Tres comités del Senado liderados por los demócratas exigen respuestas sobre la gestión de la Administración Biden de la retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán después de que el domingo la capital del país, Kabul, fuera tomada sin oposición por el grupo terrorista de los talibanes.
Los líderes de las comisiones de Inteligencia, Relaciones Exteriores y Servicios Armados del Senado emitieron declaraciones esta semana mientras los funcionarios trabajan para evacuar a miles de ciudadanos estadounidenses y aliados afganos del país tras la toma del poder por los talibanes.
El presidente Joe Biden defendió el lunes en un discurso su decisión de retirar las tropas estadounidenses de Afganistán. Sin embargo, admitió que el gobierno afgano cayó más rápido de lo esperado y sugirió que les faltó espíritu de lucha.
En una declaración el martes, el senador Bob Menendez, presidente demócrata de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, expresó su frustración por los acontecimientos que se desarrollan en Afganistán, y se comprometió a celebrar una audiencia sobre la política de Estados Unidos hacia el país.
«Los acontecimientos de los últimos días han sido la culminación de una serie de errores cometidos por las administraciones republicanas y demócratas durante los últimos 20 años», dijo Menendez. «Ahora estamos siendo testigos del horrible resultado de muchos años de fracasos en materia de política e inteligencia».
El comité también investigaría las negociaciones entre la Administración Trump y los talibanes, así como la «ejecución fallida de la retirada de Estados Unidos» por parte de Biden, dijo Menendez. El senador no anunció la fecha de la audiencia.
«Ver que este ejército se disuelve tan rápidamente después de miles de millones de dólares de apoyo estadounidense es asombroso», añadió Menendez.
«Está claro que al pueblo estadounidense y afgano no se les ha dicho la verdad sobre la capacidad de las ANDSF y merecen respuestas», dijo, en referencia a las Fuerzas Nacionales de Defensa y Seguridad afganas.
El expresidente Donald Trump firmó un acuerdo con los talibanes en febrero de 2020 para retirar las tropas estadounidenses antes del 1 de mayo, a cambio de que los talibanes no atacaran a las tropas estadounidenses y de que cortaran sus vínculos con Al Qaeda. Sin embargo, en abril, Biden anunció planes revisados para retirar todas las fuerzas estadounidenses del país para el 11 de septiembre.
El senador Mark Warner (D-Va.), presidente de la Comisión de Inteligencia, dijo que él y otros paneles del Senado trabajarían juntos para «hacer preguntas duras pero necesarias sobre por qué no estábamos mejor preparados para el peor de los casos, que implica una caída rápida y total del gobierno afgano y de las fuerzas de seguridad».
El presidente del Comité de Servicios Armados del Senado, Jack Reed (D-R.I.), también dijo que se investigaría «qué salió mal en Afganistán».
El senador Ted Cruz (R-Texas), miembro del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, criticó previamente al presidente en un comunicado el viernes por destruir los esfuerzos de la anterior Administración Trump para negociar una retirada programada con «amplio apoyo de los actores regionales».
«En Afganistán, el presidente Biden dijo que ponía su ‘confianza’ en ‘la capacidad de los militares afganos, y el resultado ha sido, de nuevo, un espectáculo embarazoso, una humillación diplomática y una catástrofe de seguridad nacional», añadió Cruz.
El presidente autorizó el sábado unos 6000 soldados de combate adicionales para ayudar en las tareas de evacuación y prometió una respuesta «rápida y efectiva» si los talibanes atacan a las tropas estadounidenses o interrumpen sus operaciones de evacuación.
«Defenderemos a nuestra gente con una fuerza devastadora si es necesario», dijo.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con la Administración de Biden para solicitarle comentarios.
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