NASHVILLE Tennessee— Un avión de Alaska Airlines que despegaba de Nashville el jueves, frenó rápidamente en la pista para evitar una posible colisión con un avión de Southwest Airlines, y las agencias federales investigan el incidente.
La Administración Federal de Aviación (FAA) dijo que los pilotos de Alaska abortaron su despegue porque el avión de Southwest tenía permiso para cruzar el final de la misma pista.
Un portavoz de Alaska Airlines dijo que los pilotos reconocieron «un posible conflicto de tráfico en la pista» e «inmediatamente aplicaron los frenos para evitar que el incidente pasara a mayores».
No se reportaron lesiones, pero las llantas del Boeing 737 Max se desinflaron debido al calor extremo acumulado durante la detención, según la aerolínea con sede en Seattle.
La FAA y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) dijeron que investigan el incidente, que ocurrió alrededor de las 9:15 a.m. en el Aeropuerto Internacional de Nashville.
Southwest dijo que está en contacto con la FAA y la NTSB y participará en la investigación.
Alaska Airlines dijo que el vuelo a Seattle transportaba a 176 pasajeros y seis miembros de la tripulación. El avión es inspeccionado por el momento y otro avión fue enviado para llevar a los pasajeros a Seattle para la noche del jueves, según la aerolínea.
«Estamos agradecidos por la pericia de nuestros pilotos, quienes frenaron de inmediato para evitar que el incidente se agravara», dijo la aerolínea.
Una serie de incidentes de riesgo, o «incursiones en la pista», en los últimos dos años suscitaron preocupación por la seguridad de los viajes aéreos en Estados Unidos. La presidenta de la NTSB, Jennifer Homendy, dijo en noviembre pasado que los incidentes, aunque «increíblemente raros» en comparación con la cantidad de vuelos, muestran que el sistema de aviación está bajo presión.
Alguno de los incidentes se atribuyeron a pilotos que no siguieron las instrucciones de los controladores de tráfico aéreo. Sin embargo, el más aterrador de los incidentes de riesgo —un avión de FedEx que aterrizó en Austin, Texas, voló por encima de un avión de Southwest que despegaba en una mañana brumosa en febrero de 2023— asignó la responsabilidad a los errores de un controlador de tráfico aéreo.
El incidente del jueves se produjo apenas unos días después de que dos aviones de Delta Air Lines chocaran en una calle de rodaje en el aeropuerto de Atlanta, y el avión más grande derribó la cola de un avión regional más pequeño. No se reportaron heridos.
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