Al menos 56 personas murieron este fin de semana en una estampida humana tras un enfrentamiento causado por una polémica decisión arbitral al final de un partido de fútbol en Guinea, África.
Las muertes por estampida ocurrieron este domingo 1.° de diciembre durante la final de un torneo entre los equipos de Labé y N’Zérékoré en honor al presidente interino y líder militar de Guinea Mamadi Doumbouya, en el Estadio del 03 de abril en Nzerekore, una de las ciudades más grandes del país, informó el gobierno en un comunicado el domingo.
«El deporte se ha utilizado tradicionalmente para promover la unidad nacional y la cohesión social. Sin embargo, las manifestaciones de descontento con las decisiones arbitrales provocaron el lanzamiento de piedras por parte de los aficionados, lo que dio lugar a estampidas fatales», dijo el primer ministro guineano, Amadou Oury Bah en el mismo comunicado. «Las autoridades hospitalarias han estimado provisionalmente en 56 las víctimas mortales, y en varios heridos».
Los medios de comunicación locales informaron que las fuerzas de seguridad habían intentado utilizar gases lacrimógenos para restablecer la calma tras el caos que se desató a raíz de un polémico penalti.
Oury Bah agregó que los servicios de salud públicos ayudarían a las familias ofreciéndoles apoyo psicológico y médico a los heridos. También señalaron que se llevarán a cabo investigaciones para esclarecer las responsabilidades del fatal incidente.
Un video ampliamente difundido en las redes sociales muestra docenas de personas trepando por los muros del estadio para intentar escapar.
También, videos e imágenes compartidos en Internet mostraban a posibles víctimas alineadas en el suelo. En un video se podían ver más de una docena de cuerpos inertes, incluidos niños. The Epoch Times no pudo verificar de inmediato la autenticidad de las imágenes.
«El deporte debe ser un vehículo de paz y fraternidad, pero las autoridades administrativas y morales locales y la población están llamadas a tomar todas las medidas necesarias para preservar la calma y los fundamentos de la convivencia», señaló Oury Bah.
En un primer momento el gobierno guineano reprobó los incidentes violentos que «empañaron» el partido de fútbol, el domingo.
«Las autoridades regionales están trabajando arduamente para restablecer la calma y la serenidad entre la población», dijo Oury Bah.
Por su parte, Doumbouya, el presidente, ofreció sus condolencias a las familias de las víctimas y «deseo a los heridos una pronta recuperación», a través de un comunicado en Facebook.
«Desde ayer, el gobierno ha estado haciendo todo lo posible para proporcionar los primeros auxilios a este trágico acontecimiento», agregó el presidente interino. «Se ha enviado una misión de emergencia realizada por el Primer Ministro para evaluar las consecuencias».
Con información de Reuters y The Associated Press.
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