Los métodos, las ideologías y la financiación de un plan de educación han quedado en entredicho después de que un juez del Tribunal Superior de Carolina del Norte haya ordenado a los ejecutivos financieros del estado que financien un plan que, según un periodista de investigación, es más de la misma programación de adoctrinamiento disfrazada.
Los legisladores dicen que la orden del juez David Lee de transferir 189.8 millones de dólares al Departamento de Salud y Servicios Humanos (DHHS), 1500 millones de dólares al Departamento de Instrucción Pública y 41.3 millones de dólares al Sistema de la Universidad de Carolina del Norte para la implementación y gestión del plan, es una violación de la separación de poderes.
Según un portavoz de los republicanos del Senado, la Constitución del Estado de Carolina del Norte permite que solo las legislaturas decidan qué políticas se promulgan como ley y cuánto dinero se gasta en esas políticas.
El plan en cuestión proviene de una empresa educativa de San Francisco llamada WestEd, una firma que fue contratada en 2018 a través de un grupo de trabajo establecido por el gobernador Roy Cooper, un demócrata.
El medio local WRAL destacó los departamentos y fundaciones estatales que financiaron a WestEd por un monto total de 1.52 millones de dólares, como el DHHS que puso más de 600,000 dólares en el informe, así como The Goodnight Educational Foundation, que también dona a legisladores estatales republicanos y demócratas, que puso 250,000 dólares en el informe.
La orden de Lee tiene su origen en una demanda de 1997, Leandro contra el Estado de Carolina del Norte, que conlleva una sentencia del Tribunal Supremo estatal que decidió que los niños tienen derecho a una «educación sólida y básica».
Lee supervisó la determinación de contratar a WestEd, ya que el gobierno de Cooper se ha convertido en un participante en el caso a través del grupo de trabajo.
El portavoz dijo que los demandantes y los demandados son aliados que trabajan juntos para conseguir que el juez ordene el plan como ley.
«De hecho, el plan con WestEd fue financiado en gran parte por la administración de Cooper, por lo que tiene al demandado, la administración de Cooper, pagando por un plan presupuestario del que se supone que deben defenderse», dijo el portavoz.
Education First Alliance
Sloan Rachmuth, reportero de investigación y presidente de Education First Alliance, una organización de padres y maestros que investiga las políticas y los planes de estudio en el sistema escolar K-12 de Carolina del Norte, dijo que la teoría crítica de la raza (TCR) y el aprendizaje socio-emocional (SEL) están en el centro del plan de WestEd.
Aunque la TCR es una filosofía marxista que afirma que la sociedad es una lucha de clases entre opresores y oprimidos, etiquetando específicamente a los blancos como opresores y a todas las demás razas como oprimidas, la frase ha llegado a abarcar para muchos profesores y padres una tendencia más amplia que incorpora no solo cuestiones de raza sino también temas de sexualidad.
Según la cartilla de WestEd, el concepto detrás de SEL se basa en una «noción integral del desarrollo humano que tiene lugar en y a través de cuatro dominios: psicológico, cognitivo, social y emocional».
«La tesis que subyace a SEL en la izquierda es que los niños necesitan ayuda en materia de salud mental», dijo Rachmuth. «No discutimos eso. Lo que decimos es que el examen universal de problemas de salud mental es inapropiado e inconstitucional. Es examinar el contenido de la mente».
Rachmuth comparó el método con los «Cuatro Viejos» del dictador comunista chino Mao Zedong, un título que hacía referencia a las ideas, culturas, hábitos y costumbres tradicionales de un ciudadano que, según Mao, debían ser erradicadas para que el partido prosperara.
«El SEL no solo examina el contenido de la mente, sino que utiliza psiquiatras que emplean un tratamiento basado en la teoría crítica de la raza», dijo Rachmuth. «Es una reminiscencia de la URSS y del abuso de la psiquiatría que se produjo allí».
Durante su época, la URSS contaba con psiquiatras estatales que diagnosticaban a los disidentes políticos con múltiples trastornos como «esquizofrenia lenta» y paranoia como condición causante de la disidencia.
«Hay que ser capaz de examinar un punto de partida de dónde están las actitudes y creencias, y luego se necesitan ensayos repetidos para asegurarse de que la intervención está funcionando», dijo Rachmuth. «La mejor manera de contrarrestar la desinformación o un viejo hábito es a través de la narrativa, no de los hechos. Por eso se está viendo la abolición de los hechos y la inserción de SEL en todas las disciplinas académicas, porque permite el uso de la narrativa para desprogramar».
El Departamento de Instrucción Pública (DPI) de Carolina del Norte anunció en junio de 2020 que se asociaría con la Colaboración para el Aprendizaje Académico, Social y Emocional (CASEL) para llevar los estándares SEL a las aulas de K-12.
CASEL, una empresa educativa con sede en Chicago, está financiada en gran parte por el grupo filantrópico Chan Zuckerberg Initiative del CEO de Meta, Mark Zuckerberg.
A pesar de que el programa SEL se promociona como un programa para ayudar a los niños a manejar las emociones, sentir y mostrar empatía, y establecer relaciones positivas, el programa utiliza encuestas «para sacar cantidades copiosas de información privada de los niños en edad escolar», dijo Rachmuth, y añadió que el término «equidad» en sí mismo, que se encuentra a menudo en los documentos del programa, es simplemente un nuevo nombre para la teoría crítica de la raza.
Según WestEd.org, las competencias básicas de SEL de CASEL reflejan cuestiones de equidad.
«El contenido de la mente»
Los métodos intrínsecos a la programación SEL son las encuestas, dijo Rachmuth, cuyos objetivos son la ruptura de la identidad mediante la intervención psiquiátrica, la extracción de información y el impulso de una sociedad sin género con el fin de desmantelar el patriarcado, que a menudo se percibe como el núcleo protector del capitalismo que una infiltración encubierta trataría de abolir.
Rachmuth y su equipo han recopilado múltiples encuestas de diferentes distritos escolares de Carolina del Norte en las que se pregunta a los alumnos de K-12 sobre comportamientos incriminatorios y pensamientos privados.
En una clase de jardín de infancia de un condado, mostró un diagrama llamado “The Genderbread Person” que muestra un hombre de jengibre tradicional que se utiliza para enseñar a los niños de jardín de infancia sobre la atracción sexual entre géneros del mismo sexo.
En una encuesta de SEL de 7º grado en una clase de inglés, aparece la pregunta: «Las preguntas que tengo sobre mi cara, mi cabello, mi pecho y mi cuerpo son», dejando líneas abiertas para responder.
«El aprendizaje socio-emocional hace que sea legal que un hombre haga preguntas a los niños de este tipo en una clase abierta a la discusión», dijo Rachmuth. «Tenemos una crisis de alfabetización. Tenemos que enseñar a leer y escribir».
Otra pregunta de la encuesta que mostró Rachmuth es: «¿Qué pasa si no me gustan mis piernas, mis pechos o mis labios?».
Mostró una encuesta para niños en edad escolar en la que se preguntaba si habían «comprado o vendido drogas alguna vez en la escuela».
«Aquí se pide a los niños que se impliquen en un delito grave sin que esté presente un abogado», dijo.
De otro distrito, obtuvo una encuesta en la que se preguntaba a los alumnos de 6º a 12º grado sobre su identidad de género, si se identificaban como transgénero y cuál era su orientación sexual.
Una de las encuestas preguntaba si los estudiantes apoyaban a la comunidad LGBT.
«Esto es bastante peligroso porque si un joven de 15 años no contesta de la manera correcta, será cancelado», dijo Rachmuth. «Si quieres hablar de llevar a un niño al suicidio, intenta hacerlo decir que es gay antes de que esté preparado. Lo mismo se aplica a la cancelación de un estudiante si no tiene el pensamiento ‘correcto'».
En otra encuesta se hacían varias preguntas sobre la historia sexual, como la edad que tenía el estudiante cuando tuvo relaciones sexuales por primera vez.
Preguntas como cuánto tiempo el estudiante está solo en casa, dijo Rachmuth, son preocupantes, porque podría ser un disparador para que los servicios sociales retiren a los niños.
«Así que, básicamente, después de preparar a los niños con estas preguntas sexuales, les preguntan si están solos en casa», dijo Rachmuth.
Financiación
Para Rachmuth, la cuestión se reduce a la financiación.
Mientras que algunos republicanos del Senado se han manifestado en contra de que Lee ordene a los ejecutivos financieros del estado que financien el plan, esos mismos republicanos han recibido donaciones de Jim Goodnight, fundador y director ejecutivo de SAS, una empresa de software analítico global de Carolina del Norte, que contribuyó con 250,000 dólares al informe.
A pesar de que los temas de SEL y TCR se presentan como lo que el gobernador Roy Cooper describió como «política cargada de conspiración» conservadora, Rachmuth ha propuesto que han sido los republicanos, además de los demócratas, los que han introducido estos planes de estudio en Carolina del Norte.
«Para mí, la realidad es que los republicanos hablarán con elocuencia y no harán nada», dijo Rachmuth.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
