Agentes policiales de Denver recibieron órdenes de retirada antes del ataque a una manifestación realizada el domingo en favor de la policía, dijo el jefe del sindicato policial de la ciudad.
«Descubrí que el comandante del evento dio una orden de retirada», dijo el oficial Nick Rogers, presidente de la Asociación de Protección de la Policía de Denver.
«Y un teniente dio un paso al frente y dijo: ‘No nos iremos’. Y este teniente dijo: ‘Estas personas serán asesinadas si no nos quedamos’». Así que mantuvo a su grupo allí. Y esa es la única razón por la que esto no empeoró, porque alguien rompió el rango y decidió no retirarse. Y se quedaron para poder brindar ayuda”.
Rogers estaba hablando en la radio KNUS.
El Departamento de Policía de Denver no respondió a una solicitud de comentarios.
Michelle Malkin, una activista conservadora, y líder de la minoría de la Cámara de Colorado y Patrick Neville, un republicano, se encontraban entre los exponentes agendados en el mitin, que se realizó el domingo a las 3 p.m. en el Civic Center Park, en Denver.
Las imágenes de vídeo mostraron a un grupo de manifestantes de Black Lives Matter y personas vestidas con ropa similar a la que usaba el grupo de extrema izquierda, Antifa, acercándose al escenario poco después de que comenzara la concentración. Algunos empuñaban objetos contundentes, como un bastón plegable y una barra de metal.
Luego comenzaron a agredir a las personas en la manifestación, según las imágenes en vídeo de la escena y las cuentas de los involucrados.
«No se hizo nada, ya que las mujeres que llevaban el equipo de Trump y sostenían sus banderas fueron estranguladas por otras mujeres brutales, todas vestidas de negro y con equipo paramilitar», dijo Malkin.
Rogers, que no estuvo en el evento, dijo que declaró la situación porque después de enterarse de lo que sucedió, estaba avergonzado y triste.
«Michelle, cualquiera que esté escuchando quién estaba allí, ese no es el rango, no es la policía. Esa decisión fue tomada por otra persona, está mal, y lo siento», dijo.
Neville, el otro orador del evento, dijo en «Tucker Carlson Tonight» de Fox News que el grupo pro policial estaba «esencialmente rodeado por Antifa» y superados en número cuatro a uno.
«Estábamos completamente rodeados y luego, antes de darme cuenta… uno de mis amigos fue golpeado por cuatro o cinco miembros de Antifa».
«Y, finalmente, tuvimos que evacuar», agregó. “Todo esto ocurrió justo en el escenario de la instalación donde se suponía que íbamos a tener nuestro mitin. No era como si fuera una pelea menor en las afueras de una manifestación. Fue justo allí, en el escenario”, dijo Neville.
No está claro si el alcalde de Denver, Michael Hancock, o el gobernador de Colorado, Jared Polis, ambos demócratas, estuvieron involucrados en la orden de retirada, según Neville.
Las oficinas de Hancock y Polis no respondieron a las solicitudes de comentarios. Tampoco se ha abordado lo ocurrido el domingo. Hancock se unió esta semana a otros alcaldes para instar al presidente Donald Trump a que no envíe fuerzas federales a sus ciudades.
El abogado Randy Corporon, quien ayudó a organizar la manifestación, dijo que el jefe de policía de Denver, Paul Pazen, solicitó de antemano que el evento fuera reprogramado o que se trasladara a un lugar diferente, citando una contra protesta de Black Lives Matter.
«[Pazen] estaba agitado porque íbamos a hacer que sus oficiales salieran heridos», dijo Corporón al Denver Post. “Mi respuesta a él fue que debería permitir a sus oficiales hacer su trabajo y si la gente estaba ahí abajo rompiendo la ley, que los detenga. Porque no tendrán nada que temer de nosotros».
Corporon dijo que Pazen debería renunciar después de la violencia ocurrida mientras sus oficiales esperaban allí.
Lillian House, integrante del Partido para el Socialismo y la Liberación de Denver, quien ayudó a organizar la contra-manifestación, le dijo al Post que la mayoría de los manifestantes de su lado no eran violentos.
«La mayoría de la multitud simplemente estaba haciendo ruido y haciendo resistencia verbal a su celebración a favor de la policía», dijo. «Actuar como si las confrontaciones físicas que ocurrieron fueron iniciadas principalmente por nosotros es simplemente absurdo».
Malkin dijo que la gente debería estar comprometida política y cívicamente, pero agregó: «Si vas a hacerlo, no puedes confiar en la policía».
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