LAKE BUTLER, Florida —El gobernador de la Florida Ron DeSantis dio una inusual actualización sobre la salud de su esposa el 7 de enero, diciendo: «No estamos fuera de peligro».
Por primera vez, se refirió a un pronóstico.
«No hemos terminado con eso. Nos estamos acercando al final. Pero (…) nuestra opinión es que 2022 será el año en el que podamos decir que está libre de cáncer», dijo, mientras la sala estallaba en aplausos.
El gobernador republicano anunció el diagnóstico de cáncer de mama de su esposa con un breve comunicado a principios de octubre.
Hasta el 7 de enero, se había negado a dar detalles, aparte de decir lo mucho que significa para la familia escuchar que la gente está rezando por ella, y que es una «luchadora» que «nunca se rendirá».
Durante las fiestas, DeSantis fue criticado por sus oponentes políticos en los medios de comunicación por no hacer apariciones públicas en los días en que, se reveló más tarde, había acompañado a la primera dama Casey DeSantis al tratamiento del cáncer.
El gobernador DeSantis hizo estas declaraciones durante una conferencia de prensa en la que anunció la concesión de más de 3.5 millones de dólares a la pequeña ciudad de Lake Buter, en el norte rural de Florida.
El dinero se utilizará para realizar «mejoras críticas en el sistema de recolección y bombeo de aguas residuales de la ciudad» para prepararla para manejar cantidades masivas de lluvia.
Las mejoras forman parte del plan estatal del Departamento de Oportunidades Económicas de Florida (DEO) para mejorar las infraestructuras relacionadas con el agua y las tormentas en previsión de futuros huracanes.
Poco después de que los líderes de la comunidad posaran con el gobernador y un gran cheque, DeSantis aceptó preguntas de los medios.
Una pregunta sobre el estado de salud de la primera dama motivó la actualización.
La Oficina del Gobernador y la Oficina de la Primera Dama han guardado silencio sobre su pronóstico desde octubre.
Unas tres semanas después del anuncio original, en una entrevista exclusiva con EpochTV, Casey DeSantis habló públicamente por primera vez durante una entrevista sobre la batalla que estaba enfrentando.
Dijo que había decidido compartir su historia con la esperanza de incitar a otras personas a solicitar una prueba de detección del cáncer, si intuían que algo podía ir mal.
El reto la inspiró a ayudar a los demás, dijo, durante una visita a los jóvenes pacientes que reciben tratamiento contra el cáncer en el Wolfson Children’s Hospital de Jacksonville.
La visita se programó poco después de su diagnóstico.
Al hablar con los periodistas el 7 de enero, el gobernador DeSantis expresó su frustración por tener que enfrentar dificultades personales en el foco público, especialmente cuando los oponentes políticos lo usaron en su contra.
La congresista Alexandria Ocasio-Cortez (D-N.Y.) tuiteó en la víspera de Año Nuevo mientras estaba de vacaciones en Florida con su novio: «¿No ha estado desaparecido de forma inexplicable el gobernador DeSantis durante como dos semanas? Si está por aquí, me encantaría saludarlo. Su equipo de redes sociales parece haber estado posteando fotos viejas durante semanas».
Al mismo tiempo, Ocasio-Cortez se enfrentó a una respuesta negativa generalizada por huir de su propio estado en el que se han aplicado cierres para disfrutar de las vacaciones en una Florida donde no se aplican estas medidas.
«Si tuviera un dólar por cada político que apoya los cierres que decidió escapar a Florida en los últimos dos años, sería un hombre muy rico», bromeó DeSantis en una conferencia de prensa el 3 de enero.
El alcalde del condado de Orange de Florida también señaló a DeSantis.
El demócrata Jerry Demings cuestionó la ausencia de DeSantis en una rueda de prensa sobre el coronavirus el 28 de diciembre. La esposa de Demings, la congresista demócrata Val Demings, busca actualmente desbancar al senador de Florida Marco Rubio (R) en las elecciones de noviembre.
La comisionada de Agricultura de Florida, Nikki Fried, es una de las 10 demócratas que desafían a DeSantis en su intento de mantener su cargo como gobernador del estado en noviembre.
El 30 de diciembre, Fried se sumó a las críticas a DeSantis, diciendo a la MSNBC que no sabía dónde estaba.
DeSantis hace apariciones públicas casi a diario, recorriendo el estado, y su oficina publica actualizaciones diarias detalladas que describen su agenda.
«Mucha de esta gente, algunos en los medios de comunicación, pero muchos de estos políticos, que, ya sabes, están tratando de conseguir algo de tracción, estaban diciendo, ‘Oh, ya sabes, él está de vacaciones'», dijo DeSantis el 7 de enero. «Resulta que, ya sabes, estábamos abajo en Tampa haciendo este tratamiento».
«Y no es fácil para ella atravesarlo», dijo, expresando el dolor de ver a su esposa sufrir. «Es algo duro. Tiene momentos en los que está realmente bien. Y luego, a veces, le afecta».
Incluso desde que comenzó el tratamiento, Casey DeSantis ha seguido haciendo apariciones para promover sus iniciativas como primera dama.
En noviembre, habló en una conferencia de prensa para promover un programa antidrogas que ella ha encabezado. El programa está diseñado para dar a los estudiantes de Florida una visión de cómo las decisiones de abuso de sustancias pueden conducir a problemas mortales.
También llevó a dos de sus tres hijos menores a un acto en la costa en noviembre para liberar corvinas oceladas jóvenes y adultas en las aguas de Florida, como parte de un esfuerzo estatal de repoblación pesquera.
En diciembre, la primera dama participó en una mesa redonda para promover su proyecto, Hope Florida–A Pathway to Prosperity.
La iniciativa reúne a grupos comunitarios y religiosos para ayudar a los floridanos con dificultades.
Hizo otra aparición en diciembre para anunciar una propuesta de financiación de 100 millones de dólares para la investigación del cáncer, que forma parte del presupuesto que su marido pide a los legisladores que aprueben para el año fiscal que comienza en julio.
La Legislatura de Florida considerará el presupuesto cuando los representantes vuelvan a reunirse en la capital del estado la próxima semana para su sesión ordinaria.
«Mucha gente se preocupa por ella, y mucha gente ha estado rezando por ella, y eso hace una gran diferencia para nosotros», dijo el gobernador DeSantis sobre su esposa de 41 años.
«Realmente lo apreciamos».
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