El presidente republicano de la Cámara de Representantes de Arizona, Rusty Bowers, utilizó un movimiento parlamentario para bloquear un proyecto de ley que habría permitido a los legisladores estatales rechazar los resultados de las elecciones.
Bowers impidió que la medida, presentada por el representante estatal John Fillmore, pudiera avanzar asignando el proyecto de ley a cada uno de los 12 comités de la Cámara estatal.
En declaraciones al medio local Capitol Media Services el miércoles, Bowers dijo que no está matando el proyecto de ley 2596 de la Cámara. Pero Bowers señaló que al asignarlo a cada comité, no hay manera de que pueda asegurar la aprobación de cada uno antes de avanzar al piso de la Cámara estatal.
El proyecto de ley, según su redacción, permitiría a la legislatura estatal «convocar una sesión para revisar el proceso de tabulación de las papeletas para las elecciones primarias y generales regulares y, tras la revisión, aceptar o rechazar los resultados de las elecciones».
Y añade: «Si la legislatura acepta los resultados de las elecciones, el escrutinio de las elecciones y las certificaciones y proclamaciones relacionadas, podrá proceder como lo dispone la ley, y la legislatura podrá levantar su sesión».
«Si la legislatura rechaza los resultados de la elección, cualquier elector calificado puede presentar una acción en la corte superior para solicitar que se realice una nueva elección», decía la medida.
Bowers, sin embargo, dijo que cree que la parte del proyecto de ley donde dice que la legislatura puede «[aceptar] los resultados de las elecciones» es inaceptable.
«Le dimos la autoridad al pueblo», dijo a Capitol Media Services. «Para que alguien diga que tenemos autoridad plenaria para anular un voto del pueblo por algo que creemos que puede haber ocurrido, ¿dónde están (las pruebas)?» preguntó Bowers antes de criticar la auditoría del Senado estatal del año pasado sobre los resultados de las elecciones de 2020.
«La cuestión es que, cuando dimos un derecho fundamental al pueblo, no me importa si gano o pierdo, ese derecho era suyo», continuó Bowers, añadiendo que «no voy a volver y a darles una patada en los dientes».
Fillmore, sin embargo, no estuvo de acuerdo, pero señaló que no tiene los votos para destituir a Bowers.
«Hace las cosas como si fuera Dios», dijo Fillmore al medio sobre la decisión de Bowers esta semana. «A veces hay muchos de los legisladores [que] no tienen la fortaleza visceral para hacer lo que es correcto», comentó Fillmore.
Anteriormente, Fillmore dijo a CNN que con su medida intenta «garantizar la integridad del proceso de votación» en Arizona. Los legisladores, continuó, deberían tener la autoridad como «representantes del pueblo» para revisar el recuento de votos.
«Si hay un problema, no estamos anulando nada. Solo tratamos de poner los pies en la tierra y decir: ‘Esto tiene que ser adjudicado'», dijo.
The Epoch Times se puso en contacto con la oficina de Bowers para solicitarle comentarios.
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