Las personas interesadas en comprar determinadas armas de fuego semiautomáticas podrían no poder hacerlo por un nuevo proyecto de ley apoyado por más de dos docenas de demócratas.
El viernes, el representante Don Beyer (D-Va.) presentó una ley que impondría un impuesto especial del 1000% a la compra de «armas de asalto» y «dispositivos de alimentación de munición de gran capacidad». El impuesto especial significa que alguien que quiera comprar un rifle de 500 dólares, por ejemplo, tendría que pagar 5000 dólares más sobre el precio de compra.
Otros 24 legisladores demócratas han copatrocinado el proyecto de ley, aunque el Sr. Beyer aún no ha presentado el texto del proyecto.
La redacción del próximo proyecto de ley podría seguir el mismo modelo que un proyecto de ley que propuso el Sr. Beyer el año pasado, al que llamó «Ley de Impuestos Especiales sobre Armas de Asalto». La propuesta del año pasado seguía la misma premisa de imponer un impuesto del 1000% a las compras de «armas de asalto» y «dispositivos de alimentación de munición de gran capacidad».
La ley federal ya impone un impuesto especial del 10 al 11 por ciento sobre todas las compras de armas.
Proyecto de ley de 2022
El proyecto de ley de 2022 del Sr. Beyer definía los «dispositivos de alimentación de munición de gran capacidad» como aquellos fabricados o susceptibles de ser modificados para contener más de 10 cartuchos de munición. Según el proyecto de ley de 2022, las «armas de asalto» incluyen los rifles semiautomáticos con culata ajustable, empuñadura de pistola, empuñadura delantera, cañón roscado o lanzagranadas funcional que también pueda aceptar un cargador desmontable, o un rifle semiautomático con un cargador fijo capaz de contener más de 10 cartuchos de munición. Este lenguaje abarcaría los rifles semiautomáticos de propiedad generalizada, como el AR-15.
Una pistola semiautomática que es compatible un cargador extraíble y que tenga un cañón roscado, un protector de cañón, una segunda empuñadura de pistola, compatible con un cargador en cualquier punto distinto de la empuñadura de pistola, que pese más de 50 onzas o que incluya un soporte estabilizador o un tubo amortiguador que sobresalga también se considera un «arma de asalto» según el proyecto de ley de 2022, al igual que una pistola con un cargador fijo con una capacidad superior a 10 cartuchos.
Una escopeta semiautomática con un cargador fijo de capacidad superior a cinco cartuchos o compatible con un cargador desmontable, que además tenga empuñadura o culata ajustable, también se considera «arma de asalto» en el proyecto de ley de 2022.
El Sr. Beyer propuso la «Ley de Impuestos Especiales sobre Armas de Asalto» de 2022 como medio de sortear la oposición republicana a las prohibiciones totales de armas como las que describe su proyecto de ley.
«En el pasado he votado a favor de reformas de sentido común en materia de seguridad de las armas, sólo para verlas varadas por el filibusterismo de los republicanos del Senado; mi proyecto de ley presenta una vía para eludir esa obstrucción y promulgar medidas que salvan vidas», dijo entonces el Sr. Beyer.
El proyecto de ley de 2022 nunca pasó de la fase introductoria, a pesar de que los compañeros demócratas del Sr. Beyer tenían la mayoría ese año. Este último intento de imponer un impuesto especial prohibitivo podría tener aún más dificultades, ya que los republicanos se hicieron con la mayoría en la Cámara de Representantes tras las elecciones legislativas de 2022.
NTD News se puso en contacto con la oficina del Sr. Beyer para pedirle comentarios, pero no recibió respuesta en el momento de la publicación de este artículo.
Los activistas por los derechos de las armas condenan los planes de impuestos especiales
El Sr. Beyer no es el único legislador que propone aumentar los impuestos especiales sobre la compra de armas y municiones. Legisladores estatales han propuesto ideas similares en California y Connecticut.
En 2019, el gobernador demócrata de Nueva Jersey, Phil Murphy, también propuso imponer un impuesto especial a la compra de armas y municiones, así como aumentar las tarifas de las licencias. La petición del Sr. Murphy de un impuesto especial del 2.5% sobre las compras de armas fue recibida con críticas por parte de la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés).
«Estos impuestos antiarmas afectarían sobre todo a los residentes con bajos ingresos, probablemente excluyendo a muchos de ellos del mercado de las armas, a pesar de que suelen vivir en las zonas de mayor criminalidad del estado», dijo la NRA sobre las propuestas del Sr. Murphy.
Después de que el Sr. Beyer presentara su proyecto de ley 2022, la Asociación Nacional por los Derechos de las Armas (NAGR, por sus siglas en inglés) planteó preocupaciones similares sobre la exclusión de los ciudadanos corrientes del mercado de la defensa personal.
«Estas personas que tienen dinero para ser protegidas por hombres armados quieren impedir a los ciudadanos comunes», dijo Ryan Fraser, director adjunto de Operaciones Políticas de la NAGR, en un podcast de agosto de 2022. «¿Cuánto cuesta un [AR-15] normal hoy en día? ¿Entre 500 y mil dólares? Puede ser más caro, puede ser más barato, pero un AR-15 de 500 dólares se convierte en un AR-15 de 5500 dólares, dejando totalmente fuera la posibilidad a los estadounidenses comunes, a los propietarios de pequeños negocios que operan en barrios malos, a la madre soltera con un excónyuge violento… a la gente que realmente lo necesita».
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