Cuatro narcotraficantes, dos de ellos inmigrantes indocumentados, fueron condenados este lunes a penas de prisión luego de declararse culpables de pertenecer a una red de trasiego de cocaína que operaba en el estado de Georgia.
Roberto Garza Méndez, de 34 años; Shadarrian Grimes, de 49; Euklides González Hernández, de 41, y Johnathan Peña, de 27, fueron sentenciados a condenas que van desde 16 años a dos años y medio de prisión, informó este lunes la Fiscalía Federal del Distrito Norte de Georgia.
Garza Méndez y Grimes confesaron haber traficado con 200 kilogramos de cocaína en un periodo de 10 años, según indicaron los fiscales.
Según las autoridades, Garza Méndez, que recibió la pena más severa de los cuatro integrantes de la red, al ser condenado a 16 años de cárcel, ya había sido deportado en dos ocasiones.
«Con las sentencias a estos delincuentes se cierra la puerta a una gran conspiración para vender veneno -cocaína- en nuestras comunidades», declaró Robert J. Murphy, agente especial de la Agencia Federal Antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés) a cargo de la oficina de la ciudad de Atlanta.
La Fiscalía indicó que los arrestos se produjeron luego de varios meses de investigación, después de que los agentes supieran la fecha y hora en que Garza Méndez tenía la intención de vender varios kilogramos de cocaína a Grimes.
Agentes de la DEA y oficiales de la Patrulla Estatal de Georgia siguieron al hispano desde su casa, detuvieron su automóvil y confiscaron un cargamento de cocaína, así como un arma de fuego cargada, agregó la fuente.
Posteriormente, las autoridades allanaron la vivienda del narcotraficante y se incautaron varios kilogramos adicionales de cocaína, 18,000 dólares en efectivo y un rifle cargado.
También ejecutaron una orden de registro en la casa de Grimes y confiscaron 36,000 dólares en efectivo, dinero que pretendía utilizar para comprar la droga, según informaron los fiscales.
Además, hallaron aproximadamente siete kilogramos de cocaína escondidos en el tanque de un compresor de aire en el apartamento de González-Hernández, en Conyers.
«Gracias a los esfuerzos diligentes de nuestros socios, sus días de distribuir cocaína en la comunidad de Atlanta han terminado», dijo el fiscal federal Byung J. «BJay» Pak.
Garza Méndez y González Hernández serán deportados a México una vez que cumplan sus respectivas sentencias, según informaron los fiscales.
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