Dos investigadores noruegos analizaron el coeficiente intelectual (CI) de la población por varias décadas y descubrieron que en vez de aumentar como se había observado en la primera mitad del siglo pasado, desde 1970 está disminuyendo.
La investigación revela los resultados del CI de 730.000 pruebas hechas a jóvenes que ingresaron al Servicio Militar Obligatorio de Noruega entre 1970 y 2009, y también ofrece algunas explicaciones posibles.
El resultado fue impactante, en cada década el Coeficiente Intelectual promedio de los jóvenes bajó un promedio 7 puntos, señalaron los autores Bernt Bratsberg y Ole Rogeberg, al publicar su estudio en la revista Proceedings de la Academia Nacional de Ciencias en junio de 2018.
Al leer el documento algunos comentaron que el ser humano en vez de avanzar y volverse más inteligente, está retrocediendo y se está volviendo más tonto.
Bratsberg Rogeberg encontraron que las bajas del CI se ven incluso dentro de una misma familia, lo que hace pensar que el causante del declive es un efecto ambiental más un cambio de estilo de vida.
“El análisis controla todos los factores compartidos por los hermanos y no encuentra evidencia de hipótesis causales prominentes del declive que impliquen genes”.
Sobre los factores del marcado retroceso se menciona el hecho que a los niños se los induce a leer menos y se les da más libertad para jugar más, sobre todo los actuales vídeo juegos.
Como el declive comenzó cerca de la década de 1970, esto indica que el agua contaminada y la alimentación podrían estar jugando un factor importante.
Muchos estudios muestran que la exposición a altos niveles de Fluoruro en el agua puede disminuir el coeficiente de inteligencia, destaca Fluoriresearch. Este puede provenir incluso de los alimentos, productos dentales y pesticidas.
También se sabe por ejemplo que el nivel de CI es más bajo en los hijos cuando el consumo de pescado de sus madres fue menor en la lactancia, según un estudio publicado en 2103 en la Libreria Nacional de Medicina estadounidense (NCBI). En este caso se midió en niños de 8 años.
El aumento del IC entre 3 a 10 puntos puntos por década al inicio del siglo pasado fue llamado Efecto de Flynn por Richard Herrnstein y Charles Murray en su libro ‘The Bell Curve’, en referencia al investigador neozelandés James Flynn, quien investigó el tema, y lo asoció a una mejor nutrición y educación, ahora quedó en la historia con el nuevo estudio.
La razón de porqué el ser humano está retrocediendo en su inteligencia está inquietando a la opinión pública.
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