Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) informaron el viernes que el primer caso conocido de ómicron en Estados Unidos se descubrió en una persona que viajó al extranjero y tuvo síntomas a partir del 15 de noviembre.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) calificó la variante el 26 de noviembre como «preocupante». Las autoridades de California informaron de lo que se cree que es el primer caso en Estados Unidos el 1 de diciembre, después de que un viajero internacional viajara el 22 de noviembre de Sudáfrica a San Francisco y desarrollara los síntomas.
«La fecha más temprana de aparición de los síntomas fue el 15 de noviembre en una persona con antecedentes de viaje internacional», dijeron los CDC en una revisión de su cronología que detalla la propagación de ómicron en Estados Unidos.
No se ha asociado ninguna muerte a la variante ómicron en ningún lugar del mundo.
La actualización de los CDC indicó que 22 estados confirmaron al menos un caso de ómicron, y algunos de los casos indican que la propagación en la comunidad está en curso. Alrededor del 33% de esos casos informaron de viajes internacionales durante los 14 días anteriores a la aparición de los síntomas.
«Entre estos casos de COVID-19 atribuidos a la variante ómicron, 34 (79%) se produjeron en personas que completaron la serie primaria de una vacuna contra COVID-19 autorizada o aprobada por la FDA», dijo la agencia.
La agencia dijo además que la mayoría de los primeros casos de ómicron «parecen ser leves», lo que coincide con las declaraciones anteriores de la directora de los CDC, Rochelle Walensky, y de otros funcionarios de salud.
«Existe un desfase entre la infección y los resultados más graves», añadieron los CDC, «y se esperaría que los síntomas fueran más leves en las personas vacunadas y en aquellas con una infección previa de SARS-CoV-2 que en las personas no vacunadas», en referencia a otro nombre del virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
La Organización Mundial de la Salud dijo que la variante ómicron parece ser más contagiosa que la variante delta, aunque se necesitan más datos antes de poder llegar a una conclusión definitiva.
También el viernes, científicos sudafricanos afirmaron que no han visto ningún signo de que la variante ómicron del virus del PCCh esté causando una enfermedad más grave. Sudáfrica fue uno de los primeros países del mundo en notificar la variante.
«Los datos preliminares sugieren que, aunque hay un aumento de la tasa de hospitalización (…) parece que se debe puramente a las cifras y no a la gravedad de la variante en sí, esta ómicron», dijo el ministro de Sanidad, Joe Phaahla, en una conferencia de prensa.
La agencia sanitaria sudafricana informó de más de 22,000 nuevos casos de COVID-19 el jueves, lo que está por debajo de un máximo de más de 26,000 casos diarios del virus del PCCh que se registraron durante un máximo alimentado por la variante delta.
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