El amor por la historia y la cultura mexicanas motivó a un grupo de músicos japoneses a formar un mariachi y viajar miles de kilómetros para estar en el Encuentro Internacional del Mariachi, que se desarrolla hasta el 2 de septiembre en el Estado de Jalisco, oeste de México.
Vestidos con los trajes típicos de charro, los 10 miembros de la agrupación Mariachi Samurai llegaron hasta el centro histórico de Guadalajara, capital de Jalisco, para ofrecer un recital ante cientos de personas que aguardaban expectantes.
Sam Moreno, fundador del mariachi, habla muy poco español a excepción del que pronuncia cuando interpreta canciones populares mexicanas. Esa limitación no le impide intentar comunicarse con el público, al que anima a gritar y a seguir las melodías.
Las letras de las melodías más conocidas como «El rey» y «La bikina» suenan distintas cuando se conjugan con el acento de los intérpretes, pero el entusiasmo de los músicos anima a cantarlas.
Moreno dice a Efe que desde joven es admirador de la cultura y la música popular mexicanas. Ese interés lo llevó primero a interpretar las canciones de mariachi como solista y luego a formar su propio grupo.
«México tiene mucha cultura, la comida, el baile, y también tiene mucha historia en sus edificios y todo eso nos interesa mucho», afirma ayudado por una traductora.
Su amor por el país es tal que abrió un restaurante de comida mexicana en su natal Tokio, donde el mariachi tiene actuaciones de manera regular.
«Parecen ser culturas distintas pero a mí me encanta la música mexicana; hasta tenemos un restaurante mexicano en Japón. Entonces, yo quería unir estas dos culturas. A lo japoneses nos gusta aprender de otras culturas, y que aunque estemos vestidos así de charros y la gente no sepa qué es, les gusta», expresa.
Vestido con un traje de charro negro con estoperoles dorados que mandó a hacer a la medida, el músico explica que cuando iniciaba con las actuaciones del mariachi interpretaban las melodías en su idioma, pero se dio cuenta de que no transmitían «el mismo sentimiento» y decidió aprenderlas en español.
No es la primera vez que la agrupación japonesa visita la cuna del tequila y del mariachi, pues lo había hecho cuando el Encuentro Internacional del Mariachi tenía apenas unos años.
En 2006, Moreno conoció en Tokio a Rubén Fuentes, compositor de algunas melodías del folkclor mexicano. En el encuentro el japonés reafirmó su amor por la música del país latinoamericano y prometió a Fuentes que viajaría a México tan pronto como pudiera. Dos años después se presentó con su mariachi en Guadalajara.
Este año el mariachi vuelve a esta tierra con un mayor repertorio de melodías y con composiciones propias, explica a Efe Sawaka Katalyna, la cantante principal del conjunto.
«Sí, tenemos canciones originales que componemos y de vez en cuando están en japonés y también en español; son unas canciones mixtas», dice Katalyna en perfecto español, resultado de la década que vivió en este país.
Con el centenario Teatro Degollado como telón de fondo, el Mariachi Samurai interpreta sus canciones «mixtas», en las que mezcla frases de ambos idiomas.
Sin entender completamente, el público observa, escucha y al final les aplaude con mucho ánimo. Algunos los felicitan por difundir la música mexicana, además de tomarse la foto del recuerdo con ellos.
Los japoneses son uno de los principales atractivos del Encuentro Internacional del Mariachi, que durante una semana reúne a músicos de Ecuador, Bolivia, Colombia, Croacia, Italia, Suiza, Australia y Estados Unidos, entre otros países, en recitales públicos que buscan fomentar esta tradición representativa de México.
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