Un proyecto de ley propuesto en Alabama le dará a un empleado el derecho de emprender acciones legales contra su empleador si una persona se lesiona por una vacuna anti COVID-19 que el empleador ordene.
El proyecto de ley 16 de la Cámara de Representantes en realidad se redactó a principios de año, sin embargo éste acaparó la atención de los medios de comunicación tras el discurso del presidente Joe Biden del 10 de septiembre, en el que anunció nuevos requisitos federales en materia de vacunas, dijo a The Epoch Times el representante estatal de Alabama, Tommy Hanes, patrocinador republicano de la legislación.
Una parte de los requisitos de Biden consiste en obligar a las empresas privadas con 100 o más empleados a que el personal se vacune o se someta a pruebas semanales para detectar la presencia del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como el nuevo coronavirus, el agente patógeno que causa la enfermedad de COVID-19.
Tras el discurso de Biden, Hanes dijo que ahora planea revisar el proyecto de ley o redactar una nueva versión con una cláusula que también proteja al empresario.
Si el proyecto de ley actual se aprueba, pondría al empleador en la posición de violar consecuentemente la ley federal al adherirse a la ley estatal.
El proyecto de ley establece que un empleado y sus dependientes tienen «derecho a interponer una demanda contra un empleador por cualquier reacción adversa, lesión, incapacidad temporal o permanente, o muerte», como resultado de la vacuna anti COVID-19 impuesta por dicho empleador.
Lo que impulsó la idea del proyecto de ley, dijo Hanes, fue escuchar una opinión legal que afirma que, debido a que Alabama es un estado «a voluntad», el empleador puede obligar a vacunar al empleado. Un estado a voluntad significa que un empleador puede despedir a un empleado en cualquier momento.
«Este proyecto de ley trata de las libertades individuales», dijo Hanes. «Aunque seamos un estado con voluntad propia, eso solo llega hasta cierto punto. No significa que el empleador sea su dueño».
La premisa de una orden de vacunación, dijo Hanes, se basa en una noción de propiedad.
«Es como mi perra: si mi perra pudiera hablar y decir ‘no, no quiero la vacuna de la rabia’, bien, ella no puede decir nada al respecto porque yo soy su dueño», dijo Hanes.
Un empleado, dijo Hanes, es un negocio individual.
«Los empleados venden su tiempo y su trabajo a ese empleador porque ellos necesitan comprarle eso», dijo Hanes. «Los empleados realmente trabajan para sí mismos. Una vez que un hombre o una mujer da un día de trabajo justo por un salario justo, entonces ha cumplido su parte del trato».
En relación al discurso de Biden sobre la orden de vacunación, Hanes se refirió al equilibrio de poder entre el gobierno federal y los estados.
«El gobierno federal fue creado por los estados, con un poder limitado», dijo Hanes. «La ley federal no siempre sustituye a la ley estatal».
El representante añadió que la Décima Enmienda y la Doctrina de Anticomandancia se establecieron para limitar la extralimitación federal y ha sido el argumento ganador en varios casos en la Corte Suprema de Estados Unidos, que ha anulado la ley federal «en numerosas ocasiones».
«Estoy seguro de que si este proyecto de ley se aprueba, el gobierno federal llevaría al estado de Alabama a los tribunales, pero hay cosas por las que merece la pena luchar», dijo Hanes. «Merece la pena luchar por las libertades individuales».
Alabama es uno de los 27 estados con gobernadores o fiscales generales republicanos que han declarado que lucharán contra la orden ejecutiva de Biden.
El fiscal general de Alabama, Steve Marshall, dijo en una declaración sobre la orden de vacunación que el estado de Alabama demandará para bloquear la orden.
«La orden de vacunación no tiene precedentes en su audacia y es ilegal en su aplicación», dijo Marshall. «La administración Biden lo sabe muy bien».
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
