Siguen llegando malas noticias para el presidente Joe Biden y sus aliados demócratas en el Senado y la Cámara de Representantes mientras enfrentan lo que podría ser un desastre electoral en noviembre de 2022.
Los demócratas controlan actualmente el Congreso, apenas con una ventaja de 221 a 213 en la Cámara y un empate de 50 a 50 en el Senado, que solo lo puede romper la vicepresidente Kamala Harris.
La historia reciente muestra que el partido político en la Casa Blanca normalmente pierde escaños en las primeras elecciones parlamentarias de mitad de período. Los republicanos del presidente Donald Trump, por ejemplo, perdieron 40 escaños en la Cámara en 2018, mientras que los demócratas del presidente Barack Obama perdieron 63 en 2010.
La verdadera mala noticia no es simplemente la caída de los índices de aprobación pública de Biden (39 por ciento de aprovación en la última encuesta de YouGov/Economist) a raíz de la debacle de la retirada de Afganistán. La mala noticia para ellos es que su programa nacional característico, el programa de gastos «Una mejor reconstrucción» de 3,5 billones de dólares, está demostrando ser tóxico entre los votantes en distritos clave del Congreso, según una nueva encuesta.
El Grupo de Investigación Remington (RRG) realizó una encuesta, a finales de agosto, entre 800 probables votantes de siete distritos electorales de tendencia media en todo el país. La encuesta se ponderó para que coincidiera con el perfil demográfico previsto para cada distrito en 2022.
Cuando se les preguntó a los posibles votantes si creen que el plan de gastos de Biden es necesario o innecesario, el promedio en los siete distritos fue de solo el 35 por ciento que respondieron «necesario» y el 55 por ciento lo catalogaron como «innecesario».
Cuando se les preguntó si el plan de gastos de Biden mejoraría o empeoraría la inflación, el 47 por ciento dijo «peor», en comparación con el 36 por ciento que dijo «mejor». Y cuando se les preguntó por su evaluación general al plan de gastos de Biden, 36 por ciento lo aprobó, mientras que el 54 por ciento lo desaprobó.
Cuando se les preguntó si planeaban votar por un candidato republicano o demócrata al Congreso en su distrito el próximo año, el 50 por ciento dijo que votaría por los republicanos y el 44 por ciento dijo que por los demócratas.
Números como esos sugieren que los votantes ven poca diferencia entre Biden y los demócratas del Congreso y responsabilizan a ambos por lo que ven como un país que va en la dirección equivocada.
También hay pruebas que apuntan a una inusual intensidad de oposición entre los votantes, según Amy Walter, del Cook Political Report.
«Pero lo que debería ser más preocupante para Biden (y los demócratas en general), es que la intensidad de la oposición al presidente también está en aumento, mientras que la fuerte aprobación que tenía ha caído», escribió Walter.
«De hecho, por primera vez, las encuestas recientes muestran una fuerte desaprobación neta hacía Biden, en un nivel casi igual al de Trump en este punto de su mandato».
“¿Por qué importa esto? Las elecciones, especialmente las de mitad de período, están impulsadas por el entusiasmo. Y el partido que está fuera del poder casi siempre está mucho más motivado para votar que el partido que está en el poder”.
Los demócratas de centro están sintiendo la presión, como se vio en el anuncio del 9 de septiembre de la representante Stephanie Murphy (D-Fla.). En dicho anuncio la congresista dice que se opone a los líderes demócratas que están acelerando el plan de gastos, a través de la Cámara, fuera del proceso legislativo normal.
Todo esto ha emocionado a los estrategas de campaña republicanos, incluido el portavoz del Comité Nacional Republicano del Congreso, Mike Berg.
Citando a Cook, Berg dijo en un comunicado el 8 de septiembre que «11 de los 21 republicanos que perdieron por menos de seis puntos en 2020 ya han anunciado que se presentarán de nuevo. Por el contrario, sólo dos de los 21 demócratas que perdieron ante los republicanos por menos de seis puntos en 2020 han anunciado que se presentan de nuevo».
Pero las elecciones no se llevarán a cabo hoy y muchas cosas pueden cambiar entre lo que está ocurriendo actualmente y lo que puede ocurrir en noviembre de 2022, dijeron estrategas demócratas veteranos a The Epoch Times.
Jim Manley, exdirector de comunicaciones del exlíder de la mayoría del Senado, Harry Reid (D-Nev.), dijo: “El presidente Biden y los demócratas, en general, tuvieron una buena racha durante los últimos siete meses, pero no se puede negar que hemos entrado en una mala racha”.
“La buena noticia es que falta un año para las elecciones. Sin embargo, tenemos que poner algunos puntos en el marcador, por lo que no aprobar el proyecto de ley de infraestructura bipartidista y el proyecto de ley de reconciliación no es una opción, es un imperativo político”.
Si esas medidas se convierten en ley, «la economía estará bien», dijo Manley, y agregó que cree que los demócratas «continuarán lidiando con el COVID-19, por lo que deberíamos estar en buena forma» en 2022.
De manera similar, Christy Setzer, presidenta de New Heights Communications, con sede en Washington, y exportavoz de las campañas presidenciales, senatoriales y para gobernador demócratas, le dijo a The Epoch Times que cuando habló durante una conferencia, a principios de esta semana, les dijo a los profesionales demócratas: Aquí están en el equipo ganador».
Setzer dijo: «La gente está cansada de pensar en política después de cuatro años de Trump, y eso significa que, incluso si estás haciendo la mayoría de las cosas bien (vacunando al 75 por ciento de los adultos, para empezar), los votantes se han desconectado (y vaya, lo entiendo) o simplemente están amargados con todos los elegidos.
«Dicho esto, no hay que mirar más allá de la revocación de California para ver que una vez que hay una elección real: el demócrata sale adelante. Estamos a más de un año de las elecciones intermedias, y tenemos una gran historia que contar. No estoy preocupado».
Se puede contactar al corresponsal del Congreso Mark Tapscott en [email protected]. Síguelo en Twitter en @mtapscott y en Parler en @Mtapscott.
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