La Policía de Nicaragua del régimen de Daniel Ortega continúa su persecución contra los fieles católicos en una de las fechas más importantes para los devotos como la Semana Santa. Este miércoles cientos de jóvenes católicos que hacían una procesión en Nandaime, celebrando la también llamada Semana Mayor, tuvieron que escapar de los agentes de policía que los perseguían.
En los videos que circulan en redes sociales se ve a cientos de jóvenes vestidos con atuendos largos en su mayoría morados y disfrazados con máscaras de diferentes estilos que caminaban celebrando su procesión tradicional llamada “La Reseña”, que busca representar el camino de Jesús hacia el calvario cuando Judas lo traiciona y lo detienen.
En los fragmentos del video se ven a los cientos de jóvenes caminando en su procesión, antes de dar la vuelta a la calle algunos de ellos gritan: «¡Con cuidado, ahí viene la guardia!», y muchos comienzan a correr.
En otro video se alcanza a ver a lo lejos, en la esquina de una calle casi vacía, a un joven que estaría representando a Jesús con la Cruz deteniéndose en espera del resto de sus acompañantes, cuando de repente aparece la multitud de jóvenes ataviados corriendo y la gente que se encontraba en las calles les grita: ¡por allá, por allá, por allá, por allá!”.
En las imágenes se aprecia que aunque los jóvenes corren huyendo de ser perseguidos por la Policía Nacional no sueltan sus atuendos y tampoco sueltan sus cruces y la banderas blancas con amarillo de la Iglesia católica que llevan consigo.
Esta es la última de una serie de persecuciones religiosas cometidas por la dictadura de Ortega-Murillo en plena Semana Santa. El lunes, un grupo de jóvenes católicos en un municipio de Masaya se vieron obligados a correr para escaparse de la policía que los perseguía para que realizaran su procesión.
En los videos que circulan en redes sociales se aprecia a los jóvenes que caminan por las calles con atuendos de colores intentando realizar la procesión de los Cirineos en el municipio de Nindirí, una tradición que busca remembrar a quien ayudó a Jesús a llevar la cruz camino al calvario.
En otro video del mismo día, se puede ver a un agente de la Policía Nacional reprendiendo a un joven que se encontraba afuera de una iglesia, vestido con un manto morado, y cargando una cruz de madera: “¡Mire, no puede salir con eso eh!”, dijo el agente al joven.
“¿Por qué?”, le preguntó el joven al agente. “Está prohibido”, respondió el agente de la Policía Nacional. “¿Por qué está prohibido?”, insistió el joven.
El régimen nicaragüense prohibió las procesiones públicas desde febrero pasado, cuando no autorizó a celebrar las procesiones de Vía Crucis durante la Cuaresma.
Tras la persecución del lunes, el medio independiente La Prensa, informó que dos jóvenes habían sido arrestados por la policía, uno de ellos habría sido arrestado el mismo lunes y el otro el martes.
Por otro lado, el mismo día el sacerdote panameño Donaciano Alarcón fue expulsado de Nicaragua. Alarcón aseguró este miércoles que fue expulsado de Nicaragua luego de que los agentes de policía del régimen lo acusaran de predicar a favor del obispo nicaragüense Rolando Álvarez, quien fue condenado a más de 26 años por supuestos delitos de “traición a la patria”.
La abogada e investigadora Martha Patricia Molina dijo al medio nicaragüense 100 % Noticias que las prohibiciones de la dictadura sandinista a las procesiones son para que el pueblo no se levante masivamente.
“Ellos le tienen temor a aquel abril del 2018, en donde la gente de manera autoconvocada se manifestó y reclamó sus derechos y el alto a todas las arbitrariedades, entonces erróneamente está pensando que con las manifestaciones de piedad popular el pueblo se va a reactivar y volverá a las protestas”, dijo. “Porque la policía no tiene capacidad de controlar a toda la gente en las 8 diócesis y en la arquidiócesis”.
Con información de EFE.
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