La población china está envejeciendo y el número de nacimientos se ha desplomado. El Banco Central del Partido Comunista Chino (PCCh) ha publicado un documento en el que pide la plena liberalización y el fomento de la natalidad.
Algunos expertos afirman que, por razones económicas y de preparación para la guerra en general, Xi Jinping podría volver a la ruta de Mao Zedong y levantar por completo las restricciones a la natalidad.
El 14 de abril, el Banco Central del PCCh publicó en su cuenta oficial de WeChat un documento de trabajo titulado «Comprensión y contramedidas de la transición demográfica». El documento señalaba que, en comparación con los países desarrollados, China se enfrenta a un envejecimiento de la población más rápido y a un descenso de la natalidad más grave.
Graves problemas demográficos
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), si el 7% de la población de una sociedad tiene 65 años o más, se denomina sociedad en envejecimiento. Cuando la proporción alcanza el 14 por ciento, se denomina sociedad envejecida. Una proporción del 20 por ciento se denomina «sociedad superenvejecida».
Según el documento del Banco Central, el envejecimiento de la población china ocupa el primer lugar del mundo y envejece más rápido que los países desarrollados europeos y de las Americas.
Según las cifras facilitadas por el documento, la población china de 65 años o más alcanzó los 88.27 millones en el año 2000, lo que supone el 7% de la población total, convirtiendo a la sociedad en una sociedad en proceso de envejecimiento. En 2019, el número de personas de 65 años o más ascendió a 176 millones, lo que representa el 12.6% del total. Se estima que en 2022, la proporción superará el 14 por ciento, convirtiéndola en una sociedad envejecida.
La comparación muestra que a China solo le tomará 22 años para pasar de una sociedad en envejecimiento a una sociedad envejecida, mucho más rápido que Francia (140 años) y Suecia (85 años), que fueron los primeros en entrar en las sociedades envejecidas. También fue más rápido que Estados Unidos (72 años).
La situación del descenso de la natalidad es aún más grave en China. De 1950 a 2019, China pasó rápidamente de ser un país de alta fecundidad a uno de baja fecundidad. La tasa de fecundidad combinada se redujo de 6.71 a 1.70, un descenso de 5.01. En el mismo período, Estados Unidos, Japón, Gran Bretaña y Francia solo disminuyeron en 1.28, 2.08, 0.33 y 1.00 respectivamente.
Tras la publicación del documento, Ren Zeping, economista jefe de Soochow Securities, y otros publicaron el 16 de abril un informe sobre la fertilidad de China titulado «El envejecimiento de la población y el descenso de la natalidad se aceleran, la liberalización total es urgente».
Tanto el documento del Banco Central como el informe de Ren Zeping reconocen que la prolongada planificación familiar del PCCh ha acelerado el descenso de las tasas de fertilidad, lo que ha provocado un gran descenso de los nacimientos, un gran descenso de la fertilidad, una disminución del número de mujeres en edad fértil, así como la llegada acelerada a una población envejecida con una tasa de natalidad decreciente.
El PCCh puso en marcha una política de control de la población en 1971, animando a las parejas a tener menos hijos, y ha aplicado estrictamente la política del hijo único desde finales de la década de 1970. Las cifras oficiales del Ministerio de Sanidad (ahora Comisión Nacional de Salud) muestran que desde 1971 hasta marzo de 2013 se realizaron en China 336 millones de abortos y 196 millones de esterilizaciones; desde la década de 1990 se realizan 7 millones de abortos y casi 2 millones de esterilizaciones al año.
Zhai Zhenwu, decano de la Escuela de Sociología y Estudios de Población de la Universidad Renmin de China, proyectó en 2015 que la planificación familiar había reducido la población china en 400 millones de personas.
Los nacimientos caen tras la política de los dos hijos
Según el informe de Ren Zeping, la aplicación de la política integral de dos hijos del PCCh en 2016 no solo no ha producido un aumento de los nacimientos, sino que ha provocado un descenso de la natalidad. Aunque el número de nacimientos aumentó inicialmente hasta los 17.86 millones en 2016, desde entonces ha caído bruscamente en años sucesivos, hasta los 17.25 millones en 2017, 15.23 millones en 2018 y 14.65 millones en 2019.
El número de nacimientos en 2020 aún no se ha dado a conocer, pero los datos del Ministerio de Seguridad Pública muestran que solo se registraron 1,035,000 recién nacidos en 2020, lo que supone un descenso de cerca del 15% respecto a 2019. El número de recién nacidos registrados por el Ministerio de Seguridad Pública en 2019 representó el 80.5 por ciento de los nacimientos del año del Buró de Estadísticas, lo que significa que el número de nacimientos en 2020 puede caer en más de 2 millones en comparación con 2019.
Dong Yuzheng, experto en población y director del Instituto de Desarrollo Poblacional de Guangdong, dijo en una entrevista con China Business News el 18 de abril que, según la tendencia actual, los nacimientos anuales durante el período del XIV Plan Quinquenal pueden caer por debajo de la marca de 10 millones. De este modo, dentro de unos años, la población total de China podría experimentar un crecimiento negativo.
El retraso de China en la publicación de los resultados del séptimo censo de población del año pasado ha suscitado dudas. El PCCh tenía previsto publicar los resultados del censo a principios de abril, pero el Buró Nacional de Estadística dijo el 16 de abril que el retraso se debía a la necesidad de «publicar información cada vez más detallada», pero no se dio ninguna fecha concreta. Un usuario de Twitter dijo sarcásticamente: «¡Los datos son realmente feos, y se necesita mucho tiempo para cambiarlos!».
Para aumentar el número de nacimientos, algunos diputados de la Asamblea Popular Nacional propusieron aplicar una liberalización total de la política de los tres hijos en 2018. Ren Zeping publicó recientemente en Weibo que no solo se abrirá la política de tres hijos en el futuro, sino que podría llegar una política de recompensa a las familias con cuatro o cinco hijos. Espera que la política de fertilidad se ajuste durante el 14º Plan Quinquenal, y sería mejor levantar totalmente las restricciones a la natalidad, y si no, liberalizar primero la política de tres hijos.
Analistas: Levantar las restricciones para preparar la guerra
Según Li Yanming, comentarista de temas de actualidad con sede en Estados Unidos y experto en China, el dividendo demográfico de China está desapareciendo, y la última postura oficial del PCCh indica que es inminente una crisis demográfica, con importantes implicaciones para la competitividad social, económica e internacional.
Por otra parte, la ambición del PCCh por la expansión global y la hegemonía militar es cada vez más evidente, y está volviendo a la línea de Mao Zedong en el ámbito interno. Por lo tanto, es probable que el PCCh siga la práctica de Mao en los primeros años de su régimen e implemente una política de fomentar e incluso forzar los nacimientos para la preparación de la guerra a gran escala y la dominación global.
Antes de que el PCCh tomara el poder, el exsecretario de Estado estadounidense Acheson dijo que la población de China se había duplicado en los siglos XVIII y XIX, y que ningún gobierno chino había sido capaz de resolver el problema alimentario. En septiembre de 1949, Mao Zedong, el primer líder del PCCh, argumentó en su artículo «La quiebra del materialismo histórico» que «la gran población de China es algo muy bueno. Hay un camino [para nosotros] incluso el número se multiplica un par de veces, y el camino es la producción».
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