La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), se reunió recientemente con defensores de los uigures para hablar sobre los abusos a los derechos humanos del Partido Comunista Chino (PCCh) en la región de Xinjiang.
Pelosi asistió a una reunión virtual el 1 de marzo con “Campaign for Uyghur” (CFU), un grupo de defensa con sede en Washington, para recibir información sobre las medidas recientes destinadas a detener la represión del PCCh, según el comunicado de prensa del grupo.
«Si no hablamos claramente por los derechos humanos en China debido a intereses comerciales, perdemos toda autoridad moral para hablar por los derechos humanos en cualquier lugar del mundo», escribió en un tuit después de la reunión.
El Dr. Rishat Abbas, asesor principal de CFU, dijo a Pelosi en la reunión que «los uigures se enfrentan a atrocidades sin precedentes, tan horribles que Estados Unidos y el Parlamento canadiense declararon como genocidio las acciones de China contra los uigures», según el comunicado de prensa.
El PCCh ha detenido a más de un millón de uigures y otras minorías musulmanas en una red de campos de concentración en la región occidental de Xinjiang. Dentro de los campos, los detenidos son sometidos a torturas, violaciones, trabajos forzados, y adoctrinamiento político.
Este año, los parlamentos de Estados Unidos, Canadá y Holanda han declarado un genocidio las acciones del PCCh contra los uigures. El año pasado, 39 países expresaron gran preocupación por los abusos del régimen en Xinjiang.
El PCCh ha negado haber cometido atrocidades en la región, alegando que su campaña tiene como objetivo combatir el «extremismo».
El año pasado, la administración Trump sancionó a varios funcionarios y entidades del PCCh por su papel en la supervisión de la persecución en Xinjiang y puso en la lista negra a una serie de empresas chinas que ayudan a la vigilancia masiva del PCCh de la población étnica musulmana de la región. También prohibió todas las importaciones de productos de algodón y tomate de Xinjiang, citando el uso del PCCh para trabajos forzados.
En junio pasado, el entonces presidente Donald Trump también promulgó la Ley de Política de Derechos Humanos de los Uigures, que autoriza la sanción de los funcionarios chinos responsables de la campaña de represión en Xinjiang.
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