Los demócratas progresistas están descontentos con el presidente Joe Biden por describir como “ilegal” a la persona presuntamente detrás del asesinato de una estudiante universitaria.
Laken Riley, estudiante de enfermería de 22 años de la Universidad de Georgia, fue presuntamente asesinada el 22 de febrero por José Ibarra, de 26 años, quien ingresó ilegalmente a Estados Unidos procedente de Venezuela.
Durante la parte de inmigración del discurso sobre el Estado de la Unión del presidente Biden el 7 de marzo ante una sesión conjunta del Congreso, la representante Marjorie Taylor Greene (R-Ga.) lo interrumpió y le dijo que “dijera su nombre”, refiriéndose a la Sra. Riley.
De camino al podio, Greene le entregó a Biden una placa con las palabras «Laken Riley».
El presidente Biden recogió la placa cuando Greene gritó, pero confundió el nombre de la víctima con «Lincoln Riley”.
“Lincoln Riley, una joven inocente que fue asesinada por un ilegal”, dijo.
«Así es. ¿Pero cuántos miles de personas están siendo asesinadas por ilegales?, continuó. “A sus padres, les digo, mi corazón está con ustedes siendo yo alguien que también ha perdido hijos”.
Lincoln Riley es el entrenador jefe del equipo de fútbol americano de la Universidad del Sur de California.
A los progresistas no les hizo mucha gracia que el presidente Biden utilizara la palabra «ilegal» para describir al presunto asesino de Riley, que se enfrenta a cargos de asesinato, secuestro y detención ilegal.
“Como inmigrante orgulloso, estoy extremadamente decepcionado de escuchar al presidente Biden usar la palabra ‘ilegal’”, publicó el representante Chuy García (D-Ill.) en X, anteriormente Twitter.
“Ningún ser humano es ilegal”, publicó la representante Delia Ramírez (D-Ill.) en X.
La representante Cori Bush (D-Mo.) se hizo eco de esas palabras en una publicación.
«Ningun ser humano es ilegal. Así como no deberíamos implementar una política republicana, no deberíamos repetir la retórica republicana”, publicó la representante Ayanna Pressley (D-Mass.) en X.
“Permítanme ser clara: ningún ser humano es ilegal”, publicó la representante Ilhan Omar (D-Minn.) en X.
«Ningun ser humano es ilegal. Debemos crear un camino hacia la ciudadanía para los Dreamers. Los estadounidenses apoyan a los Dreamers. Los soñadores apoyan a Estados Unidos”, publicó la representante Sylvia García (D-Texas) en X.
“Ningún ser humano es ‘ilegal’. El presidente Biden usó esa palabra durante su discurso de anoche. Eso está mal. El cambio comienza con las palabras que elegimos”, publicó el destacado periodista de habla hispana, Jorge Ramos.
“Es muy decepcionante escuchar a Biden usar esta noche el odioso insulto derechista de ‘ilegal’. Y justo antes de comprometerse a nunca demonizar a los inmigrantes. Quizás la interrupción lo desconcertó.
“De todos modos, debería disculparse y repudiar el término. Ningun ser humano es ilegal. Nunca”, publicó Kai Newkirk, fundador del grupo activista For All, en X.
La polémica se produjo horas después de que la Cámara de Representantes, donde el Presidente Biden pronunció su discurso, aprobara la Ley Laken Riley, que obligaría al secretario de Seguridad Nacional a detener a los inmigrantes ilegales que hayan sido acusados en Estados Unidos de delitos relacionados con robos.
El proyecto de ley fue aprobado principalmente por líneas partidistas, 251 a 170, y 37 demócratas se unieron a todos los republicanos que estaban presentes cuando la Cámara se volvió a reunir para votar a la 1:30 p.m.
La legislación pone de relieve el caos que rodea la frontera sur, un tema de creciente preocupación nacional.
Requeriría que el jefe de Seguridad Nacional emita una orden de detención para cualquier inmigrante ilegal acusado de hurto, robo o atraco en tiendas si esa persona “no es detenida por funcionarios federales, estatales o locales”.
La legislación también permite a los fiscales generales estatales u “otros [funcionarios] estatales autorizados” presentar una acción contra el secretario si hay una violación de los “requisitos de detención y expulsión”.
Si un fiscal general estatal cree que un inmigrante ilegal fue acusado de robo y no fue detenido por las autoridades federales (y que la violación de la detención perjudicó a los residentes del estado del fiscal general), él o ella puede entablar acciones contra el secretario y el fiscal general de Estados Unidos en virtud del proyecto de ley.
Entre los daños al estado y sus residentes, se incluyen “daños financieros que exceden los USD 100”.
Jacob Burg y Joseph Lord contribuyeron a este artículo.
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