El acuerdo de última hora de Disney Company para retener el control del distrito especial de Disney World tiene fallas legales por múltiples razones y probablemente será anulado, dijo una fuente cercana a la investigación del acuerdo.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ya inició una investigación estatal sobre el acuerdo de febrero, una realizada menos de tres semanas antes de que el estado tomara el control del distrito y lo pusiera a cargo de cinco fideicomisarios designados por el gobernador.
DeSantis firmó el 27 de febrero el proyecto de ley que pone fin a los poderes autónomos de Disney que han estado vigentes durante casi 60 años.
Antes de eso, la empresa anunció que su acuerdo con el antiguo distrito preservaría su control sobre el desarrollo de la entidad de 39 millas cuadradas durante 30 años y le otorgaría también otros derechos.
El proyecto de ley pareció atrapar desprevenido a DeSantis y a la nueva junta, el Distrito de Supervisión de Turismo de Florida Central.
La nueva junta contrató abogados para luchar contra el acuerdo. Y DeSantis, el 3 de abril, anunció que el inspector general de su oficina investigaría el trato.
Una fuente cercana a la investigación le dijo a The Epoch Times el 18 de abril que el acuerdo tiene fallas considerables, que se presentarían a la junta en su reunión del 19 de abril.
Hay varios problemas, dijo la fuente.
Uno es su incumplimiento a todos los requisitos del Gobierno de Florida en las Leyes Sunshine.
El acuerdo entre Disney y la antigua junta del Distrito de Mejoramiento de Reedy Creek es, según la ley estatal, considerado un acuerdo de desarrollo.
La fuente dijo que la ley requiere dos audiencias públicas, con aviso de cada uno publicado en un periódico de circulación general en el área.
Eso ocurrió, dijo la fuente.
Pero la ley también exige que se notifique a los propietarios vecinos, lo que no ocurrió, dijo la fuente.
Disney posee mucho pero no todo el distrito. Una parte es propiedad de empresas privadas, como hoteles y complejos turísticos.
“La ley de Florida es particularmente fuerte en este punto”, le dijo la fuente a The Epoch Times.
“Requiere un cumplimiento estricto de los requisitos de aviso público, particularmente para temas de desarrollo de tierras. Si lo pierde, el contrato es nulo y sin efecto”.
Un segundo problema es este: Un acuerdo de desarrollo es un contrato entre un gobierno local y un desarrollador.
Los contratos requieren una contraprestación, donde cada parte le da a la otra algo de valor, como una parte que da un terreno y la otra parte que da dinero, dijo la fuente.
Pero en el trato con Disney, lo que se da va en una sola dirección: Hacia Disney.
Disney recibió todos los derechos de desarrollo en el distrito. Eso significa que controla no solo el desarrollo de su propiedad, sino también la propiedad del distrito y la de los propietarios privados, como los hoteles.
Opciones para la Junta
La fuente dijo que el acuerdo obliga legalmente al distrito a invertir USD 300 millones en futuros proyectos de carreteras y a cobrar impuestos a los propietarios para recaudar el dinero.
La única “consideración” que recibe el distrito es el compromiso de Disney de vender la propiedad al distrito al valor justo de mercado. “Tienen que hacer eso de todos modos, por lo que es ilusorio y no es una consideración”, dijo la fuente.
Un tercer problema es que la antigua junta de distrito otorga poderes gubernamentales centrales a Disney, como la zonificación y el poder impositivo. Disney puede establecer sus propias alturas de construcción, dijo la fuente. Todo eso es ilegal bajo la doctrina de no delegación del estado.
Las Leyes Sunshine del estado prohíben que los miembros de la junta discutan asuntos entre ellos fuera de las reuniones, por lo que su reunión del 19 de abril será su primera discusión al respecto, dijo la fuente.
La junta puede avanzar en la dirección de anular el trato al ordenar a sus abogados que formulen una resolución adecuada o que emprendan acciones legales.
En una situación única en Florida, Disney ha disfrutado de un estatus casi gubernamental, actuando a través del Distrito de Mejoramiento de Reedy Creek como su propio condado. Disney World se extiende a ambos lados de la propiedad en los condados de Orange y Osceola.
Después de que Disney se pronunciara en contra del proyecto de ley de derechos de los padres en la educación de DeSantis el año pasado, que prohíbe la educación sexual en las escuelas públicas desde el jardín de infantes hasta el tercer grado, el gobernador despojó a la compañía del estatus especial que había disfrutado desde 1967, cuando la compañía planeó lo que se convirtió en Disney World.
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