El gobernador de California, Gavin Newsom, continuó el 25 de octubre su campaña para crear un nuevo impuesto para las compañías petroleras, apuntando a Valero por aumentar sus ganancias mientras los consumidores del estado pagaban precios récord en los surtidores.
La compañía petrolera, con sede en Texas, publicó su informe de beneficios del tercer trimestre mostrando una ganancia neta de USD 2800 millones de julio a septiembre, muy por encima de los USD 463 millones del mismo período del año pasado.
En respuesta al informe, Newsom dijo que las compañías petroleras se estaban aprovechando de los consumidores para obtener beneficios.
«Las grandes petroleras están estafando a los californianos, subiendo los precios de la gasolina y obteniendo beneficios récord. Mientras Valero aumentaba sus beneficios en más de un 500 [por ciento] en solo un año, los californianos lo pagaban en el surtidor en lugar de repercutir esos ahorros», dijo Newsom en un comunicado. «Por eso estamos tomando medidas para aplicar una sanción por fraude en los precios para devolver esos beneficios a los bolsillos de los californianos».
Valero opera dos refinerías en California situadas en Benicia y Wilmington. Las plantas fueron una de las cuatro refinerías del estado que se vieron obligadas a cerrar parcialmente este verano para realizar tareas de mantenimiento, lo que contribuyó a una escasez de suministro en el estado que hizo que los precios de la gasolina se dispararan hasta alcanzar nuevos récords en septiembre.
La empresa no respondió a las peticiones de comentarios, pero dijo en su informe trimestral que la demanda mundial es superior a los niveles anteriores a la pandemia.
«Los fundamentos de la refinación siguen siendo fuertes, ya que la demanda de productos a través de nuestro sistema ha superado los niveles de 2019, mientras que la oferta mundial de productos sigue siendo limitada debido a las reducciones de capacidad y los altos precios del gas natural en Europa están estableciendo un piso más alto en los márgenes», dijo Joe Gorder, presidente y CEO de Valero. «Nosotros seguimos maximizando la utilización del refinado de forma segura, fiable y responsable con el medio ambiente para proporcionar productos esenciales».
Propuesta de impuesto extraordinario
Newsom convocó una sesión especial de la Legislatura de California para promulgar un impuesto sobre los beneficios inesperados de las compañías petroleras. La sesión está prevista para el 5 de diciembre.
Aunque los detalles de la propuesta fiscal de Newsom no están claros, se espera que el impuesto se dirija a las compañías petroleras que obtienen beneficios en el estado y que devuelva los ingresos fiscales a los residentes de California.
El grupo sin ánimo de lucro, Consumer Watchdog, apoyó la propuesta del gobernador, alegando que las cinco refinerías de petróleo del estado obtuvieron hasta 10 veces más beneficios de las operaciones de la Costa Oeste entre abril y junio que el año anterior.
«Los californianos han sido un cajero ATM para las refinerías de petróleo durante demasiado tiempo y ahora es el momento de que la legislatura haga retroceder estos escandalosos beneficios», escribió Jamie Court, presidente de Consumer Watchdog, en una declaración.
Sin embargo, un experto del sector dijo que el impuesto estatal adicional podría acabar costando más a los consumidores.
«Generalmente, lo que ocurre es que los impuestos se trasladan de una forma u otra», dijo a The Epoch Times el experto en la industria de los combustibles de Stillwater Associates, David Hackett, quien es miembro del Comité Asesor del Mercado del Petróleo de la Comisión de Energía de California. «En un entorno inflacionista como éste, el gobernador quiere añadir más impuestos, lo que no hará más que aumentar la inflación y dificultar las cosas para la gente normal».
Los precios récord de la gasolina en California este año tienen mucho que ver con la pandemia del COVID-19, dijo Hackett.
«Es otra resaca del COVID», dijo a continuación.
En marzo de 2020, las refinerías hicieron recortes. Muchas plantas despidieron empleados y una cerró definitivamente en Martínez, California. Los contratiempos aplazaron los proyectos de mantenimiento y perdieron dinero durante la pandemia. Luego, cuando las plantas empezaron a ser rentables, programaron el mantenimiento para los meses de primavera de este año. Pero fue entonces cuando comenzó la guerra de Ucrania, dijo Hackett.
En lugar de reanudar los planes de mantenimiento, las refinerías decidieron seguir funcionando. Para el otoño, las plantas estaban «bastante mal», dijo. Pero una inesperada y prolongada ola de calor azotó el estado y provocó que las refinerías, sensibles al calor, se vieran obligadas a reducir su actividad debido a las altas temperaturas.
Esta serie de acontecimientos provocó un aumento de los precios en los surtidores.
Precios de California siguen siendo altos
Los precios de la gasolina en California siguen siendo los más altos del país, en parte debido a los impuestos estatales sobre la gasolina y a los impuestos reguladores añadidos que suman alrededor de 1.28 dólares por galón. El 26 de octubre, el costo medio de un galón de gasolina normal en el estado era de 5.68 dólares, informó la Asociación Estadounidense del Automóvil.
Por cada galón, los consumidores californianos pagan unos 54 céntimos por el impuesto estatal sobre el consumo, 18 céntimos por el impuesto federal sobre el consumo, 23 céntimos por el programa estatal de límites y comercio, 18 céntimos por los programas estatales de combustible bajo en carbono, 2 céntimos por las tasas de almacenamiento subterráneo y el impuesto estatal y local sobre las ventas.
El Congreso responde
La diputada republicana de California, Kim Young, pidió a Newsom que suspenda los impuestos estatales sobre la gasolina en respuesta al aumento de los precios de la misma, pero no lo ha conseguido.
«Los californianos están pagando casi 6 dólares por un galón de gasolina en mi distrito, sobre 0.54 dólares más por galón por el impuesto a la gasolina de California. Llevo meses instando al gobernador Newsom a que suspenda el impuesto sobre la gasolina y me opongo a los esfuerzos del gobierno de Biden por convertir las políticas energéticas de California en la norma nacional», escribió Young en Twitter el 22 de octubre.
Otros miembros del Congreso, sin embargo, están a favor de un impuesto nacional sobre los beneficios extraordinarios y presentaron la legislación a principios de este año.
En marzo, el representante californiano Ro Khanna, un demócrata, presentó el proyecto de ley del Impuesto a las Grandes Ganancias del Petróleo en la Cámara, que impondría un impuesto especial sobre las ganancias del petróleo crudo a las empresas que extrajeron e importaron más de 300,000 barriles de petróleo crudo gravable en 2019, o que hicieron lo mismo en el calendario trimestral actual.
El proyecto de ley exige que el gobierno federal devuelva los impuestos recaudados a los contribuyentes. Un proyecto de ley que refleja esta legislación fue presentado al mismo tiempo en el Senado de Estados Unidos por el senador demócrata de Rhode Island, Sheldon Whitehouse.
A nivel internacional, el Reino Unido adoptó en verano un impuesto temporal sobre los beneficios inesperados de las empresas petroleras. El impuesto se aplicará a los beneficios de las empresas que extraen petróleo y gas en el Reino Unido, pero no a las que generan electricidad a partir de fuentes nucleares o eólicas. El Tesoro espera que recaude unos 5000 millones de libras esterlinas en su primer año.
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