Se proyecta que el partido de derecha Reagrupamiento Nacional gané la mayor parte de los votos en la primera ronda de las elecciones parlamentarias de Francia el 30 de junio.
Las proyecciones preliminares indican que el partido del presidente francés Emmanuel Macron está en camino a una derrota en la Asamblea Nacional, donde hay 577 escaños en disputa. Los primeros resultados muestran que el partido de Macron está detrás tanto del partido de derecha como de la coalición de izquierda.
Según las primeras encuestas a pie de urna de Ipsos, se espera que Reagrupamiento Nacional, el principal partido populista de derecha de Francia, gane alrededor del 34 % de los votos. La coalición de izquierda Nuevo Frente Popular está en camino a obtener el segundo lugar, con alrededor del 28.1 %.
Mientras tanto, se espera que el partido de Macron quede en tercer lugar, con alrededor del 20.3 % de los votos.
Estas elecciones atrajeron una participación inusualmente alta, con informes que señalan una participación de alrededor del 60 % de los votantes franceses, con algunas horas aún por delante.
Sin embargo, los resultados de hoy, si las encuestas de salida resultan precisas, sólo representan la primera ronda de votación. Las contiendas en las que un candidato no logró obtener el 50 % o más de los votos pasarán a una segunda vuelta el 7 de julio.
Los resultados representan la mayor victoria de la derecha en Francia desde el final de la Segunda Guerra Mundial y podrían representar un terremoto político para la República Francesa si la Agrupación Nacional expande su liderazgo a una mayoría en la segunda vuelta de votación.
Algunas de esas contiendas incluirán hasta tres contendientes.
Ganar una mayoría parlamentaria permitiría a la líder de Agrupamiento Nacional, Marine Le Pen, instalar a su protegido de 28 años, Jordan Bardella, como primer ministro. Ella heredó el partido, entonces llamado Frente Nacional, de su padre, Jean-Marie Le Pen.
Dirigiéndose a una multitud jubilosa ondeando banderas tricolores francesas de azul, blanco y rojo, Le Pen hizo un llamado a sus seguidores y a los votantes que no apoyaron a su partido en la primera ronda para que lo empujen a la victoria y le den una mayoría legislativa contundente. Ese escenario obligaría a Bardella y a Macron a un arreglo de poder compartido. Macron ha dicho que no renunciará antes de que termine su mandato en 2027.
Solo la segunda vuelta aclarará si el partido de Le Pen y sus aliados obtienen la mayoría absoluta que necesitarían para formar un gobierno con comodidad y luego comenzar a implementar sus promesas de desmantelar muchas de las políticas clave de Macron y sus plataformas de política exterior. Eso incluiría detener las entregas francesas de misiles de largo alcance a Ucrania en la guerra contra la invasión a gran escala de Rusia.
Mientras tanto, los partidos centristas y de izquierda están ansiosos por recuperar la iniciativa del partido Reagrupamiento Nacional durante la segunda vuelta.
En ambos campamentos, tanto el de Macron como el de la izquierda, los líderes de los partidos y coaliciones están llamando al contendiente que quedó en tercer lugar a retirarse de la carrera para mejorar las posibilidades de derrotar al candidato de Reagrupamiento Nacional.
El partido Renacimiento de Macron anunció que en las contiendas donde sus candidatos quedaron en tercer lugar, su candidato «se retirará a favor de los candidatos en posición de vencer a Reagrupamiento Nacional y con quienes compartimos lo esencial: los valores de la República».
«Frente a la amenaza de una victoria de la extrema derecha, llamamos a todos los grupos políticos a actuar con responsabilidad y hacer lo mismo», dijo el partido.
Les Républicains, otro partido conservador, se proyecta que obtendrá alrededor del 10 % de los votos. Actualmente, el partido indica que no emitirá respaldos para la segunda vuelta.
«[En las contiendas] donde nuestros candidatos no estén presentes en la segunda vuelta, considerando que los votantes son libres de elegir, no daremos instrucciones nacionales y dejaremos que el pueblo francés se exprese según su conciencia», escribieron Les Républicains en un comunicado.
Las elecciones anticipadas fueron ordenadas por Macron el 9 de junio después de una derrota de su partido en las elecciones parlamentarias de la Unión Europea en la nación.
En esa elección, Reagrupamiento Nacional salió con márgenes aproximadamente iguales, ganando alrededor del 32 por ciento de los votos, márgenes tan devastadores para Macron que decidió disolver la Asamblea Nacional para allanar el camino para las elecciones de hoy.
Con la segunda vuelta aún por venir, no está claro si Reagrupamiento Nacional ganará finalmente una mayoría.
Dado su estatus de outsider en la política francesa, al partido probablemente le resultará difícil formar un gobierno de coalición si no obtienen la mayoría de los escaños en la asamblea.
Si Reagrupamiento Nacional sale de la segunda vuelta con una mayoría, el líder del partido, Jordan Bardella, se convertiría en primer ministro de Francia.
En una declaración después de los resultados, Bardella prometió ser un líder unificador si el pueblo francés le da a su partido una mayoría absoluta. «Tengo la intención de ser el primer ministro de todos los franceses, atento a cada uno, respetuoso con la oposición, preocupado por la unidad nacional», dijo.
Tal resultado, llamado «cohabitación» en el modelo francés, representando un estado de cosas donde el primer ministro y el presidente comparten diferentes agendas políticas, sería devastador para Macron y garantizaría efectivamente que se vería obstaculizado en su agenda doméstica hasta que termine su mandato final en 2027.
Con información de The Associated Press
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