La película “Nefarious: La palabra del diablo” hizo reflexionar al público mexicano sobre la injerencia del mal en la humanidad, tras su estreno en los cines de México. El filme ha dado de qué hablar por su enfoque en temas como la fe, el aborto y la eutanasia.
Nefarious, de la productora Believe Enterteinment, desarrolla la historia de un asesino convicto que el día de su ejecución programada recibe una evaluación psiquiátrica, durante la cual afirma que es un demonio.
El psiquiatra ateo James Martin, interpretado por el actor Jordan Belfi, es el encargado de evaluar la cordura del preso Edward Wayne Brady, personificado por el actor Sean Patrick Flanery, para determinar si finalmente será ejecutado en la silla eléctrica.
Al inicio de la evaluación psiquiátrica, Wayne le advierte a Martin que antes de que termine el día cometerá 3 asesinatos. Martin se da cuenta que, desde la perspectiva del mal, la eutanasia de su madre, el aborto de su pareja y la pena de muerte del propio Wayne son los crímenes que él comete.
Los directores de la película, Chuck Konzelman y Cary Solomon, son reconocidos por abordar estos temas controvertidos en películas como “Dios no está muerto” e “Inesperado”.
Después de asistir a una proyección de la película en Ciudad de México, la abogada Inés Rodríguez dijo en entrevista a The Epoch Times México que la película la hizo reflexionar sobre cómo el demonio actúa para corromper a la humanidad, desde el nivel personal hasta la sociedad.
“El demonio sí actúa en nuestra vida también a nivel personal y puede ir tomando campo en nuestras vidas. A esta persona que estaba poseída, el demonio va contando cómo fue que él le fue abriendo las puertas (…) con pequeños pecados”, dijo Rodríguez, y destacó que incluso al hacer “pequeñas cositas, es de dónde el demonio se vale para ir entrando a nuestras vidas y ganando más terreno”.
Rodríguez destacó que el mensaje más importante de la película es que el demonio celebra ciertas cosas como “el aborto y la eutanasia”, lo cual considera “una victoria para él”.
“Por eso es súper importante también luchar contra esas pequeñas cosas, o sea, esos pequeños desafíos que tenemos día a día y sobre todo también estar en estado de gracia. O sea, hacer examen de conciencia y arrepentirnos”, destacó Rodríguez.
La abogada considera que esta es una película que puede ver cualquier tipo de público porque es una película que no pone a Dios como el centro del asunto, sino que toca la existencia del bien y el mal desde la injerencia de este último en la humanidad.
“Creo que lo abordó muy bien (…) porque hoy en día vivimos en la posverdad. O sea, típico que todo es relativo, (…) esta es tu verdad y esta es mi verdad, y no es así. O sea, realmente sí existen cosas buenas, sí existe el mal, existe el bien y sí existe Dios y también existe el demonio”, reflexionó Rodríguez.
Por su parte, la abogada Elena Resendiz comprendió el mensaje de la película como una batalla entre las “fuerzas del bien y el mal”.
“Yo creo que se debe hacer una reflexión al interior de cada quien. (…) Yo creo que eso es algo en particular, la reflexión que debe hacer uno [a] diario y en las acciones personales”.
Por otro lado, la espectadora Noemí Resendiz destacó, desde su perspectiva, que lo más relevante de la película fue el psiquiatra cambiando su perspectiva atea para hacer una advertencia a la humanidad.
“Al final del día los demás no son el villano, uno mismo es el villano, y es impresionante, la verdad” dijo Resendiz.
Nefarious llegó a la pantalla grande el pasado 9 de noviembre al país azteca y actualmente se encuentra en cartelera en los cines de todo el país.
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