La Policía Montada de Ontario detuvo a un grupo acusado de estar detrás de una red de tráfico de personas que introducía a cientos de inmigrantes de Canadá a Estados Unidos, a través de Ontario.
La policía anunció el 6 de junio que había detenido a cuatro personas y que se habían emitido órdenes de detención contra otros cuatro sospechosos implicados en lo que describió como una «red de contrabando de personas a gran escala».
Entre los acusados se encuentran Thesingarasan Rasiah, de 51 años, de Montreal; Joel Portillo, de 38 años, también de Montreal; Justin Rourke, de 43 años, de Saint Regis, Quebec; Shawna Etienne, de 47 años, de Kanesatake, Quebec; Mary June Benedict, de 48 años, de Akwesasne, Ontario; Cheyenne Lewis, de 51 años, también de Akwesasne; Tionna David, de 21 años, de Saint Regis; y Michael McCormick, de 47 años, de Cornwall.
La policía dice que los migrantes eran presuntamente transportados a Estados Unidos por el área de Cornwall, a través de las comunidades a lo largo del río San Lorenzo.
El grupo fue identificado por primera vez en julio de 2022, según el anuncio de la Real Policía Montada de Canadá (RCMP). Los investigadores de la Fuerza de Tarea Regional de Cornwall (CRTF) comenzaron a investigar al grupo, que según la policía se beneficiaba del traslado de migrantes de Canadá a Estados Unidos.
Se presume que cientos de personas fueron trasladadas a través de la frontera entre julio de 2022 y junio de 2023.
«Al parecer, los traficantes cobraban miles de dólares a los migrantes. Las peligrosas travesías nocturnas incluso costaron la vida a algunos migrantes», declaró la RCMP.
«Muchas personas de todo el mundo vienen a Norteamérica buscando desesperadamente una vida mejor. Las redes criminales transnacionales se aprovechan de esa desesperación para lucrarse a costa de estos hombres, mujeres y familias, sin preocuparse por su bienestar», declaró en el comunicado el inspector de la RCMP Etienne Thauvette.
«Si bien la colaboración con nuestros socios fue clave para llevar a este grupo ante la justicia, también me gustaría recordar al público que permanezca vigilante y nos informe inmediatamente si ve actividad sospechosa en nuestras fronteras para ayudar a las autoridades a poner fin a este tipo de explotación peligrosa».
La Policía Montada de la zona de Toronto lanzó el 29 de mayo una campaña de información pública sobre el tráfico ilícito de migrantes.
«Cuando los inmigrantes y sus familias pagan grandes sumas de dinero a los traficantes de inmigrantes por sus servicios de transporte, están contribuyendo al lucrativo negocio de la inmigración ilegal y a las redes de delincuencia organizada en las que participan los traficantes», dice un cartel informativo de la policía.
La policía informó que cualquier persona declarada culpable podría enfrentarse a cadena perpetua.
«Es importante explicar a las familias en Canadá qué riesgos entraña ayudar a un familiar a entrar en el país cuando recurren a estos grupos ilegales o “coyotes”», señaló la RPMC. «Nuestro objetivo es interrumpir el contrabando marítimo ilegal de personas y, a su vez, evitar la pérdida de vidas humanas. Pedimos a nuestra comunidad que esté alerta y llame a la policía para denunciar estos delitos. Se insta a los emigrantes a migrar legalmente».
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