La oposición venezolana hizo un llamado el domingo a los países de América Latina luego de unas protestas que resultaron en disturbios del fin de semana ocurridas en la ciudad chilena Iquique, al norte del país sudamericano.
La diputada Olivia Lozano de la Asamblea Nacional de Venezuela—liderada por el presidente encargado Juan Guaidó—dijo este domingo que la solución no se encuentra en expulsar a los migrantes, señalando que ellos han «tenido la necesidad de migrar» debido a la crisis social causada por el régimen de Nicolás Maduro. La declaración de Lozano surge luego de que una multitudinaria manifestación contra la inmigración ilegal en Iquique terminara en actos violentos hacia los migrantes venezolanos por algunos manifestantes.
«Los gobiernos latinoamericanos saben que la solución no está en expulsar a los migrantes. Ellos se han visto en la necesidad de migrar como consecuencia de una crisis humanitaria espantosa, sin referente en el continente, generada por el régimen criminal de Nicolas Maduro», dijo Lozano a través de Twitter, el 26 de septiembre.
Y pidió a los países de América Latina a seguir el ejemplo de países como Estados Unidos, Colombia, Ecuador y Brasil, que según Lozano han sido referentes en la inserción social de los venezolanos en sus países.
«Urge que los países receptores, sobre todo en Latinoamérica, repliquen las buenas prácticas migratorias de los EE.UU., Colombia, Ecuador y Brasil, que han favorecido la regularización y facilitado la inserción de los venezolanos en en el tejido social y económico de estos países», agregó.
Con banderas chilenas y carteles que rezaban “No más ilegales”, los aproximadamente 5000 asistentes (según fuentes policiales) manifestaron su rechazo el sábado a la ola migratoria que durante los últimos días ha tenido a la zona norte del país en plena crisis por el colapso de algunos espacios públicos y una política migratoria descontrolada.
La marcha, que se desplazó por el centro de la ciudad, terminó con la quema de tiendas de campaña que eran utilizadas por extranjeros para pernoctar en plazas y playas, acto que ha sido denunciado como un ataque xenófobo.
Por su parte, el Comisionado de la Secretaría General de la OEA para la crisis de migrantes y refugiados venezolanos, David Smolansky, recurrió a Twitter para decir: «Es inaceptable esta manifestación en contra de migrantes y refugiados que huyen de la emergencia humanitaria compleja más grande del hemisferio occidental. Los venezolanos huyen de su país, no lo hacen voluntariamente», el 25 de septiembre. «Sus derechos deben ser garantizados para estudiar y trabajar”, agregó.
Por otro lado, el diálogo de la delegación de la oposición y del régimen venezolano en México, concluyó el 27 de septiembre sin acuerdos relevantes. Sin embargo, en su comunicado conjunto declararon: «El rechazo a los actos de xenofobia y violencia contra las familias venezolanas, ocurridos recientemente en al República de Chile, que constituyen una gravísima violación a sus derechos».
El lunes, la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) había realizado las primeras diligencias debido a la quema de pertenencias de inmigrantes venezolanos acampados en la localidad norteña de Iquique.
Los agentes levantaron un registro de las personas afectadas, descartaron que hubiera heridos e hicieron una evaluación de los objetos quemados tras una marcha celebrada el sábado contra la migración ilegal.
“Se solicitó también como diligencia que recabaran los videos de seguridad de las cámaras municipales que pudieran haber captado este hecho”, indicó en declaraciones a periodistas la fiscal Jócelyn Pacheco.
Con información de EFE.
Siga a Alicia Márquez en Twitter: @AliceMqzM
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.