyahu dijo que la duración del alto el fuego depende de si la parte libanesa cumple su parte del acuerdo. También dijo que Israel conservará el derecho a atacar a Hezbolá si incumple la paz.
«Si Hezbolá viola el acuerdo e intenta armarse, atacaremos. Si intenta reconstruir infraestructuras terroristas cerca de la frontera, atacaremos. Si lanza un cohete, si excava un túnel, si introduce un camión cargado de cohetes, atacaremos», afirmó.
Algunos miembros de su gabinete ya han expresado su desacuerdo con las conversaciones de alto el fuego, entre ellos el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, que ha instado a Israel a continuar hasta que Hezbolá sea derrotada por completo.
«¡No es demasiado tarde para detener este acuerdo! Debemos continuar hasta la victoria absoluta!», escribió Ben Gvir en X el lunes.
El martes, Netanyahu señaló que Israel había reanudado las operaciones militares contra Hamás en la Franja de Gaza tras un alto el fuego de una semana en noviembre del año pasado. También dijo que la interrupción de los combates a lo largo de la frontera entre Israel y Líbano permite a las fuerzas israelíes descansar y reponer fuerzas, volver a centrarse en Irán y aislar a Hamás.
Hezbolá comenzó a atacar territorio israelí a lo largo de la frontera entre Israel y Líbano el 8 de octubre de 2023, apenas unas horas después de que Hamás lanzara los ataques del 7 de octubre a través del sur de Israel. Desde entonces, Hezbolá ha dicho que seguirá luchando hasta que Israel se desate contra Hamás en Gaza.
Netanyahu afirmó que las fuerzas israelíes podrán continuar su campaña en la Franja de Gaza, incluso con el plan de alto el fuego en Líbano.
«Completaremos la tarea de aniquilar a Hamás, traeremos a casa a todos nuestros rehenes, nos aseguraremos de que Gaza ya no suponga una amenaza para Israel y devolveremos a los residentes del norte a sus hogares sanos y salvos», afirmó.
Con información de The Associated Press
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