David Chipman, nominado por la Casa Blanca para dirigir la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), dijo que apoya la prohibición a los rifles AR-15, una de las armas más populares en Estados Unidos.
Chipman, quien trabajó para la ATF y luego para grupos de control de armas, recibió una serie de preguntas durante una audiencia en el Senado el miércoles.
«Señor Chipman, hace un minuto el senador Whitehouse le ha preguntado si alguno de sus puntos de vista sobre las armas está en desacuerdo con la mayoría del pueblo estadounidense», dijo el senador Ted Cruz (R-Texas). «El AR-15 es uno de los rifles, si no el más popular, de Estados Unidos».
Cruz luego preguntó si Chipman quiere prohibir el AR-15.
«Con respecto al rifle AR-15, apoyo una prohibición como se ha presentado en un proyecto de ley del Senado y como ha sido apoyada por el presidente», dijo.
Chipman dijo sobre el AR-15: «Es un arma que me entregaron en el equipo SWAT de la ATF», y agregó que «es un arma particularmente letal, y que debe ser regulada como otras armas particularmente letales».
Chipman dijo entonces que «haría cumplir las leyes» si fuera el director de la ATF, agencia que es supervisada por el Departamento de Justicia. «Ahora mismo, no existe tal prohibición a esas armas», añadió.
Aún no está claro qué propuesta concreta para prohibir las armas apoya Chipman. En marzo, 35 demócratas del Senado, encabezados por la senadora Dianne Feinstein (D-Calif.), presentaron una ley para prohibir las «armas de asalto», incluidos los rifles semiautomáticos del tipo AR-15.
El senador John Kennedy (R-La.) también le preguntó a Chipman si podía definir un «arma de asalto» y no pudo.
“Me quedan 35 segundos, defínemelo, por favor, señor. ¿Qué es un arma de asalto?», le preguntó Kennedy a Chipman.
«No hay forma de que pueda definir un arma de asalto», dijo Chipman. «Les daré una definición que la ATF usa actualmente», dijo Chipman antes de que Kennedy interviniera y cuestionara por qué debería liderar la ATF si le cuesta definir el término.
A lo largo de los años, el término «arma de asalto» se ha vuelto cada vez más polémico desde el punto de vista político y legal, ya que hay definiciones cambiantes de lo que realmente implica.
Durante la audiencia, el senador Tom Cotton (R-Ark.) señaló que los comentarios de Chipman ilustran que «realmente no existe un arma de asalto», alegando que es un término políticamente cargado que fue elaborado por «abogados y encuestadores en Washington».
El grupo comercial de la industria de las armas de fuego, la National Shooting Sports Foundation, estima que entre 1990 y 2018 se han importado o producido unos 20 millones de «rifles deportivos modernos», a los que algunos se refieren como «rifles de asalto» o «armas de asalto».
Mientras tanto, durante el último año, un número récord de estadounidenses ha estado comprando armas de fuego. Los datos del FBI muestran que la semana del 15 al 21 de marzo fue la semana en la que se han hecho más verificaciones de antecedentes del FBI, desde al menos 1998.
Los defensores del control de armas y muchos demócratas han dicho que es necesario que haya más restricciones a la venta de AR-15, a raíz de varios tiroteos masivos mortales. El miércoles, un hombre armado abrió fuego en una estación de ferrocarril del norte de California, matando al menos a ocho personas, según los agentes.
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