Agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos detuvieron a unas 180 personas en nueve intentos distintos de contrabando humano registrados durante el fin de semana en el sur de Texas, informó este lunes la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
La agencia indicó en un comunicado que un incidente ocurrió el 12 de noviembre cuando agentes fronterizos del Sector Laredo descubrieron que decenas de personas se escondían en el compartimento de carga de un tractocamión durante una revisión en un puesto de control en la Carretera 83.
Los agentes retiraron a cerca de 40 ilegales de México, El Salvador, Honduras y Guatemala.
Más tarde esa noche, agentes revisaron una camioneta en un puesto de control en la Interestatal 35 y descubrieron a 10 ilegales, todos de México.
Un par de horas más tarde, una inspección migratoria en la Carretera 59 reveló que más de 50 ilegales de México, Guatemala y Honduras estaban en el compartimento de carga de un tractocamión.
La CBP indicó que en los tres incidentes “los conductores y las personas detenidas fueron puestos bajo custodia para ser procesados conforme al reglamento”.
En otro comunicado, la CBP indicó que agentes del Sector del Valle del Río Grande frustraron seis tentativas de contrabando humano durante el fin de semana, con resultado de 78 arrestos.
Refirió que el 12 de noviembre un agente fronterizo de la Estación Kingsville hizo señales para que una camioneta se detuviera. El conductor no obedeció, lo que llevó a una persecución.
La camioneta se salió del camino y acabó deteniéndose, y numerosas personas salieron huyendo. Una búsqueda en el área circundante resultó en la detención de dos inmigrantes de Honduras y México. El conductor no fue localizado.
Esa noche, agentes fronterizos y miembros de la Oficina del Alguacil del Condado de Starr detuvieron a 11 inmigrantes de México y Centroamérica en una “casa de seguridad” en la ciudad de Roma.
El 13 de noviembre, agentes fronterizos respondieron a una solicitud de asistencia del Departamento de Policía de McAllen en una presunta casa de seguridad. Allí, los agentes arrestaron a 53 inmigrantes de Centroamérica y México.
Dos mujeres inmigrantes fueron llevadas a un hospital para evaluación y posteriormente trasladadas a una instalación de la Patrulla Fronteriza para su procesamiento.
Más tarde esa noche, un agente hizo señales a un vehículo para que se detuviera cerca de la localidad de Linn. El vehículo se detuvo y varias personas huyeron para ocultarse en la maleza cercana. En seguida, el vehículo aceleró, lo que derivó en una persecución.
Una búsqueda en el área resultó en una aprehensión, y el conductor del vehículo fue arrestado poco después.
De igual forma, un agente fronterizo hizo señales a una camioneta para que se detuviera cerca de San Manuel. El conductor no obedeció y se inició una persecución. El vehículo finalmente se detuvo y varias personas huyeron hacia la maleza. Una búsqueda en el área resultó en la aprehensión de seis inmigrantes de Honduras y Guatemala. El conductor no fue localizado.
Y el 15 de noviembre agentes fronterizos arrestaron a cuatro inmigrantes después de una persecución en carretera cerca de San Manuel. El conductor del vehículo que transportaba a los inmigrantes no fue hallado.
“Todos los sujetos fueron procesados conforme a las normas”, acotó la CBP.
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