La constante tensión por la crisis migratoria en la frontera entre Perú y Chile escaló este jueves a las cancillerías de ambos países, luego que convocaron a los embajadores del otro país en las respectivas naciones para expresar su descontento por la situación.
Varios inmigrantes extranjeros, en su mayoría venezolanos, siguen varados en la frontera entre Perú y Chile desde hace semanas. Esta crisis incluso ha suscitado enfrentamientos contra la fuerza policial de Perú en los últimos días.
“El Ministerio de Relaciones Exteriores convocó al Embajador de Chile en el Perú [Óscar Fuentes] para expresarle su protesta por la falta de colaboración mostrada por las autoridades policiales chilenas, la cual ha generado los acontecimientos producidos hoy”, dijo la cancillería peruana, en un comunicado el 27 de abril, refiriéndose a los bloqueos realizados esta semana por inmigrantes extranjeros en la carretera Panamericana Sur.
Los migrantes pretendían entrar por la fuerza a Perú. Algunos de ellos declararon a los medios locales que su intención era usar la vía para poder regresar a su país de origen.
La cancillería de Perú dijo que viene sosteniendo reuniones de trabajo con la Cancillería chilena desde el 21 de abril para abordar “en el corto y mediano plazo la crítica situación migratoria y humanitaria en la zona de frontera”.
La cancillería también dijo que se ha urgido a que las autoridades chilenas garanticen la seguridad dentro del territorio chileno del área fronteriza de Santa Rosa–Chacalluta, e impidan el bloqueo de la carretera internacional.
Pascual Güisa, alcalde peruano de Tacna–estado fronterizo con la ciudad chilena de Arica–criticó al presidente Gabriel Boric por la situación.
“No debemos permitir que un innombrable, y discúlpenme pueblo chileno, e irresponsable como su presidente esté trasladando los problemas [migratorios] a la frontera”, dijo este jueves en una entrevista con CNN Chile.
En respuesta, la ministra del Interior de Chile, Carolina Tohá, informó que la cancillería chilena citó al embajador peruano, Fernando Rojas, para entregarle una nota de protesta por las declaraciones de Güisa.
Además del alcalde de Tacna, el primer ministro peruano Alberto Otárola también urgió este jueves al presidente chileno a que “solucione sus problemas y que no los tire hacia otro país”.
Asimismo, la presidente peruana Dina Boluarte anunció el estado de emergencia en las fronteras con Ecuador, Colombia, Brasil y Chile para controlar el ingreso de inmigrantes ilegales, que en su opinión son los responsables de la criminalidad en el país.
La medida permitirá la ejecución de operaciones policiales relacionadas al control de las fronteras.
A mediados de marzo, el gobierno de Boric prorrogó el estado de excepción en la zona del norte del país con el fin de contener el flujo migratorio sin precedentes. La medida permaneció en vigor hasta el 15 de abril, pero dejó el despliegue militar en la frontera con Perú.
Con información de EFE.
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