Mazda estrena nuevo modelo en el 2023. Es el CX-50, un crossover compacto que, según el fabricante nipón, responde a los reclamos de sus clientes que desean tener una vida más activa en los exteriores.
En realidad, Mazda solo se aprovecha de la incontenible fiebre que aqueja al consumidor estadounidense, que, como niño en la vidriera de la juguetería, se deslumbra con cada nueva pieza que sale a la venta.
Si el estilo de vida activo al que Mazda se refiere se limita a salidas fuera de la ciudad para acampadas en parques naturales, donde caminos de grava faciliten el acceso, el CX-50 puede ser una buena opción bajo esas condiciones. Si la intensión es adentrarse en la foresta por caminos accidentados con cerros y colinas pronunciados, quizá se necesiten otras consideraciones. Más allá de la tracción total estándar, el modo de manejo seleccionable con una opción todoterreno y revestimiento plástico para proteger la parte inferior de la carrocería, no hay mucho en este Mazda que lo haga más capaz que otros crossovers cuando se termina el pavimento.
Mazda ya tiene un modelo muy parecido, el CX-5, pero con el nuevo CX-50 intentan centrarse más en las habilidades utilitarias del SUV. Sin placas protectoras, altura extra, neumáticos todoterreno o diferenciales de bloqueo, las exploraciones fuera de la carretera tendrán que ser calculadas, pero en recompensa, el CX-50 entrega un desempeño estelar sobre el pavimento.
Desde afuera y por dentro
La casa de diseño de Mazda se precia de producir algunos de los autos más vistosos en la carretera, y el CX-50 no es excepción. Atractivo desde la mayoría de los ángulos, el nuevo crossover pierde en algo la gracia formal de la antigua línea de SUV de Mazda.
Adopta la tendencia de parrillas más grandes y profundas con faros delgados, que lo distancia levemente del fluido estilo de otros autos del fabricante, pero logran imprimirle una pizca de apariencia robusta.
El diseño interior es limpio y contemporáneo, con superficies suaves al tacto, molduras en negro brillante y detalles metálicos pulidos que le dan a nuestro CX-50 2.5 Turbo Premium Plus de prueba una apariencia elegante y lujosa. No creo que puedan encontrarse muchos autos en el mercado en este rango de precio con un interior de tan buen ajuste y acabado.
Mazda dispone los controles con un enfoque en el conductor, con una combinación de instrumentación analógica y digital en indicadores redondos familiares y de fácil referencia. Los asientos delanteros son cómodos y con buen soporte, mientras que la parte trasera es espaciosa, ideal para toda la familia. El área de carga es amplia, con 31.4 pies cúbicos, suficiente espacio para llevar bolsas y equipaje para un viaje largo, equipo para una acampada o visita a la ferretería.
En la filosofía de Mazda creen firmemente que el automóvil y un conductor deben tener una relación similar a la de un caballo y su jinete. A esto le llaman Jinba-ittai, y sentado al volante del nuevo CX-50, adviertes que la compañía mantiene viva su doctrina. Este es uno de los SUV donde mejor posicionado puedes sentirte para la conducción. Todo está colocado simétricamente, para que, sin esfuerzo, el conductor tenga acceso a todo lo que necesita.
Equipamiento y seguridad
El modelo base del 2023 CX-50 viene con una pantalla de información y entretenimiento más pequeña de 8.8 pulgadas, el resto de los modelos tienen una más grande de 10.3 pulgadas. Ambas ejecutan la última versión de la interfaz “Mazda Connect” y se controlan a través de controles convenientemente montados en la consola central, al estilo de algunos autos alemanes.
Curiosamente, este es el primer Mazda que incorpora una pantalla táctil. El fabricante ha argumentado que este tipo de pantallas provoca la distracción de los conductores, algo que puedo corroborar, pero en defensa de Mazda, al menos en el nuevo CX-50 la pantalla queda lo suficientemente alejada como para no ser una tentación de tocarla constantemente.
Todos los modelos del 2023 CX-50 vienen con Apple CarPlay y Android Auto, ambos con conectividad inalámbrica. Un estéreo de ocho bocinas es estándar, sin embargo, los modelos Premium y Premium Plus vienen con un estéreo Bose de 12 parlantes con radio satelital. Un cargador de teléfono inalámbrico está disponible, pero solo en el Turbo Premium Plus superior como el que probamos.
Mazda se toma en serio la protección del conductor y sus pasajeros, al incluir de forma estándar en todos los CX-50 las principales prestaciones de seguridad. Solo dejan para adicionar por un costo adicional algunas que no son esenciales, como los sensores de estacionamiento delanteros y traseros, el sistema de cámara de estacionamiento con vista envolvente, reconocimiento de señales de tráfico, asistente de atasco de tráfico, faros adaptativos y frenado automático de emergencia en reversa.
En la carretera
Hay dos opciones de motor para elegir en el nuevo CX-50. Los seis primeros acabados vienen con un motor de cuatro cilindros de 2.5 litros que produce 187 caballos de potencia. Las versiones Turbo, Turbo Premium y Turbo Premium Plus llegan con este mismo motor, pero dotado de un turbo compresor que aumenta su potencia a 256 caballos. Ambos motores están acoplados a una transmisión automática de seis velocidades, y la tracción total o AWD está presente en todos los modelos. Una versión híbrida con un motor proporcionado por Toyota arribará quizá entrado el próximo año.
No dudamos que el motor de entrada sea suficiente para mover ágilmente al CX-50 dentro de la ciudad, pero la opción turbo como la de nuestra prueba ofrece mucha más confianza en cualquier situación, gracias a su gran torque de rango medio, y muy buena potencia a la hora de adelantar a otros vehículos en la autopista.
Mazda equipa sus vehículos con G-Vectoring Control (GVC). Este sistema de transferencia de peso basado en los frenos ayuda a que sus vehículos se sientan más receptivos, mejor equilibrados y más naturales al frenar en una curva o al acelerar para salir de estas.
Además, Mazda ahora ofrece más que un modo de transmisión Sport en sus SUV. En el CX-50, podemos elegir entre Normal, Off-Road o Sport, y con el motor turbo cargado agregan Remolque, pues este SUV puede acarrear hasta 3,500 libras o 1,587 kilogramos.
Mazda recibe elogio por la excelente conducción de sus autos, y si bien el manejo del CX-5 es digno de referencia para los SUV pequeños, el CX-50 ha subido la apuesta. Comparte plataforma con el crossover sub compacto CX-30 y el sedán compacto Mazda 3, por lo que ofrece un manejo atlético similar al de esos dos ganadores.
Si bien como antes apuntamos este nuevo Mazda no puede considerarse como un “guerrero” para escalar rocas o hundirse en el fango, sus habilidades todoterreno no son menospreciables. Los ingenieros han logrado un comportamiento confiable y bastante capaz, valiéndose de un sistema de AWD muy mejorado.
Incita curiosidad por ver qué nos presentará Mazda el próximo año con el acabado Meridian Edition del CX-50, con capacidades todoterreno mejoradas.
El rendimiento del nuevo CX-50, aunque decoroso, sí queda por debajo de algunos de sus competidores. Con el motor menos potente logra 27 millas por galón en manejo combinado, unos 8.71 litros cada 100 km.
Para escoger
El Mazda CX-50 2023 viene en 10 niveles de equipamiento: S, S Select, S Preferred, S Preferred Plus, S Premium, S Premium Plus, Turbo, Turbo Premium, Turbo Premium Plus y una próxima Meridian Edition. Cada ajuste agrega algunas características más que el anterior, pero incluso el modelo base está bastante bien equipado.
Los precios pueden oscilar entre los $26,800 para el S base hasta $39,550 si se decide por el tope de gama CX-50 2.5 Turbo Premium y Premium Plus por $41,550.
El Toyota RAV4, Subaru Outback, Ford Bronco Sport o el propio Mazda CX-5 pueden considerarse competidores.
Concluyendo
Creo que el Mazda no va a encontrar muchos obstáculos para que su nuevo 2023 CX-50 obtenga buena aceptación. Justo sería notar que probablemente parte de su éxito se conquiste a costa de canibalizar las ventas del modelo más popular del fabricante, el CX-5.
Mazda no esconde su intención de lograr autos con mejor manejo y refinamiento que sus rivales, y el nuevo CX-50 es, para muestra, un botón.
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