Un abuelo de Massachusetts fue sancionado con una orden de prohibido el paso tras repartir volantes en un foro dirigido por unos padres, cuyo objetivo era educar a otros acerca de la ideología woke que están imponiendo a sus hijos en las escuelas locales.
Se trata de Larry Russell, quien tiene varios nietos en las escuelas de Newburyport. A través de una carta fechada el 12 de octubre, el superintendente Sean Gallagher le dijo que se mantuviera alejado de las instalaciones escolares y le advirtió que sería arrestado si no cumplía la orden.
La carta emitida a Russell coincidió con la semana en la que la pequeña ciudad costera fuera particularmente mencionada en una investigación federal del Congreso dirigida por los republicanos, sobre un presunto mal uso de los fondos de emergencia contra COVID por parte de las escuelas públicas de Estados Unidos para financiar programas liberales como la enseñanza de la teoría crítica de la raza y la afirmación de género de los niños.
Newburyport está acusada de utilizar el dinero de la Ayuda de Emergencia para Escuelas Primarias y Secundarias para contratar consultores que promuevan las agendas woke, incluyendo uno que supuestamente realizó un experimento N-Word entre el personal.
Russell, que tiene 73 años, dijo a The Epoch Times que se sorprendió al ver que tres patrullas de la policía se acercaron a él mientras repartía folletos para el evento, el que estaba programado para la noche del 20 de octubre a las 6:30 p.m. en el refugio local Elks.
El evento se titulaba «Lo que todos los padres deben saber sobre el aprendizaje socio-emocional» e incluía una presentación de Jennifer McWilliams, una maestra de Indiana que ganó notoriedad nacional después de ser despedida en 2020 por denunciar públicamente el programa de aprendizaje socio-emocional de su escuela como una agenda dañina impulsada por los liberales.
Russell dijo que estaba repartiendo volantes del evento a los padres mientras ellos estaban sentados en la línea de espera de los automóviles para recoger a sus hijos en la escuela Edward G. Molin Upper Elementary.
Él también repartió folletos a los padres en la cola para recoger a los alumnos en la escuela secundaria Nock, donde el profesorado también llamó a la policía por Russell.
«Yo debería tener derecho a estar en una acera pública y no debería ser amenazado por algún [improperio] que se cree Dios», dijo Russell, «y todos lo hacen. Hoy en día, todos los del lado progresista se creen dioses».
Russell dijo que durante mucho tiempo se había considerado liberal, ya que la mitad de sus 10 nietos son afroestadounidenses, pero recientemente se unió al grupo local de Ciudadanos por una Educación Responsable, que organizó el evento del foro.
En su carta a Russell, Gallagher le acusó de ser «abusivo, irrespetuoso» y de utilizar «blasfemias» contra una profesora de la escuela cuando ella le pidió que se marchara.
«Su comportamiento causó una interrupción significativa del proceso de salida de la escuela», escribió Gallagher. También dijo que Russell volvió a la escuela después de que la policía le dijera que se fuera y no volviera.
Russell negó las afirmaciones y dijo que una profesora le empujó físicamente mientras mantenía una conversación con uno de los padres.
Jim Baribeault, otro abuelo local, dijo a The Epoch Times que cuando trató de colgar volantes en la biblioteca de la escuela de Newburyport para el foro de padres, se le dio una variedad de razones de por qué no se podía colgarlos y, finalmente, se le dijo que no se podía colgar porque no cumplía con la declaración de la misión de la biblioteca.
Baribeault señaló que la misma biblioteca colgó carteles anunciando un baile de drag queen adolescente en mayo y que en el momento de su solicitud para colgar el volante, vio un volante anunciando un próximo evento a favor del aborto de un grupo local de mujeres.
La biblioteca también aprobó un volante para un evento titulado «Más allá de la fragilidad blanca: Cavando más profundo».
Uno de los debates previstos para dicho evento es sobre «cómo los blancos progresistas perpetúan inconscientemente el daño racial».
El panel de anuncios de la biblioteca para poner los volantes de la comunidad también incluye un volante de pie para la Alianza de North Shore de LGBT que aparece con el acrónimo NAGLY.
Cuando Baribeault se quejó del doble estándar, la bibliotecaria jefe, Sara Kelso, le envió un correo electrónico en el que le informaba de que, tras la revisión de las «directrices y procedimientos actuales» de la biblioteca, el volante se había publicado en el tablón de anuncios de la comunidad de la biblioteca».
Sin embargo, un día después de que se expusiera el folleto, el alcalde de Newburyport, Sean Reardon, lo retiró personalmente.
En una declaración escrita a The Epoch Times, Reardon dijo que retiró el volante porque el grupo de padres —Ciudadanos por una Educación Responsable— que organizó el evento «no estaba en línea con los valores de la ciudad de ser una comunidad inclusiva y acogedora».
«Los paneles de anuncios de la ciudad son principalmente para las organizaciones sin ánimo de lucro y nos reservamos el derecho a retirar los folletos que no sean coherentes con los valores de la ciudad», dijo Reardon.
Reardon calificó al mismo grupo como «un puñado de malos actores» cuando se opusieron a un baile de adolescentes organizado por una drag queen a principios de este año.
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