El presidente de la Reserva Federal (Fed) de St. Louis, James Bullard, pidió un enfoque más duro para controlar la galopante inflación en Estados Unidos, subiendo las tasas de interés de forma más sustancial, y dijo que la Fed tiene que entrar en acción, según una declaración el 8 de abril.
El banco central está «detrás de la curva» de las tasas de interés, «pero no tanto como parece», ya que la inflación sigue siendo «demasiado alta», consideró el presidente de la FED de St. Louis.
Bullard, quien es el halcón más prominente del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) a favor de una política monetaria más estricta, dijo que un enfoque basado en reglas sugiere que la Fed debería subir su tasa de préstamo a corto plazo de referencia a alrededor del 3.5 por ciento.
Sin embargo, según los datos de CME Group, los mercados están fijando los precios de las tasas de interés, alcanzando una tasa del 3.5 por ciento para el verano de 2023, lo que parece ser un poco más lento de lo que anticipa Bullard.
Sus comentarios se produjeron un día después de la publicación de las actas de la conferencia del FOMC de marzo, que revelaron que los funcionarios de la Fed estuvieron a punto de aprobar una alza de la tarifa de 50 puntos básicos, pero en su lugar se decantaron hacia 25 puntos debido al impacto indeterminado del conflicto en Ucrania.
Los ajustes del mercado de bonos a la nueva política agresiva del banco central, en la que los rendimientos se dispararon, sugieren que los índices no están tan desviados, dijo Bullard.
«Si se tiene en cuenta [el forward guidance], no parece que estemos tan mal. No se han perdido todas las esperanzas. Esa es la esencia de esta historia», dijo a continuación.
Varios miembros del FOMC coincidieron en que la Fed debería empezar a deshacerse de algunos de sus activos en su balance de casi 9 billones de dólares, aproximadamente a un máximo de 95,000 millones de dólares al mes.
La Fed está luchando en un esfuerzo por controlar la inflación, que está funcionando a su ritmo más rápido en más de 40 años.
Bullard sugirió alzas de 100 puntos básicos de aquí a junio e indicó que el tipo de interés de referencia de los fondos federales es ahora demasiado bajo, en un rango que se sitúa entre el 0.25 y el 0.5 por ciento.
«La inflación estadounidense es excepcionalmente alta, y eso no significa un 2.1 por ciento o un 2.2 por ciento o algo así. Significa que es comparable a lo que vimos en la época de alta inflación de los años 70 y principios de los 80», dijo Bullard.
«Incluso si se es muy generoso con la Fed a la hora de interpretar cuál es la tasa de inflación actual (…) habría que subir mucho la tasa de interés oficial», añadió.
Bullard es partidario de la política del difunto presidente de la Fed, Paul Volcker, cuyo impulso para aumentar las alzas de las tasas a principios de la década de 1980 redujo gradualmente la inflación, pero no sin provocar antes una gran recesión.
«La diferencia entre hoy y los años 70 es que los banqueros centrales tienen mucha más credibilidad», dijo.
«En los años 70, nadie creía que la Reserva Federal fuera a hacer nada contra la inflación. Era una época algo caótica. Realmente se necesitaba que [el expresidente de la Fed, Paul] Volcker entrara (…) Él mató al dragón de la inflación y estableció la credibilidad. Después de eso, la gente creyó que el banco central controlaría la inflación», concluyó Bullard.
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