La Policía neerlandesa informó este miércoles de que mantiene arrestados a un ciudadano polaco de 35 años y otro holandés de 21 como principales sospechosos del tiroteo contra el periodista de investigación criminal Peter R. de Vries, que sigue en estado grave en un hospital de Ámsterdam.
Los dos sospechosos están incomunicados, salvo con sus abogados, y pasarán el próximo viernes a disposición judicial, mientras que el tercer arrestado ayer, un joven de 18 años de Ámsterdam, ha sido puesto en libertad sin cargos.
En su comunicado, la policía no ha dado detalles todavía de las primeras conclusiones de los interrogatorios, ni de sus investigaciones. Los agentes llevaron a cabo registros domiciliarios en varios puntos del país e incautaron varios soportes de datos informáticos y munición que podría pertenecer a los detenidos.
Los principales acusados del tiroteo contra el periodista De Vries fueron detenidos anoche en una autopista cerca de La Haya, tras darse a la fuga desde Ámsterdam después del ataque al reportero, conocido por sus investigaciones relacionadas con las organizaciones criminales más peligrosas de Países Bajos.
El tiroteo contra el periodista centra este miércoles la atención de los políticos y las autoridades en Países Bajos, donde múltiples eventos oficiales previstos para la jornada de hoy han sido cancelados por lo ocurrido.
La ministra del Interior y Asunto del Reino, Kajsa Ollongren, consideró lo ocurrido como un “ataque cobarde” y subrayó que “no sabemos cómo ni por qué, pero es un ataque terrible que nos afecta a todos”. Varios ministros se reunirán la tarde de este miércoles con el sindicato de periodistas neerlandeses NVJ para tratar lo ocurrido.
“Ayer nuestra peor pesadilla se hizo realidad. Nosotros, como familia, rodeamos a Peter con amor y esperanza durante esta etapa difícil. Hay aún mucha incertidumbre, pero lo cierto es que todas las declaraciones de respaldo de todo el país nos dan ahora un apoyo enorme”, escribió el hijo del reportero, Royce de Vries, en un tuit en nombre de la familia.
Todavía no está claro quién está detrás del ataque a De Vries, pero el reportero avisó en varias ocasiones de que estaba en la lista negra del narcotraficante y líder de la mafia neerlandesa, Ridouan Taghi, arrestado en 2019 en Dubái, como el criminal más buscado por las autoridades neerlandesas, y fue extraditado a Países Bajos como parte del caso judicial Marengo, un proceso que se ha cobrado ya varias vidas.
El hermano y el abogado del testigo protegido más importante del caso, Nabil B., fueron asesinados a tiros en Ámsterdam en los últimos dos años, en un intento de silenciarlos para que no testificaran en el juicio en marcha contra Taghi y sus hombres.
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